En esta fantasía de 1897, H. G. Wells advierte sobre los peligros de la ciencia mal utilizada y critica ferozmente las ambiciones de sus contemporáneos. La trama se centra en las investigaciones de un brillante científico que descubre la forma de hacerse invisible. Sin embargo, incapaz de revertir sus experimentos y trastornado por los sufrimientos que le causan, decide utilizar la invisibilidad para sembrar el mal, sin detenerse siquiera ante el asesinato.
Novela precursora de la ciencia ficción, El hombre invisible ha dado lugar a un sinnúmero de imitaciones y adaptaciones, enraizando como pocas en el imaginario popular.
Nuestra edición, en la traducción canónica de Julio Gómez de la Serna, se completa con una introducción a la vez amena y erudita a cargo de Lourdes López Ropero, Profesora Titular de literatura inglesa en la Universidad de Alicante.
Formidable escritor y poseedor de una personalidad arrolladora, Gilbert Keith Chesterton convirtió la paradoja y el sarcasmo en sus principales armas literarias.
Las historias de El hombre que sabía demasiado nos presentan a Horne Fisher, un investigador que no resuelve los crímenes gracias a su ingenio ni a sus dotes deductivas, sino por sus conocimientos sobre los entresijos de la política británica y por su intrincada red de contactos. Pero no es el único personaje peculiar de esta recopilación de relatos que subvierten el género policíaco y al mismo tiempo nos ofrecen una de las mejores obras de uno de los grandes autores que ha dado la literatura inglesa.
Chesterton publicó la colección de relatas de El hombre que sabía demasiado en 1922, en cuyos episodios el investigador Horne Fisher resuelve los crimenes más por su profundo conocimiento de las intimidades y los detalles de los involucrados en cada caso, que por sus propios conocimientos en cualquier rama del saber. La obra está dividida en ocho capitulos independientes, ambientados en lugares parecidos y con idéntico tratamiento policiaco: El rastro en la diana, ' El principe fugaz, Alma de colegial, El pozo sin fondo, Ld manía del pescador, El agujero en el muro, El templo del silencio y La venganza de la estatua.
GILBERT KEITH CHESTERTON, más conocido como G. K. Chesterton, nació el 29 de mayo de 1874 en Londres, Fue periodista, novelista, ensayista y escritor de libros de viajes cuyo sentido del humor y sentido común lo convirtieron en uno de los autores más admirados del siglo xx. Su educación básica tuvo lugar de 1881 a 1886, e ingresó en 1887 en un centro educativo privado. Chesterton describió aquel sistema educativo por el que tuvo que pasar como ser instruido p: alguien a quien yo no conocía, sobre algo que yo no quería Murió el 14 de junio de 1936 en Beaconsfield. Al parecer, en un estado más lúcido de su agonía dijo: «El asunto está claro ahora. Está entre la luz y la sombra, y cada uno debe elegir de qué lado está».
Esta selección de cartas dirigidas a la escritora Louise Colet pretende ofrecer una muestra significativa de la teoría literaria innovadora que Flaubert expuso en la correspondencia que dirigió a su amante. La pasión amorosa va destilando la que quizá fue la mayor y auténtica pasión del autor de Madame Bovary: la pasión de la escritura. Flaubert nunca pensó que otras personas leerían estas misivas años después, y esa libertad y espontaneidad con que están escritas permiten que sean de lectura ágil y atractiva. La revolucionaria teoría literaria que expone en ellas, así como el proceso de creación de sus novelas adquieren una cercanía y expresividad sorprendentes. Muchos críticos consideran que la extensa correspondencia de Flaubert (casi cuatro mil cartas) constituye su mejor obra literaria.
El invitado de Drácula y otros relatos, es una recopilación de narraciones cortas. Su mujer Florence publicó en 1914 una edición póstuma dos años después de la muerte de Stoker. Se cree que inicialmente El invitado de Drácula fue escrito para ser el capítulo uno de la novela Drácula, pero los editores no lo consideraron oportuno y optaron por no incluirlo.
Aparte de El invitado de Drácula, están los siguientes relatos: La casa del juez, La Squaw, El secreto del oro creciente, Una profecía gitana, La venida de Abel Behenna, El entierro de las ratas, Un sueño con manos rojas y Arenas de Crooken.
Bram Stoker pasó los primeros siete años de su vida recluido en su casa a causa de una enfermedad. Su único entretenimiento eran las oscuras leyendas irlandesas que su madre le contaba. No sería de extrañar que esas crónicas hilvanadas con elementos sobrenaturales generaran el caldo de cultivo que llevó a Stoker a convertirse en uno de los más grandes autores de terror gótico. Durante mucho tiempo se consideró «El invitado de Drácula» un primer capítulo eliminado de Drácula, la obra capital de Stoker, si bien el estudio de las notas del autor a partir de los años setenta desechó esta idea y dio pie a otras teorías. Sea como fuere, la historia, que funciona de manera independiente, vio la luz en 1914, dos años después de la muerte del escritor irlandés, como parte de una recopilación de sus mejores relatos. Reunidas de nuevo en esta edición, estas ocho joyas del género demuestran la maestría de Bram Stoker para desarrollar ficciones escalofriantes que pondrán a prueba los límites de nuestro miedo.