Estamos rodeados de noticias y datos falsos que en algunos casos no dejan de repetirse. Y, como sostiene Levitin, seguramente somos demasiado puntillosos cuando nos referimos a las falsedades. Quizá en un esfuerzo por mantener la concordia, hemos empezado a utilizar eufemismos para aludir a cosas absurdas: teorías marginales, medias verdades, verdades alternativas, hipérboles... Pero " la verdad sí importa. Una era de la posverdad es una era de irracionalidad deliberada, que se opone a todos los grandes avances de la humanidad (afirma el autor)... y la mejor defensa contra los embusteros taimados, la defensa más fiable, es que todos nosotros nos convirtamos en pensadores críticos " . Este libro nos proporciona herramientas y estrategias para valorar la información y ver que muchas cosas simplemente no son como se nos dice.
En este libro, el famoso historiador británico E. P. Thompson cuestiona las posiciones teóricas de Louis Althusser y el marxismo estructuralista. Para Thompson, la concepción estructuralista de la historia de Althusser, como un Óproceso sin sujeto", no solo condenaba al olvido la experiencia concreta de empoderamiento colectivo de los sectores subalternos, sino que además concede un nuevo aliento teórico al estalinismo ideológico que, en su opinión, seguía atravesando las tesis y la práctica del Partido Comunista francés.
En Los orígenes del totalitarismo, Hannah Arendt escribió que 'el sujeto ideal para un gobierno totalitario no es el nazi convencido ni el comunista convencido, sino el individuo para quien la distinción entre hechos y ficción, y entre lo verdadero y lo falso han dejado de existir'. En este libro, Michiko Kakutani advierte que las palabras de Hannah Arendt ya no parecen referirse a acontecimientos de hace más de un siglo sino que describen lo que ocurre en el mundo en que hoy vivimos. Kakutani analiza cómo los diversos populismos y fundamentalismos erosionan la idea de verdad y las instituciones democráticas al imponer el miedo y la ira por encima del debate razonado, y de qué manera se imponen aquellas construcciones retóricas que apelan únicamente a la emoción y al sentimiento. ¿Cómo ha sido posible que la verdad y la razón se hayan convertido en especies en peligro de extinción? ¿Qué augurasignifica su agonía para nuestro discurso público y el futuro de nuestras políticas y nuestra gobernanza? Responder a todas estas cuestiones es el objeto de este libro.
Uno de los factores más determinantes en el deterioro de las democracias liberales ha sido la degradación del periodismo. De ser un pilar básico en la cultura democrática, con la función de garantizar la libertad de expresión y el derecho fundamental de la ciudadanía a recibir información veraz sobre los acontecimientos de interés público, la prensa ha perdido músculo como contrapoder, incluso, a menudo, para convertirse en correa de transmisión del poder.
Teodoro León Gross, desde la doble condición de periodista y académico, explica cómo el debilitamiento de los medios tradicionales y su progresiva pérdida de influencia han facilitado, además, la expansión de las opciones políticas populistas que se aprovechan de la confrontación «trumpista» con la prensa, en un clima de posverdad propicio para la propagación de fake news.
Este libro aborda la crisis que atraviesa el periodismo, y su paso de cuarto poder en el siglo XX a actor secundario en el siglo XXI al perder potencia como contrapeso real para los gobiernos. León Gross detalla los factores que han concurrido en esta «mediamorfosis» a partir del ocaso del modelo de negocio basado en la publicidad con la pérdida de independencia financiera, bajo fenómenos como la tabloidización y espectacularización, el deterioro de los hechos ante la indistinción con la opinión, el triunfo de la comunicación sobre la información... hasta el factor letal: la pérdida de valor de la verdad, que da sentido al periodismo, en toda la cadena de valor.
La muerte del periodismo es un diagnóstico perspicaz sobre la pérdida de prestigio y credibilidad de éste, así como sus efectos en el empobrecimiento de la conversación pública y la polarización de la sociedad en grupos encapsulados en realidades paralelas, con un consumo fragmentario y caótico de noticias en las redes sociales.
El 7 de octubre de 2023 se produjo en Israel un ataque sin precedentes por parte de Hamás. Viejas cicatrices y fantasmas de otros tiempos hicieron acto de presencia: visiones de muerte masiva, el exterminio de judíos perpetrado por los nazis. Un fatalismo personal y colectivo inundó el discurso israelí y sus medios de comunicación. Hamás pasó por un proceso de nazificación y Hitler, nunca del todo muerto para los judíos israelíes, se reencarnó en la figura del líder islamista Yahya Sinwar, el enemigo absoluto, con el que no se negocia y al que hay que eliminar de la faz de la tierra a cualquier precio.
A raíz de los acontecimientos en Gaza, la historiadora Idith Zertal recupera su ensayo La nación y la muerte, un análisis convincente e inquietante sobre las formas en que el Estado de Israel ha utilizado la memoria del Holocausto para definir y legitimar su existencia y su política. Gracias a un primer capítulo inédito, su texto cobra un nuevo significado al trazar La línea de puntos que une el trauma de los campos con la fatídica guerra actual. Basándose en una amplia gama de fuentes, la autora expone en estas páginas el papel fundamental del Holocausto en la esfera pública de Israel, en su proyecto de construcción nacional, su política, su uso del poder y su percepción del conflicto con los palestinos. Zertal sostiene que la centralidad de la Shoá ha llevado a Israel a una cultura victimista que impregna la sociedad y su autoimagen, la divide y limita otras alternativas para la identidad judía en Oriente Medio.
Tras el exito de La manipulación del lenguaje, un libro que analizaba el hilo invisible que existe entre las palabras y la movilización de las conciencias, Nicolás Sartorius regresa con una obra en la que tratará algunas de las expresiones "más populares" de este nuevo y perverso lenguaje de la actualidad resultante tras la crisis de la Covid-19, en todas sus facetas: económica, social, política. ¿La anormalidad era lo que vivíamos? ¿Por eso hemos vuelto a una nueva normalidad? ¿Debemos crear una normalidad diferente?