«Todo mito que nace renace. Todo mito que encarna reencarna».
Obsesionado con la reina de Saba, Bos Mutas, un joven escritor contemporáneo, sale a buscarla por el mundo, igual que hicieron a lo largo de los siglos personajes históricos como Salomón, Tomás de Aquino y Gérard de Nerval. Y aunque la reina de Saba resulta inasible, Bos Mutas encuentra en su lugar a la muy terrenal Zahra Bayda, una partera somalí. De esa manera, el tiempo real del presente corre paralelo al tiempo inmemorial del mito.
Obra de ficción basada en los viajes que la autora hizo con Médicos Sin Fronteras por Yemen, Etiopía y la frontera somalí -la geografía mágica y feroz del que alguna vez fuera el reino de Saba-, esta novela es un hermoso caleidoscopio, una puerta de entrada a mundos apasionantes, una audaz amalgama de géneros, épocas, ritmos profanos y bíblicos, crueldad y solidaridad, amor y guerra, dolor y curación.
Laura Restrepo acompaña, con este emocionante relato, el eterno caminar de las mujeres migrantes, que pese a cojeras y tropiezos siempre se levantan, siguen adelante, aprenden a mirar cada vez más lejos y traspasan las fronteras del tiempo y el espacio. Canción de antiguos amantes esboza una propuesta seductora: ¿y si el gran himno del final de los tiempos no es el Apocalipsis? ¿Y si fuera más bien el Cantar de los Cantares?
Este es uno de los poemas más asombrosos de toda la literatura universal. En él lo primero que llama la atención es su desmesurada longitud, más de un millar de versos; pero cuando vemos que consiste en un debate monologado sobre la fe y la incredulidad, no nos extraña que el lector inglés de mediados del siglo XIX (se publicó en 1855, dentro de los dos volúmenes de Hombres y mujeres) diera la espalda a una idea tan insólita, por no decir extravagante.
Un obispo católico inglés, de sobremesa y entre vasos de clarete, se entrega a un largo soliloquio en presencia de un librepensador que ha escrito sobre él. La Apología, con su utilitarismo pragmático, que quizá Browning no se toma muy en serio, tiene un doble filo; tanto los agnósticos como los creyentes van a sentirse inseguros con este personaje; en resumidas cuentas, no sabemos si es simpático o no, si estamos o no de acuerdo con él, si convence o no convence. Y el final abierto del poema aumenta las dudas en vez de disiparlas.
Además de novelista, Philip K. Dick fue un prolífico autor de cuentos y relatos, muchos de los cuales han sido llevados al cine en los últimos tiempos. Él mismo reunió sus narraciones breves en cinco volúmenes que ahora recuperamos en una edición revisada.
Esta quinta entrega recoge 24 relatos escritos entre los años 1963 y 1980. Se trata de auténticas joyas literarias donde quedan patentes las constantes obsesiones del autor: la muerte, la alienación, la locura, la religión y la represión, y la naturaleza esquiva de la realidad. De lectura ágil y entretenida, este libro nos invita a adentrarnos en el fascinante universo dickiano.
Sobre el diseño de portada:
Para la última entrega, se ha seguido con la línea de los anteriores tomos, esta vez con una forma que recuerda una especie de estación espacial.
Además de novelista, Philip K. Dick fue un prolífico autor de cuentos y relatos, muchos de los cuales han sido llevados al cine en los últimos tiempos. Esta tercera entrega recoge 23 relatos que Philip K. Dick escribió en poco más de un año, antes de la publicación en 1956 de su primera novela, Lotería solar.
Se trata de auténticas joyas literarias que destilan la magia propia de Dick y donde quedan patentes sus constantes obsesiones: la muerte, la alienación, la locura, la religión y la represión, y la naturaleza esquiva de la realidad.
De lectura ágil y entretenida, este libro nos invita tanto a adentrarnos en el fascinante universo dickiano como a observar la evolución del luminoso talento de uno de los escritores más relevantes del siglo XX.
Además de novelista, Philip K. Dick fue un prolífico autor de cuentos, muchos de los cuales han sido llevados al cine en los últimos tiempos. Él mismo reunió su producción breve en cinco volúmenes que recuperamos en una edición revisada.
Esta primera entrega recoge 25 relatos escritos entre 1951 y 1952, auténticas joyas literarias que destilan la magia propia de Dick y donde quedan patentes sus constantes obsesiones: la muerte, la alienación, la locura, la religión y la represión, y la naturaleza esquiva de la realidad.
De lectura ágil y entretenida, este libro nos invita tanto a iniciarnos en el fascinante universo dickiano como a observar la evolución del luminoso talento de uno de los escritores más relevantes del siglo XX.
No se puede huir eternamente...
Caitlyn Sullivan, hija de la realeza de Hollywood, ya era toda una estrella con solo diez años, aunque todavía disfrutaba jugando al escondite con sus primos en la casa familiar de Big Sur. Y fue durante uno de esos juegos cuando la secuestraron.
Sin embargo, Cate logró escapar y buscó refugio en un rancho cercano. Allí la encontró Dillon Cooper, apenas un adolescente, y, tras oír su historia, la ayudó a reunirse con su familia.
Con su milagroso regreso, la traición quedó al descubierto. Alguien en quien Cate confiaba se reveló como el culpable del crimen y, para protegerla, su familia la envió a Irlanda.
Años más tarde, Cate regresa al fin a Los Ángeles para descubrir que en la noche de su secuestro plantó dos semillas: la de un amor increíble y la de una venganza terrible.