Jim Panzee se enfrenta a algo que todo el mundo odia... esperar... y esperar... y más esperar. Jim trata de ser paciente pero incluso está impaciente esperando paciencia. No sucede de inmediato, pero finalmente, Jim se da cuenta de que vale la pena esperar algunas cosas.
Un libro simple y divertido, perfecto para ayudar a sus niños pequeños a esperar, incluso cuando realmente no quieren.
When Jim runs through the jungle laughing and shouting with glee, the other animals are very concerned. This just isn’t the grumpy Jim they know. Soon Norman diagnoses Jim with a bad case of spring fever and tells Jim that he needs to find a cure. The other jungle animals offer suggestions: Take a calming breath! Sniff lavender! Take a nap! Try a time-out! Jim tries everything to get his grump back, but when nothing works, it becomes contagious and the other animals catch spring fever too. Soon the jungle erupts into a silly celebration of springtime as they all join in the fun.
From the bestselling team Suzanne and Max Lang comes another fun filled adventure starring the beloved chaacter Jim Panzee. Lively illustrations offering a belly laugh on every spread will delight the many Grumpy Monkey fans.
Jim Pancé tiene un ataque de gruñonitis y no sabe por qué. Sus amigos no lo entienden: ¿cómo puede estar enfurruñado si hace TAAAAAN buen día? Las cebras le invitan a hacer la croqueta con ellas, los pájaros a cantar y los monos a columpiarse, pero Jim no puede seguir tantos consejos... y se colapsa un poquito. ¿No será que de vez en cuando todos necesitamos ser un poco gruñones?
Para variar, ¡Jim Pancé está de buen humor! Va a ir a una fiesta de pijamas en casa de sus padres y le acompañará Norman. A Jim no podía hacerle más ilusión todo lo que ha planeado su familia: irán a buscar termitas, pescarán mangos y contarán historias de terror. ¡Jim se muere de ganas de pasarse TODA LA NOCHE DESPIERTO!
Pero ¿qué pasa cuando aparece su hermano «pequeño»?
Ha llegado el día del paseo semanal de Jim Pancé, por fin podrá disfrutar del silencio y escuchar tranquilamente los sonidos de la jungla. Hasta que su mejor amigo Norman decide acompañarlo y con él, ¡casi todos los animales de la selva!
Menos mal que Jim tiene su naranja antiestrés porque parece que este paseo no será muy relajante ¡aunque sí muy alocado y divertido!