Jules es una adolescente introvertida que disfruta de leer y navegar por internet. Un día, en que no tiene ya nada más que leer, se une a Wattpad, una comunidad virtual de escritores y lectores. Es así como decide comenzar a escribir y subir sus cuentos para que otros los lean. Para su felicidad, la mayoría de comentarios resultan positivos, sin embargo, hay alguien que parece no disfrutar nada de sus historias pero que, paradójicamente, será quien le cambie la vida. Mientras la protagonista es encantadora, inteligente y apasionada, Evan, su descarnado crítico, es antisocial y apático debido a una terrible historia familiar que lo marcó de por vida. Sus silencios comienzan a seducirla y la llevan a enamorarse de él, por más que eso le pareciera ridículo. Cuando por fin se conocen, Jules no puede resistirse a su encanto: Evan es guapo y misterioso, con una voz sexy y una prosa que le fascina, sin embargo, su constante cambio de actitud la confunde, pues pasa de besarla con pasión desenfrenada a pedirle que se aleje, aduciendo que no es alguien bueno para ella. Una historia de amor a través de Wattpad.
Basado en cientos de entrevistas con los propios directores, pero también con productores, estrellas, agentes, guionistas, ejecutivos de los estudios, esposas y ex esposas, el libro de Peter Biskind narra día a día la epopeya de los jóvenes lobos de Hollywood, la génesis de sus películas y sus luchas contra el establishment.
Moteros tranquilos, toros salvajes es la espléndida crónica de ese viaje alucinante que fue Hollywood en los años setenta, la historia apasionante y verídica de la última gran edad de oro del cine americano, una exaltada celebración de la creatividad y la experimentación, pero también del sexo, las drogas y el rock and roll.
Aunque el otro día pisó un truño por la calle, la semana de Rubén está siendo más que FLIPANTE:
-Un vídeo suyo jugando al baloncesto se ha hecho VIRAL.
-¡Ahora es EL REY del equipo!
-Zoe, la chica más GUAY del insti, se ha fijado en él.
Pero parece que alguien está intentando SABOTEARLE: no le paran de pasar cosas rarísimas…
¡Rubén debe encontrar al responsable antes del partido más importante de su vida!
Las lecturas convencionales de la Antigüedad enfrentan a Atenas con Jerusalén, donde Atenas representa la «razón» y Jerusalén la «fe». Sin embargo, como nos recuerda Susan Buck-Morss, los estudios más recientes han eliminado esta separación. Nombrar el primer siglo como un punto cero –«año uno»– que divide el tiempo en antes y después es igualmente arbitrario, nada más que una conveniencia que carece de sentido empírico. En Año 1, Buck-Morss libera el primer siglo para que pueda hablarnos de otra manera, reclamándolo como terreno común y no como origen de diferencias profundamente arraigadas.
Buck-Morss se propone derribar varias premisas conceptuales que han dado forma a la modernidad como episteme y nos han conducido a algunos impases posmodernos poco útiles. Se acerca al siglo I a través de los escritos de tres pensadores a menudo marginados en el discurso actual: Flavio Josefo, historiador de la Guerra de Judea; el filósofo neoplatónico Filón de Alejandría; y Juan de Patmos, autor del Apocalipsis, el último libro de la Biblia cristiana. También aparecen Antígona y John Coltrane, Platón y Bulwer-Lytton, al-Farabi y Jean Anouilh, Nicolás de Cusa y Zora Neale Hurston, por no hablar de Descartes, Kant, Hegel, Kristeva y Derrida.