En la cola para el Arca» es un homenaje al teatro en clave de humor que, a través de un cómico enredo, juega con los dobles sentidos y el torrente de sensaciones que provoca un malentendido. Tras «Una última carta», los ganadores del IX Premio Internacional Compostela de Álbum Ilustrado, Antonis Papatheodoulou e Iris Samartzi, vuelven con otra lectura divertida de poso entrañable, en un atractivo formato con páginas desplegables y una estructura dialogada que remite al cómic.
Magia, deseos y muchas aventuras. ¡Aprende a leer a solas con las aventuras de estas tres hadas encantadas!
El Hada Madrina anuncia una gran noticia: ¡ha llegado la hora de jubilarse! Pero entonces..., ¿quién ayudará a los humanos? Sus tres sobrinas nietas, Lilium, Grana y Melantia, son escogidas para tal misión. Sin embargo, ¡el Hada Madrina ha escuchado mal los deseos de tres niños muy especiales! ¿Cómo podrán cumplirlos si no son las hadas indicadas para ello?
Para las Cinco Guardianas ha llegado el momento de pasar al ataque: ¡el Poder de Encanto parece querer guiarlas a la guarida del malvado Egor! Pero ¿estarán realmente preparadas para enfrentarse al enemigo?
No se puede escapar del País de las Maravillas Después de sobrevivir a una terrible batalla en el baile de su graduación, Alyssa ha abrazado su locura y ganado cierta perspectiva. Está decidida a rescatar sus dos mundos y a la gente del submundo a la que ama, aunque eso comporte desaf iar a la Reina Roja a una batalla f inal e incluso si la única manera de llegar al País de las Maravillas, ahora que se ha cerrado la madriguera del conejo, es a través del mundo del otro lado del espejo, una dimensión paralela llena de seres violentos y temibles. En esta entrega f inal de la trilogía de Susurros, Alyssa y su padre viajan al corazón de la magia y el caos en busca de su madre con el objetivo de corregir todo aquello que ha ido mal. Con la ayuda de Jeb y Morfeo, deberán salvar al País de las Maravillas de la destrucción. Pero si lo consiguen y salen vivos, ¿podrán todos ser felices y comer perdices?