El trabajo de todo el mundo, desde los conductores de Uber y los telefonistas hasta los programadores y los banqueros de inversión, está siendo sometido a la gamificación, la última cara amable de las prácticas laborales que explotan a millones de personas. Nuestro mundo se parece cada vez más a un juego al que no podemos dejar de jugar, en el que nos jugamos tanto que fracasar no supone llevarse un animoso "vuelve a intentarlo", sino perder nuestro medio de vida... o algo peor.»
Los trabajadores de un almacén preparan cajas mientras un dragón virtual corretea por sus pantallas. Si vencen a sus compañeros, obtienen un premio. Si no, pueden ser despedidos. Uber plantea retos a sus chóferes agotados para que sigan conduciendo. China puntúa a sus ciudadanos para que se comporten correctamente, y las microtransacciones de los videojuegos se aprovechan de los logros para vaciar nuestros bolsillos.
Nunca antes un autor se había ocupado de analizar y diseccionar los diferentes golpes o intentos de golpe de Estado habidos en Europa desde el 18 de Brumario de Napoleón hasta la llamada «Marcha sobre Roma» de Mussolini. Con este libro, Malaparte intentaba demostrar que las fuerzas contrarias a los valores de la democracia, tanto de extrema derecha como de extrema izquierda, pueden ampararse en la legitimidad de un Estado moderno y coartar sus libertades. En cualquier país democrático es posible dar un golpe de Estado, incluso sin una situación crítica o sin apoyo popular. Basta un grupo que controle la maquinaria estatal y tome el poder sin confrontar la fuerza adversaria. La estrategia pasa por concentrar las fuerzas en el punto más delicado del adversario, que en un Estado moderno son los servicios públicos y los medios de comunicación.
Malaparte pagó la osadía de esta obra con una condena al destierro, con su muerte social durante los años de efervescencia fascista en Italia.
Una definición sistemática del fenómeno del tecnopopulismo, y un análisis de sus inquietantes consecuencias para los regímenes democráticos. El análisis político suele distinguir entre los regímenes populistas y los gobiernos tecnocráticos, gerenciados por expertos. En esta obra notable, cuya influencia en la discusión contemporánea no ha dejado de expandirse desde su publicación, Christopher Bickerton y Carlo Invernizzi Accetti sostienen que esa dicotomía no da cuenta de la realidad política contemporánea: es más bien la fusión entre populismo y tecnocracia, el tecnopopulismo, la lógica subyacente a las democracias actuales. Estudiando tanto los que denominan casos de tecnopopulismo puro –el Nuevo Laborismo, el Movimiento Cinco Estrellas y la República en Marcha– como ejemplos híbridos –Podemos y la Liga Norte–, los autores muestran cómo, en los últimos treinta años, los proyectos políticos se han basado cada vez más en apelaciones simultáneas al pueblo y al saber experto, abriendo así una profunda brecha entre los ciudadanos y las instituciones que deberían representarlos.
Santiago Siri propone una hoja de ruta audaz para repensar el rol de la inteligencia artificial, el software libre y el bitcoin en la creación de un nuevo orden político y económico. Tecnosapiensno es solo un testimonio de vida ni una crónica de las ideas más disruptivas de nuestro tiempo, es un manifiesto para fundar una civilización austral en la era digital. Desde sus primeras experiencias con computadoras en los 90 hasta sus vínculos con Sam Altman, Vitalik Buterin o el Papa Francisco, el autor narra, en primera persona, cómo la IA y las tecnologías descentralizadas están reconfigurando el poder global. En este viaje que conecta el aceleracionismo, las DAO, el humor como arma cognitiva y la rebelión de las máquinas, nos encontramos ante una pregunta urgente: ¿cómo gobernar inteligencias superiores sin repetir los errores del pasado? Con un enfoque tecnoptimista, Siriimagina una Argentina 2.0 capaz de liderar esta transformación, que se anime a abrazar el conocimiento, la descentralización y la rebeldía como motores de progreso. Si el conocimiento es poder,Tecnosapiens es una clave de acceso.
La obra nace con el propósito de ofrecer a los alumnos de Derecho, Ciencias Políticas, Sociología y otros campos afines de las Ciencias Sociales un manual completo y sencillo, que aborde, desde una perspectiva multidisciplinar, el estudi...
Tras regresar del exilio, Lenin pronunció el 4 de abril en Petrogrado el discurso que dio el pistoletazo de salida a lo que sería la Revolución de Octubre. El objetivo estaba claro, conseguir todo el poder para los soviets de obreros y campesinos, y Lenin ofreció las herramientas para conquistarlo.
Las famosas Tesis de abril suponen el análisis más lúcido y contundente que se haya hecho sobre los desposeídos rusos. Son, también, un programa de acción para una tarea revolucionaria concreta: el paso de la primera etapa de la revolución, en la que la burguesía detentaba el poder, a la segunda, en la que, una vez desenmascarados los pequeñoburgueses y señalados como traidores a la clase trabajadora, el proletariado y el campesinado tomarían el poder.