Francisco Méndez tiene catorce años, una inteligencia extraordinaria y una pasión: los libros de Sherlock Holmes. No sólo sabe más que nadie sobre el famoso detective, sino que razona como él. Sus familiares y amigos esperan que su brillo intelectual lo vuelva célebre, pero esas expectaticas agobian a Francisco, que duda de sí mismo. Tres extraños asesinatos de mujeres en su barrio le servirán de prueba y lo conducirán por un camino diferente.
Era un sapito verde, como tantos. Un día le cayó pintura azul y se volvió de este color. El Sapito Azul va de viaje y a la escuela. Se baña, canta y vuela. Baila en la fiesta de graduación y conduce en la calle. El Sapito es alegre, animoso y contagia la dicha de vivir. Todo lo cuenta en décimas, tanto en español como en inglés.
Cuando Violeta, la activista, Henry, el empresario y Alberto, el minero, entraron en una cueva para guarecerse de la tormenta, no imaginaban que estaban siendo guiados hasta allí de manera intencionada. Los Dioses taínos habían despertado de su prolongado sueño con historias que contarles.
La autora realiza una divertida adaptación del clásico Los tres cerditos, aumenta la familia y la creatividad en la construcción de sus casitas. El Lobo coqueto y feroz, sopla y sopla y las derriba. Finalmente, no puede con la última y al entrar por la chimenea se quema su cola y los dejó tranquilos por siempre.