El inversor Juan Haro te invita a un viaje para conocer los hábitos y trucos que utilizan los ricos para disfrutar de la vida. No necesitas esperar a enriquecerte para empezar a saborear esta corta estancia que tenemos como vida. Puedes ir poniendo en práctica esta filosofía durante el camino, mientras realizas tus proyectos y objetivos.
Tras habernos enseñado cómo multiplicar nuestro dinero, proteger nuestro patrimonio y reducir el pago de nuestros impuestos legalmente, el autor nos explicó cómo subir al segundo piso: comprar inmuebles, crear nuestro patrimonio y vivir de las rentas. Ahora que ya disponemos de patrimonio, dinero y tiempo, podemos acceder a la tercera planta.
Esta tercera entrega está centrada en los hábitos universales que permiten sacarle el máximo rédito al único activo más valioso que el dinero: las horas. Son lo único que no se puede aumentar, pero sí es posible ponerlas de la mejor manera al servicio de tus metas y aspiraciones. Estas páginas te enseñarán cómo, aunque tampoco ofrecen una receta infalible para el éxito. Porque, como saben los ricos, el éxito no es lineal ni siempre ascendente, y la única vida plana es la que tenemos cuando estamos muertos.