Ella pensaba que había recuperado su vida. Pero se equivocaba.
Nunca debió haber confiado en el.
Temblando de frío y magullada, una adolescente se despierta en la cuneta sin recuerdo alguno de cómo ha llegado hasta ahí... o de quien es. Un agente la lleva a la comisaría más cercana, y allí se encuentran con un hombre que lleva horas buscándola.
Es su padre, y ella se llama Mary. O eso dice el.
Cuando Lola desaparece tras una discusión con su novio Drew, el pueblo entero está convencido de que este la mató. Más allá de demostrar su inocencia, Drew necesita encontrar a Lola antes de que sea demasiado tarde. Cuanto más tiempo pase desde su desaparición, menos pistas que seguir hay… y más peligro para ambos.
*HASTA QUE NOS QUEDEMOS SIN ESTRELLAS*
Liam ha perdido su pasión por las redes sociales. Está metido en una relación falsa con Michelle y el resultado ha sido catastrófico, ya que ella ahora sale a escondidas con su mejor amigo.
Maia tiene pesadillas desde la noche del accidente. Todos los días va al hospital a visitar a una estrella cuya luz se tambalea.
Un cumpleaños caótico. Una botella de vodka y un youtuber que acaba durmiendo en el coche de una desconocida.
¿Qué mejor combinación para conseguir que dos astros colisionen?
Un estuche inédito con las tres primeras novelas de la maravillosa serie «La Selección» de Kiera Cass.
Para treinta y cinco chicas, La Selección es una oportunidad que solo se presenta una vez en la vida. La oportunidad de escapar de la vida que les ha tocado por nacer en una determinada familia. La oportunidad de que las trasladen a un mundo de trajes preciosos y joyas que no tienen precio. La oportunidad de vivir en un palacio y de competir por el corazón del guapísimo príncipe Maxon.
Sin embargo, para America Singer, ser seleccionada es una pesadilla porque significa alejarse de su amor secreto, Aspen, quien pertenece a una casta inferior a la de ella; y también abandonar su hogar para pelear por una corona que no desea y vivir en un palacio que está bajo la constante amenaza de ataques violentos por parte de los rebeldes.
Avery tiene un plan: pasar desapercibida y trabajar duro para aspirar a un futuro mejor. Entonces un excéntrico multimillonario fallece y le deja casi toda su fortuna. Y nadie, tampoco Avery, sabe por qué.
Ahora tiene que mudarse a la mansión que ha heredado, que está llena de secretos y códigos, y en la que residen los parientes del fallecido: una familia con el único objetivo de descubrir por qué Avery ha heredado todo "su" dinero.
Pronto Avery se verá atrapada en un juego letal en el que participa toda la familia. ¿Hasta dónde serán capaces de llegar para recuperar su fortuna?
Caleb no es un chico corriente. Ha tenido una vida complicada, quizá por las habilidades especiales que lo convierten, a sus ojos, en un monstruo. El destino lo ha llevado a trabajar para gente de moral dudosa, a hacer cosas que le han manchado las manos y el alma.
Entonces, una de sus misiones se complica y se le asigna vigilar a Victoria, una humana tan normal como cualquier otra, con un trabajo rutinario, un apartamento pequeño y un gato extraño.
Debería ser el trabajo más fácil del mundo, pero termina teniendo que elegir entre el mundo que conoce y la única persona que alguna vez le ha importado.
Y tú, ¿serías capaz de enamorarte de alguien que desconoce el significado del amor?
Sydney Wells should have died. She was supposed to die.
She never expected, after years of waiting, to receive a heart transplant. Now, seventeen-year-old Sydney doesn’t know what to do with her life. Her daily routine consisted of staying indoors, eating heart-healthy foods, and posting about her transplant list experiences on TheWaitingList with her long-distance BFF (and heart failure buddy) Chloe.
Now, Sydney latches onto the one thing that gives her meaning: learning as much as she can about the person whose heart she inherited. After finding the family of her likely-donor, Mia, Sydney falls deep into her world—and may also be falling for Mia’s best friend, Clayton.
But Sydney isn’t the only one hiding something. Mia’s brother Tanner won’t talk to Clayton, and Clayton won’t tell Sydney why. And hundreds of miles away, Chloe’s health has taken a turn for the worse. Sydney needs to face what’s in her heart—the truth, the guilt, and the future—before it’s too late.