Una escuela para construir el futuro.
En educación, ir a contracorriente no es una simple actitud; ser rebeldes es una convicción para caminar hacia la sociedad que queremos. Un día, de pronto, decidimos dejar de situar el foco en el objeto de estudio y lo pusimos en los jóvenes, los verdaderos protagonistas del proceso de aprendizaje y del cambio. Y entonces comprendimos que para que los jóvenes fueran los verdaderos protagonistas también era necesario dar un giro en nuestro papel como docentes, como familias y como sociedad.
Un profe rebelde puede cambiar un aula, pero una educación rebelde que incluya a todos sin excepción puede transformar una sociedad y lograr un futuro mejor.
Ese es nuestro reto.
Ken Robinson desarrolla las ideas de su famosa charla TED «¿Las escuelas matan la creatividad?» y presenta soluciones innovadoras a uno de los problemas más relevantes de nuestra sociedad: cómo transformar un sistema educativo caduco. Para lograrlo, propone darle un nuevo enfoque, aprovechando el potencial de los recursos tecnológicos y profesionales y fomentando así la participación de los estudiantes para que pierdan el miedo a equivocarse, y desarrollen la creatividad y su pasión por aprender. Repleto de anécdotas, casos, investigaciones y consejos, Escuelas creativas enfrascará a cualquier interesado en la enseñanza, porque le hará replantearse muchas ideas preconcebidas y le ayudará a reflexionar sobre cuál es realmente el verdadero sentido de la educación en el siglo XXI.
Howard Gardner, que ya revolucionó nuestra concepción de la mente con su teoría de
las inteligencias múltiples, nos ofrece ahora una obra trascendental sobre los objetivos
de la educación. En este libro, Gardner reúne los discursos de sus obras anteriores en
una nueva e importante síntesis destinada a padres, educadores e interesados en general.
El texto va más allá de cuestiones locales y explora las cualidades que debe poseer toda
persona formada en cualquier especialidad, así como los modos de transmitir esa
formación a sus alumnos. Gardner argumenta con entusiasmo que toda enseñanza
debería reforzar en los estudiantes la comprensión de la verdad y la falsedad, la belleza
y la fealdad, la bondad y la maldad, tal como las definen sus propias culturas. En
La. educación de la mente y el conocimiento de las disciplinas, Gardner explora la teoría de
la evolución, la música de Mozart y las consecuencias del Holocausto como ejemplos ilustrativos de la naturaleza de la verdad, la belleza y la moralidad. Su objetivo final es una ciudadanía educada que comprenda el mundo físico, el mundo biológico y el mundo social, y que sepa aplicar esta comprensión a su mundo personal, social y cultural. Lejos de la mentalidad basada en los contenidos y la experimentación que se ha apoderado tanto de los ciudadanos como de los legisladores, la educación que propone ayudará a las generaciones más jóvenes a aceptar los desafíos del futuro, conservando al mismo tiempo las metas tradicionales de una educación «humana».
En un mundo como el nuestro cada vez más centrado en el hacer, este libro lleva nuestra atención al ser. Como educadores y padres estamos llamados a acompañar a los más pequeños en la formación de su propia identidad y en el desarrollo de una sana autoestima. Este libro ofrece pautas sencillas y claras, así como cuestiones sobre las que podemos reflexionar, ligadas a nuestra práctica cotidiana, que nos permitirán desarrollar nuestro tacto pedagógico, es decir, nuestra capacidad de educar desde el cariño y el sentido común.