La historia es de las mujeres y de los hombres, por más que la de los segundos se haya divulgado y la de las primeras escamoteado. Pioneras, 1850-1960 narra la historia del mundo contemporáneo con el foco puesto en la experiencia femenina, en un siglo en el que la mujer ha revolucionado los roles previos, cambiando profundamente su papel en la mayor parte del mundo, hasta la llegada de la segunda ola del feminismo. Revolucionario es también el acercamiento de Marina Amaral, que consigue con su maestría coloreando la añeja fotografía en blanco y negro contar las vidas y experiencias de esas mujeres tanto célebres como ordinarias, que cambiaron el mundo, ya fuese en un laboratorio o protestando en las calles, actuando sobre escenario o luchando en las trincheras, compitiendo en unas elecciones o explorando la naturaleza. Estas pioneras, con los riesgos y avatares que corrieron, con los anhelos y esperanzas que vieron cumplidos o derrotados, sembraron las semillas de un mundo que queremos igual.
A Max Planck se le atribuye ser el padre de la teoría cuántica, y su obra es descrita por su amigo Albert Einstein como la base de toda la física del siglo XX.
Pocos se atreverían a afirmar que Platón sea el único padre de la filosofía, pero eso es lo que se defiende en este libro, siguiendo la línea del filósofo inglés Alfred North Whitehead cuando afirmó que «la historia de la filosofía occidental no es más que una serie de notas al pie de página de Platón». Pese a todo, se sabe muy poco del hombre que fue Platón, y no se ha escrito ninguna biografía merecedora de tal nombre en los últimos siglos. Robin Waterfield asume el reto de redactar la tan necesaria biografía y traza un vívido retrato que, sin renunciar al rigor académico, nos aclara cuánto se sabe de la acaudalada familia del filósofo, de sus amigos y sus posibles amores, y de sus relaciones políticas en una Atenas en plena guerra del Peloponeso, una ciudad que bullía en ideas y atraía a estudiantes de todo el mundo griego en busca de los conocimientos que regalaban ―o vendían― sofistas, pitagóricos y la embrionaria Academia de Platón. Una perfecta introducción al hombre y su tiempo, una biografía que no solo ilumina una nueva perspectiva sobre el filósofo, sino que anima a la lectura de sus obras.
El compositor estadounidense de origen austriaco Arnold Schoenberg (1874-1951) fue un icono internacional en su época. Su sistema dodecafónico se consideraba el futuro de la música. Hoy las principales orquestas rara vez tocan sus obras, y su nombre es recibido con apatía, cuando no con antipatía.
Este libro, que en ningún momento pierde de vista al lector no especializado, es una apasionada defensa de Schoenberg, compositor de algunas de las obras más intimidatorias jamás escritas y cuya vida -con sus facetas de pintor, compositor, profesor, judío exiliado, escritor y pensador- puede entenderse como un gran relato de la cultura occidental del siglo XX. Harvey Sachs muestra cómo el músico se rebeló contra la tradición, luchó por ser aceptado en el contexto de las calamidades de su época, desafió a sus críticos -entre ellos los nazis, que calificaron su música de degenerada- y se enfrentó constantemente al antisemitismo, que acabó precipitando su huida de Europa a Los Ángeles.
Sintetizando el exceso wagneriano con la contención brahmsiana, Schoenberg generó sin embargo una onda expansiva que nunca se calmó del todo y, como Sachs argumenta con fuerza, acercarse a él y a su obra es indispensable para cualquier persona interesada en el pasado, el presente y el futuro de la música occidental.
Algunas personalidades y su obra literaria son capaces de condensar un mundo entero y su propia representación. Es el caso de Primo Levi, voz imprescindible para tratar de comprender, en el mejor sentido que a tal cometido otorgaba la también extraordinaria pensadora del siglo XX, Hannah Arendt, la catástrofe inimaginable y el singular acontecimiento del Holocausto o Shoá y su correlato, el deber de su memoria.
Es cierto, además, que esa preocupación ocupa la centralidad de su obra, pero es también preciso enfatizar que ese centro lo es de una constelación de escrituras que también se ocupan de otros temas y motivos, cultivados con la misma excelencia literaria que caracteriza su obra toda.
Los especialistas congregados en este volumen abordan, desde la singularidad de cada uno de sus puntos de vista, la riqueza de esa constelación de escrituras, que no solo testimonia y acredita ante todos un deber irrenunciable hacia el pasado, sino que también previene y advierte frente a las amenazas que surgen en tiempos cada vez más convulsos.
Pocos meses antes de su muerte, Primo Levi conoce a los alumnos de la escuela primaria de Rignon en Turín, la misma a la que él asistió cuando era niño. De la mano del escritor, los niños aprenderán qué fue el Holocausto, y conocerán la experiencia en primera persona de uno de los supervivientes del infierno de Auschwitz, una de las páginas más oscuras de la historia del siglo XX. El cómic viene complementado por una detallada cronología sobre la vida de Primo Levi, y por una descripción ampliada de los personajes más significativos de su historia.