Esta es la historia azarosa de un proyecto en el que Raúl Zurita ha empeñado la mitad de su vida. En 1983, tras haber cambiado para siempre la poesía chilena con Purgatorio y Anteparaíso, Zurita comenzó a escribir La Vida Nueva, libro con el que cerraría una trilogía poética de proyecciones inauditas. A pesar de trabajar en él durante más de una década, tan solo pudo ver publicada una versión reducida en 1994, tras lo cual los manuscritos se extraviaron. Cuando, por fortuna, Zurita logró recuperarlos gracias a un coleccionista, el proyecto inicial se reveló ante él en toda su magnitud.
Hoy, más de veinticinco años después, se presenta por fin la edición final de La Vida Nueva. Un libro -un universo- donde los vecinos anónimos, los ríos que hablan y padecen y aman, las fotografías de un país desolado, los detenidos desaparecidos, las ciudades, los sueños, el amor, y la «hermana luna», la «hermana noche» y la «hermana muerte» se entrelazan en un canto delirante que le devuelve a la poesía el aliento épico y la grandeza, y que confirma a Zurita como una de las más grandes voces de la poesía contemporánea.
Una parábola sobre el amor, la literatura y el fanatismo.
Osman, un estudiante de Ingeniería de Estambul, se abandona no solo a un misterioso libro sino también a la hermosísima Canan, una compañera de la universidad. Él decide partir en busca de los secretos del libro y de un mundo desconocido junto a ella, que también desea encontrar la pista de su amor desaparecido. Sometidos a un viaje hipnótico a través de Turquía, descubrirán que la suya es, quizá, una empresa peligrosa...
Carolina del Sur, 1964. Lily Owens es una joven de catorce años cuya vida ha girado alrededor de un padre que no la cuida y que la responsabiliza de la misteriosa muerte de su madre. Cuando su niñera Rosaleen, una mujer negra, orgullosa y sin miedo, es encarcelada por defender su recién adquirido derecho al voto frente a los racistas, Lily decide que ambas deben ser libres. Escapan a Tiburón, Carolina del Sur, un pueblo que guarda el secreto del pasado de su madre, y en el que serán alojadas por un excéntrico trío de hermanas apicultoras, que introducirán a Lily en el fascinante mundo de las abejas y la miel.
¡La mejor edad de la vida es estar vivo!
Descubre la filosofía de vida de Mafalda: una manera rebelde, concienciada, inteligente y sobre todo divertida de estar muy vivo.
«Con ustedes, la filósofa con lacito con la que han crecido varias generaciones, […] la Greta Thunberg de la historieta. […] Por su espíritu contestatario, humor cuchillero y costumbrismo con guiños progres, Mafalda jamás pasará de moda. […] Quino se ganó la inmortalidad y los amantes de las viñetas una heroína para todos los públicos. Una que, a la que te descuidas, te suelta en plan filósofa: ¿Qué te gustaría ser si vivieras?». –El Mundo
¿Tiene la vida moderna más de moderna que de vida? ¿Uno va llevando su vida adelante o la vida se lo lleva por delante a uno? ¿Por qué esa vida que uno se gana tiene que desperdiciarse en trabajar para ganarse la vida? ¿Qué te gustaría ser si vivieras? Estas son algunas de las muchas preguntas que se hacen Mafalda y sus inseparables amigos mientras juegan, caminan por las calles de su ciudad, van al colegio o de vacaciones, y se preguntan qué querrán ser de mayores. En definitiva: mientras viven. Nuestra presencia en el mundo nos llena de asombro y suscita interrogantes de todo tipo, a los que esta pequeña filósofa humanista se enfrenta con curiosidad, inteligencia y muchas dosis de humor.
Desde el momento en que supe que no podría hacer gran cosa para salvar al mundo, empecé a pensar en instalarme por un tiempo, solo, en una cabaña. Compré una isba de troncos, lejos de todo, en la orilla del lago Baikal. Allí, durante seis meses, a cinco días de marcha del pueblo más cercano, perdido en una naturaleza desmesurada, traté de ser feliz. Creo haberlo logrado. ¿Y si la libertad consistiera en adueñarse del tiempo? ¿Y si la felicidad fuera disponer de soledad, de espacio y de silencio... cosas de las que carecerán las generaciones futuras?
Tras rememorar su infancia en Corazón que ríe, corazón que llora, Maryse Condé retoma el camino de su vida y nos conduce a través de sus años de aprendizaje: un periplo que comienza en París, con un embarazo accidental y el abandono del hombre al que ama, y que la lleva a vagar por África, en busca de esa identidad que ya empezaba a entrever con el descubrimiento de la negritud, del socialismo y la creatividad literaria. Pero también de los desengaños amorosos, la maternidad no deseada y los estragos emocionales de la orfandad. Honesta e irónica, delicada y brutal, Maryse Condé vuelve a ensanchar los límites de la autobiografía para construir un bello relato universal: el de una mujer desposeída que, a pesar de los embistes del destino, busca incansablemente la plenitud y la felicidad. La mujer antes de la píldora, África tras la independencia, una madre que huye. Una apasionante y conmovedora novela de la autora de «Corazón que ríe, corazón que llora».