La segunda era continúa con una intriga política llena de magia.
Waxillium Ladrian y su socio Wayne se enfrentan a una enemiga inaudita tras el brutal asesinato del hermano del gobernador, una kandra rebelde que ha perdido el juicio y ya no obedece al nuevo dios de Scadrial, Armonía.
Mientras Wayne y Marasi intentan frustrar las amenazas contra el gobernador y evitar que la ciudad estalle en revueltas multitudinarias, Wax da caza a una asesina capaz de utilizar cualquier poder y de hacerse pasar por cualquiera. Pero él mismo se verá perseguido por las sombras de su pasado…