La novela de culto de los hackers.
En 1942, Lawrence Pritchard Waterhouse, genio matemático estadounidense, colaboró con otros especialistas en descifrar los códigos secretos de las potencias del Eje. Sesenta años más tarde, su nieto Randy, un brillante criptohacker, proyecta crear un paraíso de datos y el mayor exponente de la libertad informática: La Cripta.
Si las matemáticas de los primeros criptoanalistas se vieron sometidos a las necesidades de la Segunda Guerra Mundial, la Cripta está condicionada por las leyes y normas de las altas finanzas internacionales y la infotecnología.
Esta obra, con su ironía y amenidad, es a la criptología y la narrativa ciberpunk lo que El señor de los Anillos es a la magia y a la fantasía. Criptonomicón es un ciberthriller y el nuevo libro de culto de los hackers.
Raskólnikov es un joven de veintitrés años que acaba de terminar sus estudios y que malvive en una buhardilla de San Petersburgo. A pesar de su pobreza, es apuesto y elegante y de una gran inteligencia. Desde el principio de la novela acaricia el plan de robar y matar a una prestamista, una anciana ciertamente desalmada y mezquina. Originalmente titulada Los borrachos, con el propósito de desarrollar el tema del alcoholismo en la familia, Crimen y castigo ?que aquí ofrecemos en una nueva traducción de Fernando Otero Macías fue escrita por Dostoievski en una época de deudas y penurias muy particular. Hoy es, incuestionablemente, su obra más conocida.
Crimen y castigo es una de las novelas psicológicas de Dostoievski. Su argumento gira en torno a un joven estudiante que no encuentra otra solución para aliviar su pobreza que matar y robar a una vieja usurera. La novela está estructurada sobre un tema ético: el fin no justifica los medios. Se asiste así a un complicado proceso mental durante el cual el estudiante elabora meticulosamente su crimen, sin pensar en las consecuencias directas y materiales que le pueda reportar. Únicamente al final y a través del amor, le llegará el arrepentimiento redentor.
Crimen y castigo (1866) es seguramente la obra más lograda de Fiódor Dostoyevski (1821-1881). En esta parábola de transgresión y expiación, las elucubraciones de su protagonista Rodion Raskolnikov -nihilista descarriado por las teorías utilitaristas procedentes de Occidente- en torno al derecho de los hombres extraordinarios a utilizar el asesinato como medio para alcanzar fines superiores confieren al relato su carga ideológica. Sin embargo, los argumentos doctrinales encaminados a justificar la muerte de una vieja prestamista se combinan de forma inextricable con el estudio psicológico del criminal, cuyo forcejeo y desgarro íntimos confieren a la novela sus excepcionales complejidad y hondura.
Todo el mundo en Athena, Misisipi, conoce a Charlie Harris, el amable bibliotecario dueño de un gato llamado Diesel al que pasea con correa. Ha regresado a su ciudad natal para sumergirse en los libros, pero pronto la vida real lo envuelve en una novela de misterio…
Godfrey Priest, famoso, arrogante y manipulador autor de bestsellers gore y antiguo compañero de clase de Charlie, aparece muerto.
A pesar de los resentimientos Charlie, con la ayuda de Diesel, deciden resolver el misterio de la muerte del desagradable novelista a quien no le faltan enemigos.
La serie de cosy crime número uno en ventas. «La digna sucesora de Agatha Christie» (El Mundo) regresa con un caso a bordo de un crucero del que nadie podrá escapar.
Los miembros del Club del Crimen se disponen a disfrutar del verano como más les gusta: leyendo hasta el desmayo, discutiendo sobre sus libros preferidos y, en el caso de Alicia Finlay, viviendo al máximo su romance incipiente con su atractivo e irresistible doctor.
Pero cuando reciben una invitación para pasar unas semanas en el histórico crucero SS Orient, una réplica de un legendario modelo a vapor que antaño navegaba entre Inglaterra y Australia, Alicia y sus amigos no pueden resistir la tentación de vivir una nueva aventura... Emocionados ante la perspectiva de maravillosos atardeceres sobre el océano y románticas veladas a la luz de la luna, embarcan con las maletas llenas de libros y la cabeza repleta de planes.