EL ENCIERRO
Rhawsin, la cárcel de la que nadie sale con vida, también llamada la Pesadilla de Dybria, es el nuevo hogar de Alessa. Traicionada por las reinas, separada de Derek y de sus amigos, y obligada a luchar cada día por su supervivencia, su única esperanza yace en la fuga. Pero ¿cuántas veces podrá desafiar al destino antes de que todo acabe en tragedia?
LOS SUEÑOS
El único refugio de Alessa son los sueños, en los que las palabras «Que la magia de Dybria nos acompañe» se repiten como un eco. ¿Qué significan? ¿Y quién es la misteriosa mujer que las dice? Quizá la misión de Alessa en Dybria aún no haya acabado y su papel en esta lucha sea mucho más complejo de lo que nunca hubiese imaginado.
EL DESTINO
Pero su destino está ligado al de Derek y Alessa también llegará hasta él, aunque para conseguirlo deba reclutar a todas las criaturas mágicas de Dybria y enfrentarse a los ejércitos de la Corte. Pero, cuando se reencuentren, ¿será el Derek que conocía? Si es que alguna vez llegó a conocerlo de verdad.
Eran perfectos el uno para el otro hasta que se conocieron.
MISHA
Mi profesora creyó que Ryen era un chico; la suya que yo, Misha, era una chica y las dos, completamente equivocadas, nos juntaron para ser amigos por correspondencia. No nos costó mucho darnos cuenta del error, pero ya habíamos hablado de todo: ¿la mejor pizza de la ciudad? ¿iPhone o Android? ¿Es Eminem el mejor rapero de todos los tiempos? Y ese fue nuestro principio.
No me escribía con regularidad: a veces me llegaba una carta a la semana. Otras, tres en un día. Daba igual. Las necesitaba. Solo teníamos tres reglas. Sin redes sociales, sin teléfono, sin fotos. Teníamos algo bueno. ¿Por qué arruinarlo?
Hasta que un día, encuentro la foto de una chica llamada Ryen, que ama la pizza de Gallo’s y adora su iPhone. ¿Demasiada casualidad? Joder. Necesito conocerla. Solo espero no odiarla.
RYEN
Misha no me ha escrito en tres meses. Algo pasa. ¿Habrá muerto? ¿Estará en la cárcel? Conociéndolo, cualquier cosa es posible. Sin él, me estoy volviendo loca. Y es mi culpa, debí pedirle su número de teléfono, o una foto. Algo. Puede que se haya ido para siempre. O puede que esté delante de mis narices y yo ni siquiera lo sepa.
Lucas normalmente es un tío despreocupado y seguro de sí mismo, y ahora tiene el ego herido. Las palabras de Nuria se quedan en su mente como un abejorro molesto, aunque se dice a sí mismo que al menos no tiene por qué volver a verla nunca más... Pero el destino tiene otros planes para ellos: Nuria resulta ser la camarera del bar más cercano a su nuevo trabajo, y se va a apañar para sacarle de sus casillas a diario. Por si fuera poca tortura verla cada mañana, por culpa de Lorena también se va a ver obligado a trabajar con ella por las tardes. Es inevitable que, cuando se junten, salten chispas
Lucas normalmente es un tío despreocupado y seguro de sí mismo, y ahora tiene el ego herido. Las palabras de Nuria se quedan en su mente como un abejorro molesto, aunque se dice a sí mismo que al menos no tiene por qué volver a verla nunca más... Pero el destino tiene otros planes para ellos: Nuria resulta ser la camarera del bar más cercano a su nuevo trabajo, y se va a apañar para sacarle de sus casillas a diario. Por si fuera poca tortura verla cada mañana, por culpa de Lorena también se va a ver obligado a trabajar con ella por las tardes, en temas... algo candentes. Es inevitable que, cuando se junten, salten chispas, pero ¿es mejor evitar arder o dejarse consumir por las llamas?
UN FROM FRIENDS TO LOVERS ADICTIVO
Noa y Wes son amigos desde los seis años.
Y se ha dado cuenta de que está enamorada de él.
Lo que no sabe es que Wes siente lo mismo por ella.
Y que, al parecer, no es el único…
Mientras buscan el valor para confesar lo que sienten intentando que todo siga igual, se desvelarán algunos secretos que sacudirán su mundo y el de sus amigos.
Una historia de crecimiento, llena de sentimientos y, sobre todo, del valor necesario para que el cambio sea el comienzo de todo.
Una beca. Una apuesta. Dos amigos que pasaron de no serlo a poder ser, quizás, algo más
A pesar de todo lo que va mal en su vida, a Sasha Johnson-Sun le queda el consuelo de graduarse como la mejor alumna de su promoción, con la beca correspondiente. Pero resulta que está empatada con otra persona: su estúpidamente brillante ex mejor amigo Ezra Davis-Goldberg.
Para solucionarlo, escogen varias metas académicas y se apuestan la beca al mejor de tres. Sin embargo, la competición los obliga a pasar juntos más tiempo del que esperaban y a evaluar no solo por qué dejaron de ser amigos, sino también en quiénes se han convertido desde entonces. El futuro de Sasha está en juego, y debe ganar esa apuesta cueste lo que cueste. Pero ¿y si el precio es su corazón?