EL ETERNO MARIDO (TD)

El eterno marido, publicada en 1870, es una novela que Dostoievski escribió entre El idiota y Los demonios, es decir, en su época de madurez creativa. Su protagonista, Alekséi Ivánovich Velchanínov, es un terrateniente cuarentón, hipocondríaco, torturado por recuerdos de actos deshonrosos que no especifica. Se encuentra en San Petersburgo para resolver un engorroso pleito sobre unas tierras y se siente acosado por la presencia de un caballero con un crespón de luto en el sombrero que se le aparece en las calles y en los sueños. Se trata en realidad de un antiguo amigo, Pável Pávlovich Trusotski, con cuya mujer tuvo una aventura hace nueve años.
Disponibilidad: Agotado
1,350

Agotado

Especificaciones de productos
Autor DOSTOIEVSKI, F.
Editora ALBA
Encuadernado TAPA DURA
Páginas 232
Los clientes que compraron este producto también han comprado
Imagen de EL AROMA DEL TIEMPO
900

EL AROMA DEL TIEMPO

Byung-Chul Han reflexiona en este ensayo sobre la crisis temporal contemporánea. Según el autor, no estamos ante una aceleración del tiempo, sino ante la atomización y dispersión temporal -a la que llama disincronía-. En la disincronía, cada instante es igual al otro y no existe ni un ritmo ni un rumbo que dé sentido y significación a la vida. El tiempo se escapa porque nada concluye, y todo, incluido uno mismo, se experimenta como efímero y fugaz. En consecuencia, la muerte es un instante más, un final a destiempo. Esto invalida la vivencia de la muerte, en Nietzsche y Heidegger por ejemplo, como consumación de una unidad con sentido. El presente libro sigue el rastro, histórica y sistemáticamente, de las causas y síntomas de esta disincronía. Pero también reflexiona sobre la posibilidad de una recuperación. El final del tiempo como duración narrativa no tiene por qué traer consigo un vacío temporal. Al contrario, da lugar a la posibilidad de una vida que no necesita de la teología ni la teleología, y que a pesar de ello tiene su propio aroma. Pero para ello es necesario un cambio. En palabras de Byung-Chul Han, «la crisis temporal solo se superará en el momento en que la vita activa, en plena crisis, acoja de nuevo la vita contemplativa en su seno.»
900

Agotado

Imagen de DISCURSO DEL GRAN INQUISIDOR
995

DISCURSO DEL GRAN INQUISIDOR

«¿Cómo puede hablarse de libertad, si la obediencia se compra con pan?» El Discurso del Gran Inquisidor ocupa un lugar central en la arquitectura de la obra y el pensamiento de Fiódor Dostoievski, análogo al que ocupa El rey Lear en el universo de Shakespeare. El propósito y la fuerza poética de este texto son de tan múltiple riqueza y complejidad que puede interpretarse desde tantos puntos de vista diferentes como lectores tenga. En este memorable capítulo de Los hermanos Karamázov, que puede leerse como una obra filosófica completa en sí misma, Iván y Aliosha dialogan sobre la fe en Dios y la figura de Cristo, la libertad y la esclavitud del hombre, la compasión y la muerte. La presente edición se enmarca con una introducción de Antonio Lozano, la célebre interpretación de George Steiner en Tolstói o Dostoievski y comentarios al texto de Noam Chomsky y de Aldous Huxley.
995
Imagen de EL CORTADOR DE CAÑAS (BOL)
800

EL CORTADOR DE CAÑAS (BOL)

Una historia de amor triangular, donde la pasión se nutre de renuncias y connivencias. El cortador de cañas es una pequeña obra maestra que sintetiza las preocupaciones temáticas y formales de Tanizaki en la etapa determinante de su carrera: la narración de un desconocido que aparece como una sombra entre las cañas de la ribera del río, en una noche de contemplación de la Luna llena. Un relato dentro de un relato, volcado en los moldes formales de la novela clásica del antiguo Japón, una sociedad que se aferra a los últimos destellos de la civilización que fue.
800
Imagen de MEMORIAS DE LA CASA MUERTA (TB)
995

MEMORIAS DE LA CASA MUERTA (TB)

En abril de 1849 Fiódor Dostoievski, con otros veintisiete jóvenes, era detenido y acusado de «crímenes contra la seguridad del Estado»; unos meses después, se le sometía a un simulacro de ejecución, y finalmente a una condena de ocho años de trabajos forzados en Siberia. En 1862 aparecería en forma de libro Memorias de la casa muerta, el recuento autobiográfico de sus experiencias en presidio, presentado, bajo una ficticia primera persona, la del «difunto» Alexánder Petróvich Goriánchikov. Este hombre, noble e instruido, que jamás ha trabajado, se encuentra de pronto privado de libertad, obligado a los esfuerzos más penosos, rapado y encadenado, en compañía de montañeses, bandoleros, asesinos, presos políticos y mendigos.
995

Agotado