ELLOS USAN LA MAGIA PARA SILENCIAR EL MUNDO
A los diecisiete años, Shae ha tenido una vida relativamente tranquila. Vive con su madre, bromea con su mejor amiga Fiona y con Mads, el chico que siempre sabe cómo hacerla sonreír. Aparentemente, Shae mantiene bajo control su miedo a la Mancha, esa enfermedad mortal transmitida por la tinta. Pero tras la muerte de su hermano pequeño, extraños sueños que parecen convertirse en realidad y un grupo de hombres justicieros llamados Bardos, que dicen usar la magia de la Palabra para mantener a su pueblo en paz, la acechan cada segundo. Cuando su madre es asesinada, ya no puede seguir fingiendo que todo está bien.