En este ensayo Russell parte de la idea de que la educación que deseamos para nuestros hijos depende de nuestros ideales acerca del ser humano. Ataca así el sistema educativo de la época, en manos de la Iglesia o del Estado, a los que acusa de crear «rebaños» formando en el conformismo, el autoritarismo y el nacionalismo. Russell busca educar personalidades libres y sensibles, cultivadas en la curiosidad, la confianza en el esfuerzo y e! sentido de aventura. Él y su mujer Dora crearon una escuela en Beacon Hill en donde intentaron llevar a la práctica sus ideales educativos. El valor actual de estos ensayos reside cn lo pausado y racional de su análisis, en la claridad de sus propuestas y la amenidad de su lectura: «Cuanto he de decir -escribe Russell- no es sino el resultado de mis preocupaciones con respecto a mis hijos; no hay, pues, en ello nada de remoto ni teórico, y espero que ayude a aclarar las ideas de otros padres en situación análoga a la mía, bien sea para compartir o para rechazar mis opiniones.»
Un libro en el que el propio Russell consigue lo que quiso para los niños: despertar la curiosidad y la reflexión conviniendo su discurso en una entretenida aventura.
Un viaje por el mundo de la piratería en la literatura y la ilustración
En la imaginación de jóvenes y mayores, la palabra "pirata" se asocia a historias escalofriantes y aventuras de capa y espada. A lo largo de siglos, una gran cantidad de personajes famosos, reales y ficticios, inmortalizados en la literatura y el arte, ha habitado nuestro paisaje cultural. Es el caso de Edward Teach, también conocido como Barbanegra y temido por su crueldad; Henry Morgan, cuyo tesoro todavía se busca hoy; y, por supuesto, Long John Silver, el antihéroe arquetípico de La isla del tesoro de Robert Louis Stevenson (1885).