Scott Hahn busca definir la santidad, para ayudarnos a comprender mejor nuestra relación con ella.
A los católicos se les enseña a valorar la santidad, a admirarla en los demás y a luchar por ella en sus propias vidas. Pero apenas se habla de qué es la santidad.
En este libro, Scott Hahn busca definir el término, para ayudarnos a comprender mejor nuestra relación con la santidad. Al rastrear su significado, primero en el Antiguo Testamento y luego en el Nuevo, el autor revela magistralmente cómo Dios transmite gradualmente su santidad a su pueblo (a través de la creación, la adoración, etc.) y finalmente los transforma, al compartir su vida divina.
Todos tenemos problemas. La buena noticia es que la Palabra de Dios contiene promesas que nos ayudan a superar cada problema que enfrentamos.
Joyce Meyer sabe cuán cierto es esto porque ha enfrentado problemas mayúsculos en su vida. Pero a lo largo de cuarenta y cinco años de estudio de la Palabra de Dios, ha aprendido a encontrar en la Biblia la respuesta a cada uno de estos problemas, y quiere enseñarte a descubrir estas respuestas por ti mismo.
En Supera cada problema, Joyce te llevará a través de cuarenta promesas de la Palabra de Dios que pueden darte la sabiduría que necesitas cuando te tropieces con desafíos o dificultades. No importa cuán grande o profundo sea tu dolor, o por cuánto tiempo te haya afectado: este texto te animará e inspirará a confiar en que Dios tiene días mejores reservados para ti.
Únete a Joyce en tu viaje hacia el descubrimiento y pon las promesas de Dios a trabajar en tu vida, para que puedas superar cada problema que tengas que enfrentar.
Dios todavía habla. ¿Sabes escuchar su voz? La voz que al hablar trajo a la existencia al cosmos, es la misma que separó el Mar Rojo e hizo que el sol se detuviera a mediodía. Un día, esa voz hará todas las cosas nuevas; sin embargo, ¡te está hablando ahora!
Dios todavía habla. ¿Sabes escuchar su voz?
La voz que al hablar trajo a la existencia al cosmos, es la misma que separó el Mar Rojo e hizo que el sol se detuviera a mediodía. Un día, esa voz hará todas las cosas nuevas; sin embargo, ¡te está hablando ahora
Lao Tse dejó constancia escrita de su sabiduría en el Tao Te Ching, uno de los textos fundamentales del taoísmo, el movimiento espiritual y filosófico que desde hace más de dos mil años inunda toda la cultura oriental. Su contenido aúna belleza y sabiduría en una serie de aforismos breves, que, con aparente sencillez, conforman en realidad una de las obras más completas y exigentes que se hayan escrito. Dejarse llevar por su mensaje y capacidad sugestiva es la mejor manera de reflexionar, con serenidad, acerca de nosotros mismos.
«Quien se conoce a sí mismo es sabio.»
El pontífice nos propone en estas páginas quince pasos concretos para alcanzar la felicidad, pero no se trata de la que nos ofrece el mundo, sino de aquella permanente y eterna que viene de Dios. «El camino de Jesús siempre conduce a la felicidad. Siempre». Como él mismo explica: «Hemos sido creados para una felicidad más grande», y a través de sus palabras nos anima a salir de nuestra zona de confort, de miedo, de tristeza, para soñar en grande, para vivir plenamente nuestra vida aprendiendo a levantarnos tras los fracasos y a caminar de la mano de los demás: «En el arte de caminar lo que importa no es no caer, sino saber levantarse».
«Sonreír es acariciar con el corazón».
La alegría es un tema central de las enseñanzas del Papa Francisco, aún más necesario en estos tiempos que corren. En unas páginas que son un mensaje para todos los hombres y mujeres del mundo, el pontífice afirma que Dios es dicha y la misericordia es la manifestación más profunda de la felicidad de Dios y el núcleo del mensaje cristiano.
Las palabras del Papa Francisco son una invitación a abrazar la verdadera belleza; a abrirse, encontrarse y compartir; a cambiar actitudes personales y sociales que fomentan la exclusión; a desenmascarar el descontento que se produce cuando nos encerramos en nosotros mismos; y a afrontar la vida con valentía y confianza, sin dejarse vencer por la tristeza y el pesimismo.
Los ocho capítulos de este libro abarcan el tema de la felicidad de manera humana y profunda, conscientes de que la verdadera alegría no es un sentimiento efímero ni ilusorio ni un antídoto para quienes ignoran el sufrimiento: proviene de una esperanza concreta, que nada ni nadie nos podrá arrebatar. Es una alegría que tiene la última palabra, siempre. Y el deseo de compartir una sonrisa es el primer pequeño gran paso para vivirla, para renovarnos, para renacer.