La primera obra de no ficción de Grisham es un escalofriante thriller legal, basado en hechos reales. Narra la historia de un hombre que creyó haberlo perdido todo... Incluso antes de conocer el infierno.
En este libro ambientado en Los Ángeles se nota la continua presencia de la gran urbe en toda la escritura de Charles Bukowski, ciudad infernal, a pesar de estar situada en medio del paraíso californiano, sueño de todo pobre ciudadano USA, con sus naranjas, su sol y su vino, vino del que Bukowski da buena cuenta toda su vida, como el whisky, como la cerveza, que habrán de ser, inevitablemente, su fuente de inspiración.
Bukowski toma una actitud de ermitaño loco, de lucidez exasperada, de humorista borracho en la barra de un bar solitario. Se ríe de todo, trata de ganar algo de dinero para un trago o una puta sin trabajar mucho, frecuenta otras ratas urbanas enloquecidas, odia a la humanidad, se encierra en su habitación y se entretiene en contarnos las historias que le ocurren o se le ocurren.
Mario Vargas Llosa se adentra en la novela Los Miserables desde la perspectiva del lector agudo, del entusiasta, del creador que sabe cómo se construye una gran obra. Encontramos así los secretos mecanismos que movieron la pluma de Víctor Hugo para crear la gran novela romántica francesa. ¿Quién fue Víctor Hugo? La tentación de lo imposible no es un libro que trata sobre otro libro. Mario Vargas Llosa no se deja nublar por las palabras y desvela las claves con las que el narrador francés dejó constancia de su creación. Nos descubre esas huellas que hablan de un Víctor Hugo escritor, político y ante todo humano; un personaje más de la novela que sabe disfrazarse de narrador o de protagonista y que también sabe cómo desaparecer sin dejar rastro.
«Escribí estos relatos especialmente para ti. Adelante, léelos, pero ten mucho cuidado. Los mejores tienen diente.» Stephen King nos presenta en El bazar de los malos sueños una excepcional selección de relatos, algunos nuevos y otros revisados en profundidad. Cada uno viene precedido de su propia introducción, donde se habla sobre sus orígenes y los motivos que llevaron al autor a escribirlo, incluyendo aspectos autobiográficos. Aunque han pasado ya treinta y cinco años desde que escribió su primera colección, Stephen King sigue deslumbrándonos con su maestría en el género.
En El engaño, Philip Roth disecciona, mediante retazos de conversaciones de dos amantes, las pasiones que exponen al adulterio.«Con el amante la vida cotidiana retrocede», escribe Philip Roth, y exhibiendo su habilidad como genial observador de la pasión humana, presenta en Engaño el mundo claustrofóbico de las relaciones adúlteras con una franqueza sin parangón en la ficción norteamericana.En el centro de Engaño se encuentran dos adúlteros en su escondite. Él es un escritor americano de mediana edad, llamado Philip y que vive en Londres. Ella es una elocuente, inteligente y bien educada mujer inglesa atrapada en un matrimonio humillante al que, con sólo treinta y tantos años, ya casi se ha resignado.El ritmo de la novela está sostenido en conversaciones, principalmente las que mantiene la pareja antes y después de hacer el amor.Este diálogo -ácido, rico, lúdico, inquisitivo- es prácticamente todo lo que hay en este libro, y todo lo que es necesario que haya.
La autobiografía intelectual del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa.
«La doctrina liberal ha representado desde sus orígenes las formas más avanzadas de la cultura democrática y lo que más nos ha ido defendiendo de la inextinguible "llamada de la tribu". Este libro quisiera contribuir con un granito de arena a esa indispensable tarea.»
La diferencia entreLa llamada de la tribu y otros libros comoEl pez en el agua es que aquí el protagonismo no lo tienen las vivencias del autor, sino las lecturas que moldearon su forma de pensar y de ver el mundo en los últimos cincuenta años. En Nobel peruano ha hecho una cartografía de los pensadores liberales que le ayudaron a desarrollar un nuevo cuerpo de ideas después del gran trauma ideológico que supuso, por un lado, el desencanto con la Revolución Cubana y, por otro, el distanciamiento de las ideas de Jean-Paul Sartre, el autor que más lo había inspirado en su juventud.