En el otoño de 1991, en plena desintegración del imperio soviético, Anne Applebaum -ganadora del Premio Pulitzer por Gulag. Historia de los campos de concentración soviéticos- emprendió un viaje desde el Báltico hasta el mar Negro, pasando por Lituania, Bielorrusia, Los Cárpatos y Ucrania, con la intención de comprender la nueva configuración de unos territorios en constante conflicto. Por el camino descubrió un amplio abanico de culturas identitarias, religiones y aspiraciones nacionalistas que competían entre sí.
Si bien han transcurrido más de treinta años, las vidas aquí narradas se leen hoy como un registro documental de un mundo que ya no existe. Applebaum, una excelente observadora, teje con gran habilidad la desgarradora historia de una región incomprendida a través de los relatos de personas corrientes, que describen el modo en que los acontecimientos históricos influyen y marcan la vida de la gente.
Ubicado entre la crónica periodística, la literatura de viajes y el ensayo histórico, Entre Este y Oeste ilumina con brillantez los orígenes de la crisis geopolítica entre Rusia y Europa y nos ofrece algunas claves para entender el alma de estas tierras fronterizas.
Una contribución fundamental para una renovada teoría del Estado, y una fuente de esperanza y de acción política en un tiempo marcado por la incertidumbre.
En Comprando tiempo, su obra anterior, Wolfgang Streeck mostró cómo 'el matrimonio forzoso' del capitalismo y la democracia estaba llegando a su término. El nuevo orden mundial proclamado por los Estados Unidos tras el colapso soviético resultó ser ingobernable por medios democráticos, y una combinación de tecnocracia y dominio del mercado tomó su lugar. Pero el régimen surgido de la globalización ha fracasado en lo económico y perdido apoyo y legitimidad en lo político: el orden mundial neoliberal no es hegemónico y permanece estancado entre el globalismo y la democracia. La utopía de 'un mundo, un mercado' se probó irrealizable, y la democracia nacional resultó fácil de dañar pero difícil de matar.
Analizando el conflicto entre las fuerzas de la globalización y las de la democracia, Streeck indaga aquí en la posibilidad de que los Estados y las sociedades retomen el control de su destino colectivo. Para ello, traza las líneas maestras de un sistema estatal que permita la gobernanza democrática dentro de Estados-nación soberanos y la cooperación pacífica entre ellos. En la estela de Karl Polanyi y John Maynard Keynes, este libro es una contribución fundamental para una renovada teoría del Estado, y una fuente de esperanza y de acción política en un tiempo marcado por la incertidumbre.
El planeta atraviesa un estado de emergencia climática. La región latinoamericana padece los efectos del despojo. Pueblos, comunidades y sociedad organizada ofrecen una terca resistencia. Carlos Lavore, autor de diversos trabajos sobre participación, planeación y comunicación, da cuenta en este libro de lo que esta ocurriendo a escala global con los bosques, hielos, suelos y agua, cuya brutal explotación se traduce en desastres “naturales” y colapsos parciales con severas afectaciones a la vida. A partir del recuento de los saqueos de bienes y recursos naturales en los ultimos 40 años en América Latina, Lavore explica el proceso de extinción de la vida planetaria, o de buena parte de ella; reflexiona sobre los efectos negativos que ha producido la concentración del poder financiero, político y mediático; y pone el acento en las posibilidades de rescate.
Si bien no existe un proyecto de liberación asumido colectivamente, este libro visibiliza las múltiples resistencias y consigna la potencialidad transformadora de distintas alternativas políticas y sociales a lo largo de América Latina, con un énfasis particular en México; como la experiencia del pueblo boliviano, el movimiento de los sin tierra, los zapatistas en el sureste mexicano, las fogatas populares en Cherán, el pueblo Yaqui en Sonora, los movimientos de mujeres en las grandes ciudades y una notable cantidad de resistencias locales.
Una necesaria reivindicación de la confianza, la solidaridad y el pensamiento crítico frente al individualismo y la ignorancia.
David Pastor Vico vuelve, con más fuerza que nunca, a hablarnos de cosas incómodas y necesarias: la desconfianza hacia los otros, el individualismo, la soledad o la precaria educación de las nuevas generaciones. Y lo hace a través de un alegato en favor de los vínculos, el tiempo compartido y la comunión como antídoto a esta era de idiotas en la que vivimos todos.
Retomando el legado de siglos pasados, donde el filósofo no solo era un analista y crítico de la realidad, sino también un agente de cambio social en la academia y en las calles, Vico asume este papel con irreverencia y pasión.
Desde hace décadas venimos asistiendo al bochornoso espectáculo de una sucesión de reformas educativas –llevadas a cabo por gobiernos de todos los colores– siempre fallidas, pero siempre funcionales a unos intereses espurios. Secundadas por un ejército de «expertos en educación» que sirven como propagandistas del nuevo orden educativo, el mayor «logro» de estas reformas –con su corolario de antiintelectualismo, infantilización y «ludificación»– ha sido condenar al alumnado a la servidumbre laboral.
Escuela o barbarie plantea una crítica radical del papel que en el terreno educativo está desempeñando el discurso de una pedagogía dominante cuyos sofismas –revestidos a menudo de una falsa apariencia progresista– conducen a resultados extraordinariamente reaccionarios. De esta forma, los autores contribuyen a rearmar intelectualmente la educación frente al ataque neoliberal que acecha a la enseñanza pública.
¿Sabía que hubo antisemitas de derechas franceses que simpatizaron con el anarquismo? ¿O que durante la Revolución rusa surgió en Ucrania el Ejército Negro anarquista que combatió al mismo tiempo contra bolcheviques y zaristas? ¿Y que en la Manchuria de los años treinta del siglo XX se organizó una Comuna Libre formada por anarquistas coreanos que combatieron al ejército japonés?
El anarquismo vio la luz como ideología en la Europa de la segunda mitad del siglo XIX y sus principales ideólogos fueron Pierre-Joseph Proudhon y el noble ruso Mijail Bakunin, siendo su definición canónica: una propuesta de organización revolucionaria de la sociedad caracterizada por la inexistencia de cualquier tipo de estado, gobierno, jerarquía y leyes escritas.
Este libro nos adentrará en personajes como Ravachol o Bonnot, representativos de un anarquismo francés conocido como «ilegalista», poco amante de la teoría y propenso a la violencia contra el «sistema». Revisaremos tópicos como que, entre finales del siglo XIX y las tres primeras décadas del XX, la principal implantación organizativa del anarquismo tuvo lugar en la Europa mediterránea y el Imperio ruso o las mitificadas virtudes de los anarquistas españoles y rusos en sus respectivas guerras civiles. También abordaremos la experiencia revolucionaria durante nuestra contienda fratricida y analizaremos experiencias libertarias ignoradas como la del Ejército Negro del anarquista ucraniano Nestor Mackhnó durante la guerra civil rusa o la de la Comuna Libre de Shinmin en Manchuria.