Un legado invaluable que nos invita a seguir leyendo, escribiendo y soñando.
A mitad de la noche la vida parece encontrar su desenlace, pero es justo en la mayor oscuridad cuando comienza a manifestarse la luz que precede al amanecer: ese momento en que las tinieblas quedan atrás y emerge el día con la incertidumbre propia de un nuevo comienzo. «El tiempo abre las alas» y «se aleja el día hacia ninguna parte... empezaste a morir y a darte cuenta de que el misterio no va a extenuarse nunca. El despertar es un bosque donde se recupera lo perdido y se destruye lo ganado. Y el día futuro, una miseria que te encuentra a solas con tus pobres palabras».
Antes de la invención de la fotografía y de las grabaciones sonoras, a los vivos no les quedaban de quien moría sino unos pocos objetos que lo habían acompañado; su olor impregnado en la ropa; la letra, si la persona sabía escribir; retratos pintados, para quienes podían permitírselos, o mechones de pelo. La voz es una extensión del cuerpo y la única parte que no puede enterrarse: la voz permanece intacta y altera el sentido del tiempo, pues está condenada a quedarse en un presente eterno. «El mensaje de este libro, o más bien la moraleja que se extrae de su lectura, es únicamente éste: graba la voz de tus seres queridos», nos dice Ryoko Sekiguchi al inicio de esta obra singularmente emotiva y delicada en la que la autora de Nagori vuelve a demostrar una especial lucidez para describir y catalogar las experiencias más íntimas y trascendentales del ser humano.
La Segunda Gran Guerra llega a su fin y el mundo emprende una tortuosa reconstrucción. Concluidas sus funciones como colaboradora de los Servicios Secretos británicos, Sira afronta el futuro con ansias de serenidad. Sin embargo, no lo logrará. El destino le tendrá preparada una trágica desventura que la obligará a reinventarse, tomar sola las riendas de su vida y luchar con garra para encauzar el porvenir.
Entre hechos históricos que marcarán una época, Jerusalén, Londres, Madrid y Tánger serán los escenarios por los que transite. En ellos afrontará desgarros y reencuentros, cometidos arriesgados y la experiencia de la maternidad.
Rainer Maria Rilke está considerado uno de los poetas más importantes de la literatura universal. Apasionado y enamoradizo, su vida estuvo marcada por su insaciable búsqueda de la belleza. Quiso vivir por y para el arte, y fiel a esa máxima se convirtió en un viajero incansable que visitó España, Egipto o el norte de África acumulando experiencias que alimentaban su producción artística. Además de su obra lírica, también su correspondencia ha sido ampliamente difundida. Entre todas sus cartas destacan estas diez, publicadas poco después de su muerte, que escribió a Franz Xaver Kappus, un joven cadete aspirante a poeta que asiste a la misma escuela militar en la que años atrás se formó Rilke. En ellas, Rilke trata temas como la creación artística, la juventud, la soledad, el amor o la belleza. Un compendio conmovedor que invita a reflexionar.
Hay páginas dedicadas al análisis de películas, notas sobre Flaubert y
Whitman, y una revisión de las traducciones homéricas. Del conjunto de
ensayos, dos sean quizás los más citados: "La poesía gauchesca, un
recorrido por el género y sus autores", y "El escritor argentino y la
tradición", en el que Borges reniega de muchos de sus libros anteriores,
e invita a los escritores a...
La obra poética de Mahmud Darwish es un canto épico a la resistencia, la nostalgia del exilio y la esperanza de la liberación palestina, entretejido con algo tan aparentemente sencillo y natural como es el amor a la vida y el goce del placer.
Yannis Ritsos es uno de los grandes poetas griegos del siglo XX y una de las mejores voces de la poesía europea. Con una delicadeza excepcional, su lirismo se imbuye del pathos griego, y en sus versos, cargados de simbolismo, se hallan huellas del firme compromiso político fruto de sus años militando en el Partido Comunista. Violeta Gil, autora de Llego con tres heridas, nos ofrece en esta hermosa selección unos de los versos más emblemáticos del poeta heleno.
«Partiendo en dos la pena, igual que partían sobre la rodilla su pan de cebada».
Julio Verne, maestro indiscutible de la literatura de aventuras y ciencia ficción, nos presenta una obra que sigue enamorando a generaciones enteras con su narrativa ágil y su capacidad única para mezclar realidad y fantasía. La trama nos introduce a William Kolderup, un millonario excéntrico cuyo sobrino, Godfrey Morgan, decide enrolarse en una expedición que cambiará su vida para siempre. La desafortunada mala suerte le hará naufragar en una isla desierta, donde deberá aprender a sobrevivir (junto a su inseparable Tartelett), adaptándose a las adversidades y descubriendo la verdadera esencia del ser humano cuando se enfrenta a la naturaleza en su estado más puro.
Una novela que nos recuerda que, aunque el mundo moderno avance a pasos agigantados, la esencia de la aventura y el deseo de conquistar lo desconocido siguen siendo una parte intrínseca de la humanidad. En definitiva, una lectura inolvidable que te llevará a través de océanos y selvas, demostrando que el verdadero viaje es el que emprendemos hacia el interior de nosotros mismos.
El inmortal Oscar Wilde despliega todo su genio en dos obras que son un testamento literario de incalculable valor. Estas piezas, escritas en el ocaso de su existencia, nos ofrecen una introspección profunda y desgarradora del alma humana, explorando las sombras de la soledad, el arrepentimiento y la redención.
De Profundis es una extensa carta escrita desde la prisión de Reading, donde Wilde, con una prosa tan bella como punzante, reflexiona sobre su caída en desgracia, su amor no correspondido y la búsqueda de sentido en medio de la adversidad. Este testimonio íntimo y doloroso revela al hombre detrás del artista, a la vez que despliega una crítica mordaz de la sociedad victoriana. Por otro lado, La Balada de la cárcel de Reading es un poema épico que dibuja con crudeza y compasión la brutalidad del sistema penitenciario y la deshumanización de los reclusos. Los versos, impactantes y sumamente emotivos, nos empujan a sentir la desesperanza y el anhelo de libertad, recordándonos que la belleza puede emerger incluso de los rincones más sombríos.
En Alicia a través del espejo, Lewis Carroll te arrastra de nuevo a un mundo donde las reglas del sentido común se quedan en la puerta. Aquí, Alicia no solo corre tras un conejo, sino que se lanza de cabeza a un universo donde todo es posible y nada es lo que parece. Atraviesa el espejo y déjate llevar por un ajedrez gigante donde los peones son personas, las reinas tienen prisa y los caballos podrían invitarte a cenar. Con un humor que destila ingenio y una serie de acertijos que desafían todo razonamiento, Carroll despliega, en esta obra excepcional, un carnaval de personajes estrafalarios y diálogos que son puro juego de palabras, desafiándote a encontrar sentido donde la lógica es la primera en rendirse e invitándote a desordenar tus certezas y encontrar diversión en cada página. Prepárate para reír, reflexionar con todo el trasfondo que no se cuenta y, sobre todo, para no tomar nada demasiado en serio. Después de todo, en el mundo al revés de Alicia, lo único predecible es lo impredecible.