Marx para principiantes ha ayudado a divulgar, como pocos, el pensamiento marxista en América Latina. Durante muchos años, varias instituciones de nivel medio lo tuvieron como libro de texto y es innegable que muchos estudiantes, activistas, políticos, maestros y hasta filósofos de la izquierda latinoamericana tuvieron su primer contacto con el pensamiento marxista a través de este libro de Rius.
El balance de las últimas tres décadas de política económica argentina que Federico Poli presenta en este libro se beneficia de su dilatada trayectoria profesional en nuestro país y en organismos internacionales y de sus intervenciones en la esfera pública con las que, en la forma de artículos periodísticos, fue dando testimonio durante esos años. Todo lo que aquí hay de diagnóstico es insumo de una potente plataforma de lanzamiento de propuestas para nuestros presente y futuro. En el mismo gesto en que Poli impugna a populistas obsesionados por la redistribución de lo inexistente y a liberales fijados en la estrechez de lo monetario por haber contribuido a la destrucción del proceso inversor, señala el peor olvido de la dirigencia argentina: la generación de riqueza, núcleo del fracaso colectivo de último medio siglo. Agotadas las dos caras de una misma y ruinosa moneda, en estas páginas se demuestra que los activos productivos de lo que supimos hacer todavía están ahí; en eso, y en su formulación de una síntesis desarrollista que devuelva bienestar a la Argentina, se cifra la visión esperanzada que propone y a la que convoca.
Franco Berardi es conocido como «Bifo» desde que, en 1977, fuera acusado de estar entre los principales autores de la «insurrección creativa» de Bolonia. La búsqueda de una posible liberación del tiempo de vida de la esclavitud al trabajo asalariado recorre medio siglo de su actividad teórica: desde los artículos de los años setenta, publicados en fanzines y folletos de producción propia, hasta las profecías distópicas de las primeras décadas del siglo xxi, pasando por los ensayos sobre las implicaciones de la expansión de la red de redes en los años noventa.
Como no podía ser de otra manera en unas «obras escogidas», los escritos reunidos en este volumen abordan multitud de cuestiones: tecnología, comunicación, poesía, arte, psicoanálisis, esquizoanálisis, teoría política, geopolítica, etc. Lo que sin embargo unifica esta disparidad de temas es que la obra de Bifo viene siempre animada por una pasión constante por la rebelión ética y política. Partiendo de la observación de que la tecnología y el conocimiento reducen el tiempo de trabajo necesario, el autor elabora una visión original de los procesos técnicos, antropológicos y políticos. A pesar de la involución que ha producido el neoliberalismo en la historia del mundo y de la caída en nuevas formas de identitarismo y fascismo posmoderno, Bifo siempre muestra una posibilidad de emancipación.
El economista bestseller Nouriel Roubini fue apodado «Doctor Fatalidad» por sus agoreras previsiones y advertencias en 2006 sobre la crisis financiera que se avecinaba, hasta que sus predicciones y la Gran Recesión se hicieron realidad en 2008, cuando ya era demasiado tarde.
Sus predicciones están de vuelta con un pronóstico mucho más aterrador. Roubini identifica diez riesgos y peligros sin precedentes que se ciernen sobre nuestro planeta, interconectados y superpuestos, y tan graves que pueden considerarse «megamenazas».
La peor crisis de deuda que el mundo haya visto jamás, tensiones geopolíticas que llevarán a una nueva Guerra Fría entre China y los Estados Unidos, la expansión de la ola populista, la emergencia climática, la normalización de las pandemias globales, el colapso demográfico, la desglobalización económica, la revolución tecnológica y su impacto en el empleo, el aumento de las desigualdades o el agravamiento de la inflación son algunas de sus manifestaciones.
Nuestra generación va a asistir al fin de la era de crecimiento económico, prosperidad sostenida, alta productividad, estabilidad y paz a la que nos habíamos acostumbrado. Nos encaminamos hacia una época de inestabilidad crónica, conflicto y caos.
A menos que entremos en razón y actuemos ya, nos asomaremos al precipicio de una «Gran Estanflación» que hará que la Gran Depresión o la crisis de la década de 1970, a su lado, parezcan un juego de niños. Una vez más, estamos avisados.
Con el derrumbe del comunismo en 1989 las utopías del siglo xx desaparecieron y dejaron lugar a un presente cargado de memoria pero incapaz de proyectarse en el porvenir. Este nuevo vínculo entre historia y memoria permite redescubrir una tradición oculta, una visión melancólica de la izquierda que atraviesa la historia revolucionaria. A partir de un archivo vasto y heterogéneo de teoría, testimonios e imágenes, Enzo Traverso explora esta constelación melancólica desde perspectivas diversas: el análisis de una cultura izquierdista de la derrota, la descripción de una concepción marxista de la memoria, la construcción de una visión del duelo, y la investigación de la tensión entre el éxtasis y la pena que da forma a la bohemia revolucionaria. Se concentra también en algunas figuras que sintetizan distintas formas de melancolía de izquierda, de Marx a Benjamin, pasando por Trotski y Bensaïd, y en el análisis de una rica iconografía, desde pinturas de Courbet hasta afiches soviéticos de la década de 1920, o películas de Eisenstein, Theo Angelopoulos, Chris Marker y Ken Loach. En las antípodas de un manifiesto nostálgico, Traverso sostiene: 'La melancolía de izquierda no significa el abandono de la idea del socialismo o de la esperanza de un futuro mejor; significa repensar el socialismo en un tiempo en que su memoria está perdida, oculta y olvidada y necesita ser redimida'.
Un referente generacional. Un ensayo sobre cómo recuperar la esperanza en un futuro compartido.
En tiempos estancados, sin futuro, surge una apropiación reaccionaria de la nostalgia. No es ningún secreto: es lo que hemos vivido en los últimos años con el auge de la ultraderecha. Ante esta situación, la izquierda se encuentra en una encrucijada, atrapada entre el instinto de renegar de la nostalgia y la necesidad de soportarse en valores históricos. Quiere mirar hacia delante al mismo tiempo que se enfrenta a un presente marcado por la crisis ecológica y los deseos insatisfechos del liberalismo.
Motivada por el deseo de entender, pero también de actuar, la filósofa y analista política Elizabeth Duval indaga en las razones de dicho fenómeno y propone vías para desatascarlo. Frente a una política que se ha vuelto aséptica y a un pesimismo melancólico, Duval reivindica un posicionamiento feliz, centrado en los afectos, que nos permita reinterpretar nociones como patria o familia, combatir el aislamiento de los individuos y reforzar los lazos que nos unen.