«Por su esfuerzo por salvaguardar la libertad de expresión como condición imprescindible para la democracia y la paz duradera.» Con esas palabras reconocía la Academia sueca la labor y el esfuerzo de Maria Ressa. Este libro es el mejor resumen de su trayectoria y de los principios éticos que rigen su pensamiento y su labor como periodista.
Maria Ressa ha dedicado su vida a defender la verdad y a luchar contra el autoritarismo. Su meticuloso trabajo de investigación ha sacado a la luz las redes y técnicas de desinformación desarrolladas por el Gobierno de Filipinas, que utiliza las nuevas tecnologías para difundir sus mentiras y suscitar la ira y el odio entre sus ciudadanos. Sus principios la han llevado a enfrentarse al hombre más poderoso del país: el presidente Duterte. Hoy, perseguida por el Estado, se han dictado varias órdenes de detención contra ella y se enfrenta a más de cien años de prisión. Su delito: decir la verdad.
Cómo luchar contra un dictador cuenta la historia de cómo las democracias mueren ante la violencia continuada y la inmoralidad de los gobernantes, y de cómo una amenaza invisible ha contagiado internet, destruyendo nuestras libertades una a una. Se trata de las numerosas campañas de desinformación que se propagan por las redes sociales: desde la guerra contra las drogas del presidente Duterte hasta el asalto al Capitolio; desde el Brexit hasta la ciberguerra rusa y china; desde Facebook y el resto de Silicon Valley hasta nuestros propios clics y votos. Narrado desde las trincheras de la guerra digital, este libro es una llamada urgente para la toma de conciencia y la defensa de nuestras democracias.
La aparición de distintos ejemplos de populismo en diferentes partes del mundo ha hecho salir a la luz una pregunta que nadie se planteaba unos años atrás: ¿están nuestras democracias en peligro? Los profesores Steven Levitsky y Daniel Ziblatt, de la Universidad de Harvard, han invertido dos décadas en el estudio de la caída de varias democracias en Europa y Latinoamérica, y creen que la respuesta a esa pregunta es que sí.
Cómo la democracia se ve trastornada por los populismos y qué vías hay para salvarla.
Un análisis alarmante que es también una guía para reparar una democracia amenazada por el populismo.
La aparición de distintos ejemplos de populismo en diferentes partes del mundo ha hecho salir a la luz una pregunta que nadie se planteaba unos años atrás: ¿están nuestras democracias en peligro? Los profesores Steven Levitsky y Daniel Ziblatt, de la Universidad de Harvard, han invertido dos décadas en el estudio de la caída de varias democracias en Europa y Latinoamérica, y creen que la respuesta a esa pregunta es que sí.
Con un recorrido que abarca desde la dictadura de Pinochet en Chile hasta el discreto y paulatino desgaste del sistema constitucional turco por parte de Erdogan, los autores muestran cómo han desaparecido diversas democracias y qué podemos hacer para salvar la nuestra. Porque la democracia ya no termina con unbang (un golpe militar o una revolución), sino con un leve quejido: el lento y progresivo debilitamiento de las instituciones esenciales, como son el sistema jurídico o la prensa, y la erosión global de las normas políticas tradicionales. La buena noticia es que hay opciones de salida en el camino hacia el autoritarismo y los populismos de diversa índole.
Un revelador manifiesto que nos ayudará a desarrollar una comprensión propia del siglo XXI acerca de la evolución y la variación humanas y que, además, nos armará contra el racismo científico
La raza es real porque la percibimos; el racismo es real porque lo practicamos. Cada vez se recurre más a la ciencia para reforzar las ideologías racistas y cada vez se emplea más en el discurso público sobre medidas políticas, migración, educación, deporte e inteligencia. Pero quienes se muestran abiertamente racistas no son los únicos que difunden estereotipos y mitos sobre la raza: también proceden de personas bienintencionadas cuyas experiencias y bagaje cultural las dirigen hacia posiciones que carecen del respaldo del estudio moderno de la genética humana. Incluso algunos científicos se sienten incómodos cuando se trata de expresar opiniones surgidas de sus investigaciones en relación con la raza. Sin embargo, si las entendemos correctamente, la ciencia y la historia pueden convertirse en poderosas aliadas contra el racismo al mostrar la imagen más clara de cómo son realmente las personas, en lugar de cómo son según nuestros juicios.
El auge de las redes sociales y la presencia constante en línea está cambiando la naturaleza del compromiso cívico y la participación política en los sectores más jóvenes de la población. Los principales desafíos a los que, hoy en día, se enfrentan las sociedades -desde la desigualdad y el racismo sistémico hasta el cambio climático-, no pueden resolverse con el conjunto de herramientas de antaño. Cómo resolver problemas públicos de Beth Simone Noveck nos enseña cómo debemos aprovechar la tecnología digital, los datos y el conocimiento colectivo de nuestras comunidades para diseñar soluciones a los problemas contemporáneos. A menudo se produce una brecha entre la idea y la implementación, pero «tenemos en nuestras manos las herramientas necesarias para resolver los problemas más graves de nuestra democracia», señala Noveck. Después de años de estudio e investigación, asesoramiento a líderes internacionales, entrevistas y encuestas de miles de solucionadores de problemas públicos, Beth Simone Noveck nos proporciona una magnífica guía práctica para servidores públicos, líderes comunitarios, estudiantes y activistas con el fin de poder abordar con mayor eficacia y equidad los problemas de nuestro atribulado mundo del siglo XXI.
Una ola de descontento recorre el mundo, y cada vez menos personas se sienten verdaderamente felices. Las encuestas revelan un aumento constante de la insatisfacción, el estrés y la depresión a nivel global. ¿Qué está sucediendo? ¿Por qué los niveles de infelicidad alcanzan récords preocupantes? ¿Cuáles son las últimas innovaciones de países, empresas, escuelas y la ciencia para revertir esta tendencia y aumentar la felicidad?
Andrés Oppenheimer explora este fenómeno global y ofrece nuevas perspectivas para salir del pozo de la insatisfacción. A través de una exhaustiva investigación en diversos países, concluye que el crecimiento económico -el parámetro que usamos para medir el progreso- es necesario, pero no suficiente para aumentar la felicidad.