En un mundo sin magia, y tras un año de trabajos forzados en las minas de sal, una joven asesina es convocada a palacio. Ella no acude para acabar con el sanguinario rey que gobierna desde su trono de cristal, sino para conquistar su propia libertad. Si vence a veintitrés asesinos, ladrones y guerreros en una competencia a vida o muerte, será absuelta de prisión para ejercer como campeona real. Su nombre es Celaena Sardothiem. El príncipe la provocará. El capitán de la guardia la protegerá. Una princesa de lejanas tierras se convertirá en su amiga. Pero algo maligno mora en el castillo y está ahí para matar. Mientras sus competidores van cayendo uno a uno, la lucha de Celaena por su liberación se convierte en una lucha por la sobrevivencia y en una incesante búsqueda del origen del mal antes de que destruya su mundo.
Holly Miller quiere que el próximo verano sea inolvidable. Es una chica responsable y trabajadora, pero pronto habrá un gran cambio en su vida y quiere sentir que ha aprovechado al máximo la etapa que está a punto de cerrar. No desea mirar atrás y arrepentirse de lo que ha dejado de hacer. Así que Holly tiene un plan y solo necesita a los Lions.
Jack Marchisio solo quiere largarse sin mirar atrás. Su vida es un desastre desde hace tres años, el tiempo exacto que lleva cargando con problemas que ni siquiera son suyos, pero ya falta muy poco para alejarse de todo y no piensa renunciar a su brillante futuro por nada ni por nadie. Jack es el rey de los Lions. Todos lo saben y lo respetan.
Un trato. Dos condiciones. Y el mundo de Jack y Holly se pondrá patas arriba.
Da igual las veces que Jack se haya repetido que es un error fijarse en esa chica rara que siempre tiene la cabeza metida en un libro, porque no puede dejar de pensar en ella. No importa que Holly se diga una y otra vez que no puede haber sentimientos con el arrogante y estúpido quarterback, porque él está marcando la diferencia.
Dos fuertes temperamentos, dos polos opuestos, sueños por cumplir, barreras que tumbar y un amor indomable y extraordinario con la fuerza de un millón de fuegos artificiales.
Todo está hecho pedazos. Jack ha roto el trato con Holly y nunca nada le había dolido más, pero tiene una razón demasiado importante para hacerlo. Holly no entiende qué ha ocurrido. Le han destrozado el corazón, pero no piensa hundirse. Tiene una lista de metas. Es valiente y va a perseguir sus sueños.
Sin embargo, por mucho que lo intenten, Jack y Holly no son capaces de olvidarse el uno del otro. Cada vez que se ven, cada vez que están en la misma habitación, su respiración se acelera y el corazón les late desbocado.
Los problemas de Jack, que ni siquiera son suyos, Tennessee, Bella, lo que ocurrirá después de graduarse? Demasiadas cosas los separan, pero lo que sienten cuando están cerca es más grande, más fuerte. El amor ya ha marcado el camino.
¿Qué ocurre cuando todos tus planes se desvanecen?
¿Qué sucede cuando estás tan perdida que no sabes hacia dónde dirigir tus pasos?
Harper tiene un plan. Es perfecto. La vida que tanto desea, en la punta de los dedos.
Sin embargo, una pérdida inesperada hará que todo su mundo se tambalee.
Porque los secretos no pueden guardarse para siempre.
Porque una sola decisión puede cambiarlo todo.
Y la vida no trata de sobrevivir a la tormenta, sino de aprender a bailar bajo ella.
¿El amor está escrito en nuestro destino?
¿Crees que bastan treinta segundos para proyectar lo vivido y desvelar lo que está por venir?
Beth vio algo cuando se debatía entre la vida y la muerte y ahora está segura de que logrará su sueño, de que llegará a ser una anciana feliz y satisfecha, y de que hay alguien con un aspecto muy concreto con quien compartirá el resto de sus días. Sin embargo, el comienzo de la universidad trae nuevas oportunidades, desvíos que tomar y la presencia de Chris, que le hace sentir tantas cosas como nunca creyó posible… solo que no es el chico que marca el destino.
Chris cree en el amor, pero no en los «para siempre». Hasta que Beth se cruza en su camino y lo que empieza como un desafío para intentar demostrar que el futuro se escribe día a día se convierte en algo más. Está seguro de algo: no tiene la cara adecuada, pero es el chico adecuado.
¿Está escrito el destino? ¿O puede el amor jugar bajo sus propias reglas?
UNA HISTORIA DE AMOR EN LA QUE EL AZAR Y EL DESTINO JUEGAN UN PAPEL ESENCIAL