El precioso instante de leer un cuento es en sí mismo una ensoñación de la infancia en la que trasladarse a otros mundos sin moverse de este. Dentro de este libro hay historias con las que disfrutar, imaginar, jugar y divertirse, relatos para vivir aventuras, viajar, sorprenderse, relajarse e incluso para reír. Todo ello sin olvidar nunca que los cuentos tambien deben enseñar a los niños a compartir, a respetarse y a llevarse mejor con los demás.
Parece un bosque cualquiera, pero no lo es. Claro que para saberlo hay que prestar atención a lo más pequeño y escondido... ¡Sí, justo ahí! En ese árbol donde bailan las hadas que han invitado a duendes, elfos y gnomos a su fiesta.
Menos mal que el Reino Perdido está perdido, porque si no, seguro que estaría llenos de turistas; es la ventaja de ser un lugar tan apartado al que, según dicen, sólo se puede llegar con la imaginación... Nuestra recomendación es que no te fíes de las habladurías y emprendas este largo viaje dispuesto a dejarte sorprender.