A finales de enero de 1939, apenas dos meses antes del final de la guerra civil, un grupo de prisioneros franquistas es fusilado cerca la frontera francesa por soldados republicanos que huyen hacia el exilio. Entre esos prisioneros se halla Rafael Sánchez Mazas, fundador e ideólogo de la Falange, poeta y futuro ministro de Franco, quien consigue milagrosamente escapar y ocultarse en el bosque mientras los republicanos lo persiguen; hasta que un soldado lo descubre, lo encañona y, mirándolo a los ojos, le perdona la vida.
Sesenta años más tarde, un novelista fracasado descubre por azar este enterrado episodio bélico y, fascinado por él, emprende una investigación para aclarar sus circunstancias y desentrañar su significado. ¿Quién era de verdad Rafael Sánchez Mazas? ¿Cuál fue su verdadera peripecia de guerra? ¿Quién fue el soldado que le dejó escapar? ¿Y por qué lo hizo? ¿Qué secreto escondía su mirada?
Novela revolucionaria y deslumbrante, Soldados de Salamina cosechó un extraordinario éxito de crítica y público y catapultó la carrera de uno de los novelistas más prestigiosos de la actual narrativa española. Desde entonces no ha dejado de leerse en todo el mundo con creciente admiración y catorce años más tarde sigue siendo, como afirmó Mario Vargas Llosa, «una de las grandes novelas de nuestro tiempo».
Carlos Pellicer (Villahermosa, entonces San Juan Bautista, 1897-Ciudad de México, 1977). Poeta, escritor, museógrafo y político mexicano, autor de títulos como Hora de junio, Subordinaciones o Práctica de vuelo. Considerado como una voz imprescindible de las letras mexicanas y, en general, de la lengua española en el siglo XX, este volumen ofrece al lector una sustantiva muestra antológica de toda su obra poética.
Ahora que las circunstancias le instan a reencontrarse con él, la nostalgia del pasado acude sin remedio a su mente. Hace unos años... Susana era una tímida y poco agraciada alumna de Derecho obligada a sacar las mejores notas para no perder la beca que le permitía seguir estudiando. Sola y sin amigos, debido a su carácter, era considerada por todos «la empollona de la clase».
Su vida cambia drásticamente cuando en su segundo año de carrera tiene que realizar un trabajo con Fran, un guapo y rico compañero de estudios por el que siempre se había sentido atraída y quien ni siquiera se había fijado en ella jamás.
¿Qué es de los héroes cuando las guerras terminan? Para Ringil Ojos de Ángel, la posguerra han sido largos años exiliado, ganándose el pan con el relato de sus hazañas mientras su espada, la legendaria Críacuervos, cuelga olvidada sobre la chimenea. Para Egar el Matadragones, el triunfal retorno a las estepas como señor de su clan nómada está marcado por la nostalgia que siente por los tiempos felices pasados como mercenario en el civilizado Imperio. Y en ese mismo Imperio, la mestiza Archeth, dejada atrás por su raza desaparecida, sirve al emperador e intenta en vano mantener en funcionamiento la tecnología abandonada. Algo empieza a moverse, sin embargo, en su mundo rodeado por un anillo. Ringil es reclamado por su noble familia, que lo había repudiado, para que rescate a una pariente de los traficantes de esclavos. Egar es objeto de conspiraciones, inspiradas por los dioses, para apartarle de la jefatura de su clan. Y Archeth debe investigar el ataque a una guarnición costera del Imperio, realizado con armas que en teoría no deberían existir. Los caminos de los tres viejos camaradas de guerra volverán a cruzarse, y entonces sabrán por fin si su tierra puede ser realmente apta para los héroes.
Un ajustador descubre en Innsmouth que el mundo podría estar llegando a su fin... ¡y que el instrumento de destrucción es un hombre lobo!
Lawrence Talbot es un hombre normal y corriente que se conforma con ir tirando, y su transformación mensual en una bestia asesina se ha convertido en algo natural para él. Cuando un hombre extraño lo visita en su despacho y anuncia que es el fin del mundo, Lawrence no le hace caso... pero una extraña sucesión de acontecimientos hará que Lawrence tenga un papel más importante del que a él le hubiera gustado en el apocalipsis inminente.