El Hyakunin Isshu es una de las antologías más emblemáticas de la poesía clásica japonesa. Esta recopilación elaborada por el insigne poeta y erudito Fujiwara no Teika reúne cien poemas de cien poetas creados entre los siglos vii y xii, entre los que se encuentran los de autores fundamentales de la literatura japonesa como Murasaki Shikibu, Ariwara no Narihira o Sei Shonagon, así como de emperadores, emperatrices, príncipes y princesas.Los poemas del Hyakunin Isshu se han leído, estudiado y versionado desde su creación hasta la actualidad y son una fuente inestimable para conocer la refinada vida aristocrática o, lo que es lo mismo, poética de la época de máximo esplendor cultural de Japón. Sus versos evocan refinados sentimientos con sutileza y elegancia que tratan temas como el amor, la muerte o la soledad bajo el código estético y sofisticado de la poesía clásica.
Dos enemigos entre los que saltan chispas, un verano y un pacto: prohibido enamorarse
Elena es una chica responsable, nada alocada e incapaz de sacrificar su futuro profesional por una relación.
Elena tiene un archienemigo desde el colegio al que llama "el Indeseable".
Y Elena acaba de despertar junto a él en su cama después de la boda de su mejor amiga...
Marcos lleva toda la vida sacando de quicio a Elena con sus comentarios de sobrado y sus ojos azules como el mar.
Marcos quiere olvidar los malos rollos y dejarse llevar durante el verano por una atracción irresistible antes de volver a Londres.
Y, aunque Elena intenta ignorarle, Marcos es tan obstinado como sexy y la química entre ellos resulta inevitable.
Los que se pelean se desean, pero... ¿hasta qué punto?
Elena es una chica responsable, nada alocada e incapaz de sacrificar su futuro profesional por una relación.
Elena tiene un archienemigo desde el colegio al que llama «el Indeseable».
Y Elena acaba de despertar junto a él en su cama después de la boda de su mejor amiga...
Marcos lleva toda la vida sacando de quicio a Elena con sus comentarios de sobrado y sus ojos azules como el mar.
Marcos quiere olvidar los malos rollos y dejarse llevar durante el verano por una atracción irresistible antes de volver a Londres.
Y, aunque Elena intenta ignorarle, Marcos es tan obstinado como sexy y la química entre ellos resulta inevitable.
Jimena tiene treinta años y estudia en una escuela de cine. Allí conoce al narrador de esta novela. Empiezan a salir, comparten vino, viajes, conversaciones, películas malas de sobremesa y todo lo que leen y escriben.
Se van a vivir juntos, proyectan identidades, hablan del futuro. Pero el futuro llega y el fantasma de la decepción se manifiesta: ¿Es esta la persona con la que quiero compartir mi vida? ¿No existe nadie mejor ahí fuera? ¿Por qué asumimos que una relación fracasa si no dura para siempre?
Ciencia ficción es una historia de amor. En ella no hay futuros alternativos, naves espaciales o viajes en el tiempo. Mediante guiños a diversos géneros (comedia romántica, cine-ensayo, drama, fantasía y ciencia ficción), el narrador ejecuta una autopsia parecida a la que todos hemos practicado alguna vez después de una ruptura: una mezcla de memoria y mito, análisis y pura especulación.
Dieciséis años atrás, Caroline Crale fue condenada por asesinar a su esposo, el pintor Amyas Crale, cuando éste estaba a punto de abandonarla por una mujer más joven. Tras morir en prisión, Caroline dejó una carta a su hija de cinco años, Carla, reafirmando su inocencia. Ahora Carla sabe que necesita la ayuda del mejor detective del mundo para volver al pasado y hallar al verdadero asesino, honrando así la memoria de su madre.
Hércules Poirot someterá a sus peculiares interrogatorios a cinco sospechosos: a Elsa Greer, la última amante del difunto; a Angela, la hermanastra de Caroline; a la señorita Williams, la institutriz; y a los hermanos Blake, uno de ellos agente de bolsa y el otro aficionado a la botánica. Todos cuentan con una coartada sólida, pero uno de ellos miente. ¿Quién será el asesino?