Un profundo desamparo existencial se extiende y consolida preocupantemente en todo el globo. Diana Aurenque Stephan atribuye dicha orfandad al olvido del animal ancestral que somos, al desconocimiento de su racionalidad ancestral y de los modos en los que esta articula la organización social y la convivencia política.
A partir de este diagnóstico, la autora nos plantea formas de relacionarnos comunitariamente más sanas, menos nerviosas y ansiosas, que nos conduzcan hacia una política de mayor amparo. ¿Cómo logramos acercarnos siendo tan distintos y distantes? ¿Cómo anclarnos sensatamente en un nosotros? ¿cómo desarrollar la individualidad resguardando la pluralidad? ¿cómo pensar una comunidad amplia que ampare sin que oprima?
A partir de estas preguntas, la filósofa propone una terapéutica psicopolítica y filosófica original, que piense en el rol político de los ancestros, del mito, de la música y de la voz, del nihilismo, entre otros, para imaginar un nuevo amparo. Uno que nos cure –con algo de magia- del desarraigo del sujeto y su logos huérfano, para así anclarnos de nuevo –o por primera vez– a una tierra de pasado, presente y futuro común de animales ancestrales.
Por qué algunas ideas radicales pasan a la historia y otras fracasan?
Tendemos a pensar en las revoluciones como algo ruidoso: frustraciones y demandas que se gritan en las calles. Pero las ideas que las alimentan se han concebido tradicionalmente en espacios mucho más silenciosos, en rincones apartados donde una vanguardia puede imaginar realidades alternativas y deliberar sobre cómo llegar a ellas. Este extraordinario libro es una búsqueda de esos espacios, a lo largo de siglos y continentes, y una advertencia de que —en un mundo dominado por las redes sociales— podrían extinguirse pronto.
Antes de la tormenta es un gran panorama que se abre con la correspondencia del siglo XVII que puso en marcha la revolución científica y avanza en el tiempo para examinar los motores del cambio social: las peticiones que aseguraron el derecho al voto en la Gran Bretaña de 1830, los fanzines que dieron voz al descontento de las mujeres a principios de la década de 1990, e incluso las aplicaciones de mensajería encriptadas utilizadas por los epidemiólogos que luchaban contra la pandemia a la sombra de una administración inepta. En cada caso, Beckerman muestra que nuestros movimientos sociales más definitorios —desde la descolonización hasta el feminismo— prosperan cuando se les da el tiempo y el espacio para gestarse antes de difundirse ampliamente.
La extrema derecha española empezó a parecerse un poco más a la europea cuando murió el dictador Francisco Franco. La transición estuvo marcada por la violencia de los grupos parapoliciales y el terrorismo de Estado, pero pronto llegaron las bandas de skinheads neonazis, los ultras del fútbol, y poco a poco, las nuevas formaciones de ultraderecha y los movimientos sociales neofascistas. La generación que creció después de la transición dio respuesta, desde distintos ámbitos y con tácticas diversas, a una nueva ultraderecha que ejercía la violencia de una manera brutal contra diferentes colectivos, y que progresivamente trató de hacerse un hueco en las instituciones. Ramos repasa las diversas luchas contra la nueva extrema derecha que surgió en España desde mediados de los años ochenta hasta la actualidad, con testimonios de sus protagonistas y crónicas periodísticas y políticas de cada momento: cómo se organizaron las distintas plataformas y colectivos que pasarían de la autodefensa inicial a la ofensiva contra los grupos de extrema derecha; qué papel jugó el periodismo, la cultura, la música, las instituciones y otros movimientos sociales; y la pluralidad de la lucha antifascista, sus alianzas, sus debates y algunas de sus victorias. Pero también, cómo una parte del movimiento antifascista combatió en soledad, asumió los riesgos, sufrió la violencia de los neonazis, la persecución policial y judicial, así como la criminalización de los medios de comunicación.
El apoyo mutuo es el acto radical de cuidado de los demás mientras se trabaja por cambiar el mundo. A lo largo y ancho del planeta, la gente se enfrenta a una espiral de crisis financieras, políticas, sanitarias y medioambientales, que se traducen en los horrores de la miseria generalizada, el encarcelamiento de masas, el racismo policial, el brutal control de la inmigración, los recortes al bienestar y la violencia de género. En paralelo a los fracasos de los gobiernos a la hora de responder a estas crisis, la gente normal y corriente está ensayando nuevos y audaces modos de compartir recursos y sostener a los más vulnerables.
Este libro trata sobre el apoyo mutuo, sobre su importancia, sobre su contenido y sobre cómo practicarlo. Aporta una teoría de base del apoyo mutuo, al tiempo que lo considera una estrategia crucial para los movimientos por la justicia social. Ofrece herramientas concretas para su organización, así como para promover los procesos colectivos de toma de decisiones, para resolver y aprovechar los conflictos y para superar las crisis de agotamiento que produce la militancia. Al escribir para quienes se acaban de iniciar en el activismo, así como para quienes llevan largo tiempo en los movimientos sociales, Dean Spade ofrece una visión radical de la movilización comunitaria, la transformación social, el activismo comprometido y la solidaridad.
Arte y democracia nace como resultado de la decisión de los artistas, que enero de 2022 formaban parte del Consejo de Administración de VEGAP, de convocar un encuentro público para tratar el papel que hoy en día juega el hecho artístico en las sociedades abiertas. La base de este encuentro era tratar dos ideas fundamentales: por una parte, la defensa de la actividad artística en las sociedades democráticas; y, por otra, la defensa de los derechos de autor de los creadores visuales ante las rápidas y agresivas transformaciones socio-económicas de la actual sociedad digitalizada y globalizada. El Derecho de autor, producto de la Revolución francesa y de la Ilustración, está inserto en el corazón mismo de la DEMOCRACIA moderna y bajo las amenazas de las transformaciones de la actual sociedad tecnológica. La responsabilidad pública sobre el Patrimonio afecta también al reconocimiento de los artistas como generadores de PATRIMONIO CONTEMPORÁNEO. Una sociedad democrática es una creación social de aportaciones libres que encuentra en los autores su expresión más activa. El ARTE es un hecho social, tiene una dimensión colectiva que materializa los emblemas de las metamorfosis y cambios de la época.