Los aliados han liberado Francia, y las tropas alemanas en retirada conducen a un numeroso grupo de colaboracionistas del gobierno de Vichy al castillo de Sigmaringen. Éste es el punto de partida de De un castillo a otro: más de mil personas angustiadas, sin norte ni futuro, se hacinan en un castillo laberíntico. Pero los castillos de Céline son realmente dolorosos, agitados por los espectros de la guerra, el odio y la miseria. Transparente en su autobiografía, casi a caballo entre la novela y la confesión, con aguda ironía y punzante humor, Céline nos describe a los alemanes en pánico, a una Europa que retumba, a los ministros de Vichy sin ministerio y al mariscal a punto de entrar en el Tribunal Supremo. Con su prosa arrolladora y sincopada, en completo desorden pero con vívida clarividencia, Céline nos narra como nadie el caos la derrota, los excesos y las miserias de la condición humana. Así, este De un castillo a otro, primer volumen de lo que el propio autor concibió como una historia magna, la Trilogía del Norte, es uno de sus libros más demoledores, y bien habría podido titularla el final de la noche, porque es una novela que nos interpela, nos sacude, nos golpea. Una literatura radical que se escribe con las vísceras.
Una joven muerta en los acantilados de Sancti Petri… Un matrimonio herido por la desconfianza… Y el hallazgo de una pieza arqueológica de extraordinario valor que despierta la avaricia de todos.
A pesar de comenzar de cero en una nueva casa en Chiclana, Luz no logra dejar atrás sus sospechas. Rodrigo lleva un tiempo comportándose de un modo extraño. Ella conoce esa mirada esquiva, por eso teme que le esté siendo infiel otra vez. Desesperada, decide contratar a una joven detective privada que se convertirá en su sombra. Todo se complica cuando el cuerpo de la chica aparece sin vida en los acantilados de Sancti Petri. Y solo Alfredo, el camarero que la vio por última vez, parece interesado en encontrar respuestas. En esa búsqueda de la verdad, el hallazgo de una estatuilla fenicia detonará las vidas de aquellos que jueguen con su poder y se crean con el derecho de atesorarla.
Después de la publicación de Perro que no ladra, la escritora Blanca Cabañas regresa con un thriller envolvente que atrapa al lector en una espiral voraz que nos lleva a adentrarnos en un mundo de intereses y a disfrutar de los episodios desconocidos de la historia fenicia de Cádiz. Deseos oscuros, avaricia, mitología, investigación y secretos en una novela que hará las delicias de los lectores del género.
No es para que nos contesten a una pregunta por lo que nos hemos puesto en camino, sino para que, en el silencio del lugar de los antiguos oráculos, cada uno descubra cuál es su pregunta".
Coneste designio, siete singulares peregrinos emprenden un iniciático "viaje al país sonoro", una búsqueda espiritual que, bajo distintas formas en diferentes culturas, ha constituido siempre el símbolo supremo de la vida humana.
En El juego de las preguntas, Handke propone que nos abramos al mundo por medio de una pregunta esencial, donde se incluyan todas las respuestas. Es el modo de indagación personal que caracteriza toda su obra: averiguar cómo se relaciona el hombre, a partir de sí mismo, con todo su entorno. Cada mirada congela el mundo, lo fragmenta, lo analiza, lo devuelve en palabras (trocadas en eficaces herramientas). Una escritura cuya originalidad llega a las raíces del idioma.
Grace lo ha perdido todo y no se detendrá ante nada para vengarse.
Cuando Grace Bernard descubre que el padre millonario que la abandonó ha ignorado las llamadas de auxilio de su madre moribunda, jura venganza y se propone matar a todos los miembros de su acaudalada familia. Así que hace una lista de nombres y, decidida a tacharlos todos, se lanza en una misión despiadada para hacer justicia y, en el proceso, convertirse en la única heredera de la fortuna de los Artemis. Su plan es perfecto y confía en salirse con la suya sin mayores problemas, pero siempre hay variables que una no puede controlar... sobre todo cuando hablamos de matar.
En enero de 1989, una niña de siete años fue raptada al norte de Tokio. Los padres nunca llegaron a saber la identidad del secuestrador. Tampoco volvieron a ver a su hija. Nombre en clave del caso: Seis Cuatro.
Más de una década después, el jefe de prensa de la policía se ve obligado a volver sobre el suceso, cuyo estigma no se ha diluido en el tiempo: el fracaso de la investigación sigue siendo motivo de escándalo. Pero el veterano Mikami no aspira ya a resolver el crimen, solo pretende tender una mano a la familia de la víctima y contribuir de algún modo a limpiar la reputación del cuerpo. Sin embargo, tras detectar una irregularidad en el expediente, Mikami acabará desvelando el móvil de un delito que encierra secretos inimaginables.
Imbuida de un claro componente autobiográfico, Suite francesa se inicia en París los días previos a la invasión alemana, en un clima de incertidumbre e incredulidad. Enseguida, tras las primeras bombas, miles de familias se lanzan a las carreteras en coche, en bicicleta o a pie. Némirovsky dibuja con precisión las escenas, unas conmovedoras y otras grotescas, que se suceden en el camino: ricos burgueses angustiados, amantes abandonadas, ancianos olvidados en el viaje, los bombardeos sobre la población indefensa, las artimañas para conseguir agua, comida y gasolina. A medida que los alemanes van tomando posesión del país, se vislumbra un desmoronamiento del orden social imperante y el nacimiento de una nueva época.
La presencia de los invasores despertará odios, pero también historias de amor clandestinas y públicas muestras de colaboracionismo. Concebidacomo una composición en cinco partes -de las cuales la autora sólo alcanzó a escribir dos- Suite francesa combina un retrato intimista de la burguesía ilustrada con una visión implacable de la sociedad francesa durante la ocupación. Con lucidez, pero también con un desasosiego notablemente exento de sentimentalismo, Némirovsky muestra el fiel reflejo de una sociedad que ha perdido su rumbo. El tono realista y distante de Némirovsky le permite componer una radiografía fiel del país que la ha abandonado a su suerte y la ha arrojado en manos de sus verdugos. Estamos pues ante un testimonio profundo y conmovedor de la condición humana, escrito sin la facilidad de la distancia ni la perspectiva del tiempo, por alguien que no llegó a conocer siquiera el final del cataclismo que le tocó vivir.