Este libro excepcional reúne la novela corta que le otorga su título y otros seis relatos más, de los que todos menos uno pertenecen a la etapa de plena madurez del autor. Fueron los años en los que Macondo le abrió las puertas del realismo mágico: la frase se hace más larga y caudalosa, la realidad se expresa mediante fórmulas mágicas y legendarias, los milagros se insertan en la vida cotidiana. La cándida Eréndira y su abuela desalmada personifican la inocencia y la maldad, el amor y su perversión, y el relato recuerda al mismo tiempo a las gestas medievales y a los cantos provenzales o trovadorescos, aunque, como siempre, inmersos en ese mundo denso y frutal del Caribe americano. Estas siete narraciones no son ejercicios para conservar un estilo, ni muchísimo menos, sino siete exploraciones en el mundo definitivo que el escritor había conquistado de una vez por todas.
«Eréndira estaba bañando a la abuela cuando empezó el viento de su desgracia. La enorme mansión de argamasa lunar, extraviada en la soledad del desierto, se estremeció hasta los estribos con la primera embestida. Pero Eréndira y la abuela estaban hechas a los riesgos de aquella naturaleza desatinada, y apenas si notaron el calibre del viento en el baño adornado de pavorreales repetidos y mosaicos pueriles de termas romanas.»
Hanna Schmidt trabaja como secretaria en una de las sedes del Grupo de Fuerzas Soviéticas en Alemania (GFSA). Aunque es consciente de la responsabilidad y el compromiso que esto conlleva, no comparte los ideales de este lado de Berlín en el que ha quedado atrapada. Desde que se fue su padre cuando apenas era una niña, sueña con ir al otro lado del muro, un lugar donde se puede pensar y pasear libremente, donde se bebe Coca-Cola y se leen libros como 1984. Tal vez por eso lleva un tiempo colaborando como informante para un grupo de jóvenes disidentes que buscan la caída del telón de acero. Mattias Gutt es uno de ellos y no es solo el destinatario de las cartas que se intercambian entre los huecos del enorme muro de hormigón; también es la única persona que está dispuesta a ayudarla a localizar a su padre.
A partir del gesto encantador de una mujer, surge el personaje de Agnes, alrededor de la cual aparecerán su hermana Laura, su marido Paul, y el mundo contemporáneo, que idolatra a la tecnología y a la imagen. Y es que tal vez el hombre no sea sino su imagen, reflexiona Rubens, a quien solo le quedan dos o tres fotografías mentales de la más excitante de sus amantes. En esta novela polifónica, las aventuras de los personajes imaginarios se mezclan con la historia de dos candidatos a la inmortalidad, Goethe y Bettina von Arnim, mientras la reflexión sobre el nacimiento del homo sentimentalis en la historia de Europa se alterna con perlas ipecias parisienses del singular profesor Avenarius, para quien la realidad actual solo es objeto de juego.
La inmortalidad: A partir del gesto encantador de una mujer, surge el personaje de Agnes, alrededor de la cual aparecerán su hermana Laura, su marido, Paul, y el mundo contemporáneo, que idolatra a la tecnología y la imagen. Y es que tal vez el hombre no sea sino su imagen, reflexiona Rubens, a quien sólo le quedan dos o tres fotografías mentales de la más excitante de sus amantes. Pronto, las aventuras de esos personajes imaginarios se mezclan con las de dos candidatos a la inmortalidad, Goethe y Bettina von Arnim, mientras la reflexión sobre el nacimiento del homo sentimentalis se alterna con las peripecias del singular profesor Avenarius.
A las puertas de las vacaciones de verano, la inspectora de homicidios Manuela Mauri no pasa por su mejor momento. Ha vivido en poco tiempo varias experiencias que le han hecho comprender que hay sentimientos y vivencias que no se pueden verbalizar y cosas que es imposible nombrar. Lo percibe cuando sus hijos, Manuel y David, le hablan de la repentina muerte de su padre (su exmarido) y ella no encuentra el modo de consolarlos. Lo intuye cuando ve a los padres de Susana, una joven de dieciséis años que ejercía la prostitución y que murió de una sobredosis, exigiendo justicia para su hija en el juicio de la Operación Lesly y la inspectora está segura de que, sea cual sea la sentencia, nada reparará semejante pérdida. Lo deduce cuando afronta la mirada de Belén, que acaba de perder a su hermana Rebeca a causa de las puñaladas que le ha asestado quien fue su pareja. Lo asimila cuando su propio compañero, Alberto, le hace la proposición más importante de su relación y ella no sabe qué contestar.
Una novela negra combativa y literaria que, por un lado, explora los vínculos de la prostitución con la violencia de género y, por el otro, pone el foco en la parte más personal e íntima de una inspectora que deberá cuidar más y mejor a su pequeña familia si no quiere arriesgarse a perderla.
Aidan Thomas es un hombre modélico, padre de familia, trabajador y muy querido en la pequeña comunidad donde vive. Pero detrás de esa fachada de aparente perfección oculta un oscuro secreto: es un secuestrador y un asesino en serie. Rachel, como insiste en llamarla su raptor, lleva cinco años estudiando a Aidan, sabe que ha matado a las que han venido antes y que pronto hará lo mismo con ella; debe aprovechar la primera oportunidad que se le presente para escapar. Pero cuando Rachel descubra que su vida no es la única que está en juego, deberá decidir entre salvarse a sí misma o ayudar a las dos personas que corren el mismo peligro que ella: Cecilia, la joven hija de su secuestrador, y Emily, la mujer que ha empezado a enamorarse de él.