Una novela que entusiasmará a los millones de lectores de El resplandor y que encantará a todos aquellos que conozcan a Danny Torrance por primera vez.
Stephen King vuelve al mundo de El resplandor, una de sus novelas más queridas y emblemáticas. Ahora Danny Torrance, aquel niño aterrorizado del Hotel Overlook, es un adulto alcohólico y sin residencia fija que va de ciudad en ciudad atormentado por sus visiones y por los fantasmas de su infancia, que ha aprendido a controlar pero no a eliminar de su mente.
Un día se siente atraído por una ciudad de New Hampshire, donde encontrará trabajo en una residencia de ancianos y donde se apuntará a las reuniones de Alcohólicos Anónimos. En ese lugar le llega la visión de Abra Stone, una niña que necesita su ayuda. La persigue una tribu de seres paranormales que vive del resplandor de los niños especiales. Parecen personas mayores y totalmente normales que viajan por el país en sus autocaravanas, pero su misión es capturar, torturar y consumir a estos niños. Se alimentan de ellos para vivir y el resplandor de Abra tiene tanta fuerza que los podría mantener vivos durante mucho tiempo.
Inexorable, el dolor se presenta en algún momento de la vida. Por ello, en un tono íntimo y cercano como le es habitual, Bernardo Stamateas -referencia obligada en liderazgo y superación personal-, nos invita a mirar el dolor a la cara, reconocerlo, descubrir sus distintas formas e intensidades, así como los contextos en los que aparece, para asumir una actitud consciente y activa frente a él. A través de consejos, frases motivadoras y ejemplos que propician la reflexión, la propuesta es poner en juego lo mejor de nosotros mismos para convertir las dificultades en una instancia de libertad y autoafirmación.
El accidente sufrido por su padre junto a su nueva pareja y el asesinato de Gonzalo, el pretendiente que la abandonó en vísperas de su boda, son otra motivación para iniciar una vida propia bajo un nuevo nombre: María González. María sospecha que su madre tuvo relación con esas muertes y, por ello, como detective improvisada, irá descubriendo toda una red de mentiras que implican a su familia, prototipo de aquella burguesía madrileña que enterró y nunca reconoció su apoyo al franquismo con la llegada de la Transición.
UNA TRILOGÍA PARA LEER CON ORGULLO
Tras Un cóctel en Chueca, llega Dos copas en Sitges, un viaje emocionante a una de las capitales de la fiesta más gay en busca de risas, sexo y mucho orgullo.
Andrés se ha marchado del piso persiguiendo a un amor tóxico que él cree verdadero. Su novio quiere alejarle de sus amigos para siempre, pero ellos no lo van a permitir y están dispuestos a viajar hasta Sitges para rescatarle...
Mauro e Iker llevan un tiempo que no se aguantan, peleándose a todas horas. Está claro que son incompatibles y justo por eso son tan irresistibles el uno para el otro...
Gael sigue buscando la manera de quedarse en España, pero nunca pensó que en el camino podría darse de bruces, por primera vez, con el amor...
Blanca y Rocío acaban de conocerse y han empezado una relación «sin etiquetas» pero con mucha pasión y mucho sexo... ¿Quizá demasiado?
La vida de Lydia da un vuelco cuando Freddie, su alma gemela y su pareja desde hace más de diez años, muere. Lydia sabe que Freddie habría querido que siguiera adelante y viviera al máximo, así que, con la ayuda de su mejor amigo, Jonah, y su hermana, Elle, decide abrirse de nuevo al mundo (y tal vez, al amor).
Pero entonces sucede algo increíble: Lydia tiene la oportunidad de volver atrás y seguir viviendo junto a Freddie. La elección parece sencilla, pero ¿qué pasa si en su nueva vida hay alguien que también la quiere a su lado?
Lydia deberá elegir entre dos vidas, entre dos amores; entre evadirse del dolor de la pérdida o acoger las nuevas oportunidades que le brinda el destino para volver a ser feliz.
Edgar Freemantle pierde el brazo en un terrible accidente que también le retuerce la mente y la memoria para dejarle lleno de rabia, y solo rabia, cuando empieza el proceso de recuperación. Su matrimonio, que le dio dos hijas maravillosas, se ha roto y Edgar quisiera no haber sobrevivido a las graves heridas que le produjo el accidente. Quiere huir. Su psicólogo, el doctor Kamen, le propone que empiece una nueva vida. Edgar alquila una casa en Duma Ker, un terreno de la costa de Florida. Allí comienza a dibujar. En la playa entabla amistad con Wireman, otro hombre a quien le cuesta hablar de sus heridas, y con la anciana Elizabeth Eastlake. Entonces descubre en sí mismo un talento artístico extraordinariamente peligroso. Muchos de sus cuadros contienen un poder que ni él sabe controlar. A medida que van descubriendo los fantasmas de la infancia de Elizabeth, el poder destructivo de los cuadros se convierte en algo realmente devastador.