La primera leyenda nos cuenta cómo el Cemí Mayor se dio a la tarea de la creación de Quisqueya, de sus primeros habitantes -unos seres fantásticos llamados ciguapas-, de los cacicazgos taínos y los caciques. Todo porque el Cemí Mayor se sentía muy solo. En la otra, el malvado dios Juracán ha ocultado el dios Sol y la diosa Luna. El pueblo taíno desfallece a falta de luz y calor. Cinco valientes taínos tendrán la misión de encontrar a Atabey, la diosa Madre, y pedirle ayuda para recuperar el día y la noche.