Dos años después de la invasión rusa de Ucrania, Sofi Oksanen, reconocida como una de las narradoras escandinavas más brillantes gracias a novelas tan aclamadas como Purga, se adentra por primera vez en el campo de la no ficción con una crónica tan urgente como necesaria, tan implacable como estremecedora, sobre los crímenes sexuales de las tropas rusas en territorio ucraniano. Y lo hace tomando como hilo conductor dos dramas separados por ocho décadas: el de su tía abuela estonia que, tras una noche de vejaciones por parte del ejército soviético en 1944, enmudeció para siempre, y el de muchas personas que hoy siguen padeciendo un destino similar a manos de los soldados rusos.
A partir de estos casos, Sofi Oksanen nos muestra cómo, aunque nadie se bañe dos veces en el mismo río, la historia del imperialismo ruso no deja de repetirse. Así, la hoja de ruta de Putin recuerda a la de la emperatriz Catalina la Grande en Crimea en 1783 y a la de la Unión Soviética de Stalin, y las tres comparten el mismo modus operandi: negar la cultura e incluso la humanidad del supuesto enemigo, echando mano de una incesante propaganda y repitiendo el mito de la invencibilidad rusa, deportar o asesinar a poblaciones enteras y usar la violencia sexual como un arma más en el contexto de la guerra.
Lleno de lucidez, rabia y esperanza, Dos veces en el mismo río es una indagación de primer orden sobre la historia de la misoginia en Rusia y una valiosa reflexión acerca de las tropelías de los ejércitos, que da voz a las víctimas de unas prácticas que podríamos creer superadas, pero que nunca han llegado a desaparecer
Esa desigualdad se retroalimenta y está averiando los tradicionales ascensores sociales: los impuestos dejan de gravar más a los que más tienen y la educación y las pensiones dejan de garantizar el ascenso o la protección social. El resultado es un edificio en el que los más ricos ganan más y los más pobres cada vez tienen menos, diferencias que se van enraizando en nuestra comunidad, de manera que quienes nacen pobres no pueden ascender y quienes nacen ricos nunca dejan de serlo.
La desigualdad es también empresarial y afecta incluso a la libertad de expresión, donde las líneas editoriales comienzan a servir a las grandes fortunas en lugar de a los grandes públicos.
Este es el estado actual de nuestro Edificio España. Hacen falta reformas urgentes para evitar que se derrumbe.
Este libro no es solo una reflexión sobre sostenibilidad, es una invitación a cambiar nuestra perspectiva y transformar cómo diseñamos y habitamos el mundo. Con una mirada crítica, aborda la saturación del término "sostenible", instando a redescubrir su verdadero significado: la capacidad de mantener la vida sin agotar los recursos ni hipotecar el futuro. Desde esta premisa, la naturaleza se posiciona no solo como inspiración, sino como mentora y modelo para rediseñar nuestras ciudades y edificios.
El contenido de estas páginas nos lleva a imaginar un futuro en el que los edificios funcionan como organismos vivos, respirando, adaptándose al entorno y generando equilibrio dinámico. En esta visión, las ciudades se asemejan a bosques: ecosistemas interconectados donde el aire, el agua, la energía y los desechos fluyen en circuitos cerrados y regenerativos, como las raíces y micorrizas de un bosque.
La obra no solo aspira a resolver problemas técnicos, sino a proponer un cambio de paradigma: mirar el diseño urbano como una extensión de los sistemas naturales. Con un enfoque interdisciplinario, el texto enfatiza la colaboración entre arquitectos, biólogos, ingenieros, biotecnólogos, diseñadores, humanistas y químicos, entre muchos otros. Este enfoque bioinspirado nos recuerda que, al fin y al cabo, formamos parte de la naturaleza, y nuestro futuro depende de cómo decidamos aprender de ella y con ella.
Un manifiesto subjetivo a favor de la convivencia.
La democracia española tiene poco más de cuarenta años (anteayer, como quien dice). Y su consolidación se debe a la voluntad que han mostrado políticos de muy diversas ideologías, en ocasiones enfrentadas, de construir un proyecto compartido. Nacho Corredor ha tenido la oportunidad, en la última década, de vivir de cerca algunos de los acontecimientos que han marcado la historia del país. De esas experiencias nacen estas reflexiones.
El activismo tranquilo no es un manifiesto filosófico ni una crónica política. Solo trata de animar, desde el análisis en primera persona y el compromiso político, a seguir manteniendo viva la necesidad de luchar por la democracia, en un contexto de crispación extrema y del aumento de una visión reaccionaria de la historia. Este libro es un manifiesto en favor de la convivencia que toma partido sin ser partidista. Un manifiesto escrito desde la subjetividad de unmillennialnacido en Santander, crecido en Catalunya (y que sueña en catalán) y que vive y trabaja en Madrid. Un texto subjetivo, sí, a favor de la vida en comunidad.
«Conviene recordarlo, porque la democracia es una excepción en la historia de España y su perpetuidad no está garantizada. La democracia, de hecho, es una excepción en la historia del mundo. Como lo ha sido el proceso de integración entre Estados que ha representado la Unión Europea. O como lo es, no solo en la historia sino en el mundo, el sistema de bienestar europeo. Nada es para siempre. No descubrimos nada nuevo si advertimos que el orden liberal, el sistema en el que más democracia, libertad, derechos, desarrollo y bienestar ha habido en la historia, está amenazado y tiene a sus enemigos dentro.»
El algoritmo de la incertidumbre descifra los códigos invisibles que operan en nuestra sociedad y desentraña algunos de los mecanismos que han impuesto las grandes empresas al sistema educativo, a la política y a la cultura.
El resultado es una obra que presenta algunos de los grandes dilemas de nuestra época y ofrece propuestas para el mundo que viene, en el campo de la educación postdigital, la plataformización, la educación mediática y el futuro de las democracias. No es una obra sobre algoritmos ni sobre matemáticas, sino que ofrece, desde la metáfora, desmitificar la concepción de la realidad actual. No existe el algoritmo del amor, ni el algoritmo de la paz, y tampoco el de la incertidumbre. 37 autores en 24 capítulos que operan como si fueran algoritmos, ofrecen las claves para entender algunos aspectos de este mundo incierto.
El algoritmo de la incertidumbre propone un viaje al lector desde una doble experiencia, combinando texto convencional con códigos QR.
En 1999, dos psicólogos idearon el experimento del gorila invisible. Grabaron a dos equipos de jóvenes mientras se pasaban un balón. Después pidieron a un grupo de personas que visionaran la grabación y que contaran los pases. Más de la mitad no se percató de que una persona disfrazada de gorila aparecía por un lado, caminaba hasta pararse en el centro, se daba unos golpes en el pecho y desaparecía por el otro extremo… No vemos la realidad, aunque la tengamos ante nuestros propios ojos.
Anhelábamos máquinas públicas que nos sustituyeran en las tareas sucias, aburridas o peligrosas. Para cuando nos hemos dado cuenta, una inteligencia artificial privatizada decide en juzgados, hospitales y ministerios.
En el Algoritmo Paternalista, Ujue Agudo y Karlos G. Liberal rastrean el mito del progreso tecnológico en las profundidades de la historia y recorren a vista de pájaro los límites de la inteligencia humana (sesgos, heurística). A continuación, se detienen en los goznes de la comunicación manipuladora, hoy insertos en una matrix que, afirman, está crecientemente bajo control de máquinas antidemocráticas.
El capitalismo ha decidido que las imperfecciones del ser humano son un obstáculo para su civilización, pero no que la riqueza deba repartirse mejor. Por eso, el algoritmo aumenta los flujos del capital pero no las rentas del trabajo. Urge cambiar el sentido de la historia, pero primero hay que entender qué está pasando.