Una obra reveladora en la que Shishkin cartografía, desde el amor y el desarraigo, la historia y la cultura de Rusia, un país contradictorio cuyo futuro solo puede predecirse a la luz del pasado. Desde la Rus de Kiev, pasando por el Ulus de Moscú, la época imperial, la Revolución y la Guerra Fría, hasta la actual Federación Rusa de treinta años, el novelista Mijaíl Shishkin, uno de los más lúcidos intelectuales rusos en el exilio, rastrea en Mi Rusia las raíces de la problemática de su patria: una nación que desde sus orígenes se abisma en un círculo de autodestrucción. Poniendo el foco sobre la incómoda relación entre el Estado y los ciudadanos, Shishkin dilucida la actitud rusa ante los derechos humanos y la democracia, y extrae la dolorosa conclusión de que en Rusia coexisten dos pueblos: los desilusionados e indiferentes que aceptan el dominio del más fuerte premiando a los dirigentes de mano de hierro y los que se resisten al poder opresivo y arbitrario intentando hacer frente al Gobierno.
Zygmunt Bauman fue uno de los grandes pensadores sociales de nuestro tiempo: creador del concepto de modernidad líquida, transformó nuestra manera de entender las condiciones sociales que configuran nuestras vidas hoy en día. La suya se vio marcada por las grandes fuerzas sociales que definieron la segunda mitad del siglo xx: la guerra, el comunismo, el antisemitismo y la migración forzada; y su obra lleva la huella de un outsider que conocía de primera mano el enorme impacto que las fuerzas sociales y políticas pueden tener en la vida de una persona.
Desde el arranque del siglo XXI, el nivel de incertidumbre que nos hemos visto obligados a manejar en las sociedades occidentales ha aumentado sin cesar. Empeñados en no desfallecer, seguimos pedaleando tan rápido como pudimos, tantas horas al día como el cuerpo nos permitía, con la perenne sensación de que siempre podríamos habernos esforzado un poco más. Pero cuando un virus detuvo el mundo entero, salimos despedidos a la velocidad de la luz hacia un páramo desconocido, a solas con nuestros miedos.
Miedo es un libro sobre los temores que han articulado nuestras vidas en los últimos años y que la COVID-19 ha evidenciado y agudizado, acelerando así el cambio de era en el que ya estábamos inmersos: la crisis del neoliberalismo, el cambio climático, la creciente desigualdad, los éxodos de migrantes y refugiados, la robotización del mercado laboral y el aumento del desempleo crónico, el encarecimiento de la vivienda, la crisis demográfica, la polarización y crispación sociales azuzadas por los algoritmos de las grandes empresas tecnológicas, o la privatización de los servicios públicos. La incapacidad de las democracias representativas para dar respuesta a estos desafíos ha terminado por convertirlos en una serie de miedos que los partidos populistas y de extrema derecha han instrumentalizado para imponer su agenda y los discursos de odio.
En un ensayo maravillosamente escrito, Patricia Simón recoge, con gran elegancia, sensibilidad y empatía, un conjunto de voces que ejemplifica los principales temores de la sociedad contemporánea, y ofrece un análisis brillante y sensato de las razones que nos están llevando de un mundo regido por la manipulación de la incertidumbre a otro gobernado por la manipulación de los miedos.
Este libro es una investigación sobre el miedo, la rigidez y el moralismo, y los modos en los que estos afectos han echado raíces en los movimientos de liberación. Es también una propuesta para volver a recuperar la ternura y la vulnerabilidad en el compromiso militante, sin por ello renunciar a la responsabilidad y a la tenacidad que este requiere.
¿Por qué los movimientos y espacios radicales cargan, en tantas ocasiones, con estos sentimientos y actitudes de miedo, ansiedad, sospecha, rigidez y competencia? Montgomery y bergman llaman a este fenómeno «radicalismo rígido». Con este término dan nombre a las formas congeladas y tóxicas de relación que se han infiltrado en los movimientos sociales. El resultado es una autoexploración de los bloqueos culturales y subjetivos; y al mismo tiempo un llamamiento a salir de la espiral de tristeza e involución que tan frecuentemente degenera en la competencia por el juicio político correcto. De hecho, este libro es una apuesta por una militancia alegre en el sentido de Spinoza en su teoría de los afectos: la alegría como un aumento de las potencias individuales y colectivas.
Modos de existir. Más allá de la inteligencia humana es un fascinante ensayo sobre las inteligencias no humanas que examina las múltiples maneras en que nuestro planeta acoge la vida. James Bridle nos cuenta una historia radicalmente nueva de la biología y la tecnología a partir del Oráculo de Delfos, los pulpos, las secuoyas o los últimos avances científicos. Y reincorpora al debate conocimientos y saberes aparcados por la revolución computacional, pero que siempre han estado ahí, como la comunicación entre especies, en el marco legal que regula el derecho a la vida y las condiciones de existencia.
La cuestión de la energía se halla más que nunca en el corazón del debate público y la agenda política. Sabemos que la transición energética es inevitable porque es el único modo que tenemos de luchar contra el cambio climático, pero ésta no es un mero asunto técnico que deba dejarse en manos de empresas y tecnócratas, sino una cuestión política que requiere de amplio debate, participación ciudadana y luchas populares. Porque transiciones puede haber muchas: por ejemplo, las que busquen un enésimo enriquecimiento de los gigantes del oligopolio eléctrico o las que aspiren a la democratización de los recursos y la protección de la naturaleza. Así, «Molinos y gigantes» es, en primer lugar, una invitación a conocer la historia política y económica que hay detrás del sector eléctrico español, desde los acuerdos personales del caudillo con el presidente ultracatólico de Hidrola (actual Iberdrola) hasta la liberalización del sector decretada por el Gobierno de Aznar y la imbricación posterior de las energías renovables en los sucesivos booms del ladrillo. En segundo lugar, este libro realiza una lectura crítica del modelo que caracteriza el desarrollo eólico en el Estado español, dominado por grandes empresas, con un enfoque extractivo, concentrado en zonas rurales donde produce una importante degradación de la vida de sus habitantes, sin apenas preocupaciones medioambientales y falto de mecanismos de participación democrática. Para ello, Jaume Franquesa ―en la línea de autores como David Graeber o James C. Scott― toma como zona de estudio el sur de Cataluña, la región más nuclearizada de España y entre las de mayor densidad de parques eólicos, donde ha vivido durante años y recogido los testimonios de sus vecinos, que llevan décadas luchando por defender su tierra y sus raíces frente al gran oligopolio eléctrico, y nos recuerdan: «Renovables sí, pero así no». En definitiva, la transición energética sólo será real si garantiza un mundo rural vivo y la dignidad de sus habitantes