Una bella actriz. Un lord déspota. ¿Un divorcio que acaba en asesinato?
Hércules Poirot y su fiel amigo, el capitán Hastings, reciben un encargo inusual de una bella actriz, Jane Wilkinson. Casada con el déspota aristócrata inglés lord Edgware, éste se niega a concederle el divorcio, de ahí que requiera la ayuda del célebre investigador belga. Sin embargo, para sorpresa de Poirot, el aristócrata afirma que hace ya tiempo envió una carta a su esposa aceptando su demanda. La alegría de la actriz al conocer la noticia es inmensa, pero lo que parecía un asunto resuelto se complica de forma inesperada: lord Edgware aparece apuñalado en su mansión, y la secretaria y el mayordomo del noble asesinado afirman que la mujer vestida de negro que solicitó ver a lord Edgware la noche de su muerte no era otra que su esposa, Jane Wilkinson.
«Vienen los persas». Tras oír estas palabras, Gorgo de Esparta entra en un peligroso mundo de dioses vengativos y héroes invencibles. Ahora sabe que un poderoso imperio amenaza a Atenas y a Esparta y quiere apoderarse de toda Grecia. Como princesa espartana, la sangre de Zeus corre por sus venas y le confiere el antiguo poder de transformarse en loba. Gorgo tendrá que recurrir a todo su valor y astucia para liderar a su ciudad en la mayor guerra de la historia, en la que combatirán hasta los propios dioses.
Este libro está basado en el testimonio de 22 prostitutas cubanas, que ejercen su oficio en la República Dominicana, cada una de ellas desnuda su vida y cuentan cómo empezaron a trabajar como jineteras en Cuba o debutaron en una noche cualquiera, en esta otra tierra, pero al ser cubanas se les conoce como jineteras importadas.
Mujeres que hacen uso del sexo para obtener alimentos, ropa, dinero, objetos de valor un vehículo y por qué no decirlo, una visa para cualquier lugar del mundo.
«Pero tú no eres mi hermana, nunca lo fuiste. No hemos jugado, comido, dormido juntas. Nunca te toqué, nunca te besé. No sé de qué color tienes los ojos. Nunca te he visto. No tienes cuerpo ni voz, solo eres una imagen plana en unas cuantas fotos en blanco y negro. No conservo ningún recuerdo de ti. Llevabas dos años y medio muerta cuando nací yo. Tú eres la criatura del cielo, la niñita invisible de la que nunca se habla, la ausente de todas las conversaciones. El secreto.» «La otra hija» es una larga carta que Annie Ernaux le escribe a Ginette, la hermana muerta a la que nunca conoció, pero cuya sombra siempre la acompaña desde aquel lejano domingo de agosto de 1950 en el que descubrió accidentalmente su existencia.
En algún lugar de Centroeuropa, en torno al 6.000 a.C, en plena transición al neolítico, Dira, una mujer cazadora, decide seguir su innata curiosidad y salir más allá de su poblado en busca de pruebas que demuestren aquello de lo que hablan distintas leyendas: que los mamuts están desapareciendo de la tierra. Su intención es ver el último ejemplar de esa majestuosa criatura solo comparable a una montaña en movimiento, aunque ello ponga en peligro su vida. Mongolia, siglo XXI, Khünbish, un paria aplastado por todo tipo de calamidades, es informado del negocio de los colmillos de mamut enterrados en el permafrost siberiano colindante al círculo polar ártico y decide agarrarse a esta última oportunidad para cambiar su suerte.
La parta blanda de la montaña narra el fascinante viaje sin retorno de dos personajes separados por siglos de historias y culturas, un periplo físico y espiritual que los llevará a transitar las fronteras entre lo vivo y lo inerte, entre lo que desaparece para siempre y lo que la tierra nos devuelve tras haber estado enterrado durante siglos.