La biografía de esta extraordinaria mujer escrita por Christian Feldmann, llevada a cabo con un buen conocimiento histórico y estilo palpitante, se atreve a mirar hacia el lejano siglo XII haciendo evidente la actualidad de esta figura. Llamó ave de rapiña al arzobispo de Colonia, predicó en los mercados ante las masas entusiasmadas como antes sólo se habían atrevido a hacer los herejes e incluso siendo una octogenaria supo plantar cara a las arbitrariedades de la jerarquía eclesiástica. Hildegarda de Bingen fue una de las figuras más fascinantes del s. XII. Muchas cosas que Hildegarda de Bingen hizo y escribió fueron inauditas para su época: mantuvo correspondencia con Papas, gobernantes, obispos, con los reyes y con mujeres que necesitaban su consejo. Hildegarda desempeñó numerosos oficios a la vez: era poetisa, naturalista, boticaria y dirigía simultáneamente dos abadías.
En una colaboración sin precedentes entre tres de las mentes más poderosas de la actualidad, Deepak Chopra se une al físico Jack Tuszynski y al endocrinólogo Brian Fertig para ofrecer una obra visionaria que profundiza en el innovador mundo de la ciencia cuántica. En ella nos muestran cómo podemos revolucionar nuestra forma de vivir y envejecer y, en última instancia, erradicar la enfermedad. La clave está en el cuerpo cuántico. A diferencia de nuestro cuerpo físico, que está sujeto al envejecimiento, las lesiones y la decadencia, el cuerpo cuántico es la fuente infinita e invisible de la realidad cotidiana que influye en nuestros pensamientos, sentimientos, sensaciones y respuestas biológicas. Sin cuerpo cuántico, no hay cuerpo físico. Y la falta de conciencia de la parte más crucial de nosotros mismos nos afecta negativamente cada día. A través de una poderosa combinación de ejercicios prescriptivos e investigación de vanguardia sobre el mundo cuántico, los autores revelan siete avances que revolucionarán el futuro de la salud para todos. Al aprovechar el poder del cuerpo cuántico, podemos mejorar significativamente nuestro bienestar físico y mental, y ampliar nuestra comprensión de lo que significa llevar una vida feliz y con propósito. Este libro pionero promete desafiar nuestra comprensión de la medicina moderna tal y como la conocemos.
En el año 1964, Luis Harss emprendió un viaje por Francia, Italia, México y por todo el continente americano con el fin de trazar el retrato literario y psicológico de quienes consideraba los diez autores latinoamericanos más representativos del momento. Borges, Asturias, Guimarães Rosa, Onetti, Cortázar, Rulfo, Fuentes, García Márquez y Vargas Llosa «posaron de buena gana». El resultado de esta aventura honesta y desinteresada fue que, sin proponérselo ni adivinar lo atinado de su predicción, Harss creó el canon y la carta de navegación de un fenómeno aún incipiente que más tarde se llamaría Boom.
«La década del sesenta puede muy bien ser un momento decisivo. Nuestra novela está todavía a prueba. Es demasiado pronto para saber si las pocas figuras realmente notables que asoman en las penumbras son una casualidad o una promesa. Pero si la diferencia entre un accidente y una tradición está en el encadenamiento del esfuerzo común, el futuro se ve propicio. Hoy por primera vez nuestros novelistas pueden aprender los unos de los otros. Cada cual hace su camino propio, pero forma parte de un mismo universo de la imaginación. Hay acumulación y el comienzo de una continuidad. En este sentido podemos hablar del verdadero nacimiento de una novela latinoamericana.»
Luis Harss, 1966
Los más de cien términos definidos aquí remiten a temas clave de la comunicación que van de los vínculos entre sociedad, medios y tecnologías a los lenguajes y las significaciones, pasando por las relaciones entre procesos culturales, identidades, política y economía. Este Vocabulario reinstala el debate, necesariamente polémico, sobre el objeto de la comunicación, sus fundaciones, sus límites y su irradiación sobre las ciencias sociales y humanas. En ese sentido conforma, hacia atrás, un gesto de historia intelectual, y hacia adelante, un espacio de interrogación sobre la vigencia de las preguntas clásicas y la emergencia de nuevos problemas. En el presente ofrece una cartografía de discusiones que pone en común tradiciones y disputas, mientras invoca una memoria y llama a la intervención crítica y fértil. Así, puede ser leído como material de consulta, pero también, y fundamentalmente, como propuesta polémica que busca inscripción en los debates e interrogantes clave de las ciencias sociales y humanas, pero sobre todo de nuestra época.
Uno de los grandes científicos del comportamiento sondea las profundidades de la ciencia y la filosofía de la toma de decisiones para presentar un argumento devastador contra el libre albedrío. En Compórtate, su ya clásico ensayo sobre por qué los seres humanos hacen el bien y el mal, apuntaba a una conclusión inquietante: puede que no comprendamos la combinación precisa de naturaleza y educación que crea la física y la química en la base del comportamiento humano, pero eso no significa que no exista. Ahora, en Decidido, Sapolsky lleva su argumento hasta el final, montando un brillante asalto frontal a la agradable fantasía de que existe un yo separado que dice a nuestra biología lo que tiene que hacer. El libro ofrece una síntesis maravillosa de lo que sabemos sobre el funcionamiento de la conciencia: el tupido tejido entre razón y emoción y entre estímulo y respuesta en el momento y a lo largo de la vida. Sapolsky nos muestra que la historia de la medicina es en gran parte la historia de aprender que cada vez menos cosas son «culpa» de alguien. Sin embargo, es muy difícil, a veces imposible, desligarnos de nuestro afán por juzgar a los demás y juzgarnos a nosotros mismos. Sapolsky aplica la nueva comprensión de la vida más allá del libre albedrío a algunas de las cuestiones más esenciales en torno al castigo, la moralidad y la convivencia.
La memoria es una forma de invocar el pasado que se conjuga en presente y se traduce en futuro. Muchas veces, la puerta de acceso del hoy a los ayeres requiere de llaves codificadas que, al estilo de la magdalena de Proust, nos ayuden a liberar del olvido a quienes en él quedaron desterrados. En 'El arte de invocar la memoria', la escritora e historiadora Esther López Barceló da cuenta de la fuerza del recuerdo colectivo a través de sus múltiples representaciones y materialidades: objetos personales encontrados en fosas, como los zapatos representados en la cubierta de este libro; grafitis fugaces, a modo de epitafios de urgencia, que dan cuenta del paso de condenados por un campo de concentración; unas escaleras transformadas en pruebas periciales; libros y documentales, depositarios de incómodas verdades, a los que se trata de hacer desaparecer… Este vibrante ensayo, escrito en un delicado tono poético, trenza un recorrido por distintas formas de invocar la memoria de una herida abierta, la de las víctimas del franquismo ―y de otras dictaduras―, a través de vestigios arqueológicos y de artefactos culturales que nos interpelan y, a la vez, nos conectan a un pasado que, gracias a ellos, no es ni será nunca un tiempo perdido.