"Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada uno sea recompensado por sus hechos estando en el cuerpo, de acuerdo con lo que hizo, sea bueno o sea malo" (2 Corintios 5: lOLBLA).
Desde una perspectiva cultural e histórica pagar con dinero los pecados cometidos a través de las santas indulgencias papales en la Edad Media parece absurdo y ridículo.
Sin la ventaja de la perspectiva histórica, La Nobleza de Dios, vivir o morir logra evidenciar y confrontar con fundamento bíblico, la contemporánea doctrina que sostiene la posibilidad de salvación al creyente que muere en pecados dominantes, incluyendo el suicidio.
La casuística -teología moral que trata casos difíciles de conciencia y de conducta-que vindica al suicida es motivada religiosamente por la cantidad alarmante de suicidios en el mundo secular y creyente. Este desvío doctrinal es la respuesta "consoladora" a los familiares de los que decidieron terminar con su existencia por cuenta propia. Hay pecados que por su naturaleza son más que pecados, son juicios divinos y aborrecer el propio cuerpo es antinatural y una entrega divina.
Doy gracias a Dios por haber puesto en el corazón del pastor Willy Bayonet el escribir este libro, donde se presenta de manera clara y sencilla la inconsistencia bíblica de la doctrina que enseña del "cristiano que se suicida y va al Cielo", llevándonos al pensamiento verdaderamente bíblico, histórico y reformado sobre este importante tema (Guillermo de Lama, Pastor de la Iglesia Bautista Reformada de Lima - Perú).
