«Exquisita y poderosa hasta lo letal, como un caramelo venenoso.» Mariana Enriquez Shirley Jackson, autora de obras maestras como La maldición de Hill House y Siempre hemos vivido en el castillo, firmó también numerosos relatos; no solo «La lotería» (1948), cuya célebre aparición en The New Yorker causó tanto revuelo y que, durante décadas, fue la única obra verdaderamente conocida de una autora por lo demás relegada, durante largo tiempo, a los rincones del «género» (llámese horror gótico o terror).
Una plaga ha acabado con la humanidad. El único superviviente que no se ha convertido en vampiro es Neville, que de día caza muertos vivientes dispersos entre las ruinas de la civilización y de noche debe atrincherarse ante el asedio de una legión sedienta de sangre humana. Escrita en 1954, Soy leyenda se ha consagrado como una obra maestra por su impacto en la cultura popular y su influencia en la literatura de terror y ciencia ficción. A través de una técnica tan inquietante como la trama, las ilustraciones de Jorge González no solo captan sino que amplifican este clásico sobre la soledad, el aislamiento y el instinto tan humano de supervivencia que persiste en circunstancias inesperadas ―o repentinamente previsibles en el momento de publicarse esta edición― como un nuevo orden postapocalíptico.
Tras el éxito de Lo que hay, vuelve con una novela sobre la distancia, el deseo y la fantasía la autora «llamada a revolucionarlo todo» (Elle), revelación del año 2022 según los libreros independientes y uno de los mejores debuts del mismo año según El Cultural.
«Todo lo que toca, lo que escribe, lo que observa, se convierte en belleza».
Inés Martín Rodrigo, abril
Una joven fotógrafa se pone en contacto con una escritora veinte años mayor para tomarle unos retratos mientras trabaja en su próxima novela, titulada La seducción. Tras intercambiar varios correos, la escritora la invita a pasar unos días en su casa, una pequeña masía en la costa catalana. Al llegar, nada es como esperaba, la anfitriona se muestra distante y no se deja fotografiar. Ante el rechazo, la fotógrafa tomará esas instantáneas en su mente, alimentando a la vez su ansiedad y su deseo. Esa convivencia extraña en una casa en la que todo parece dispuesto para elplacer se tensará con la aparición de Greta, una amiga de la escritora con quien parece compartir una intimidad de límites difusos.
A veces, quien más te quiere es quién más daño te hace.
Lily no siempre lo ha tenido fácil. Por eso, su idílica relación con un magnífico neurocirujano llamado Ryle Kincaid, parece demasiado buena para ser verdad. Cuando Atlas, su primer amor, reaparece repentinamente y Ryle comienza a mostrar su verdadera cara, todo lo que Lily ha construido con él se ve amenazado.
En una noche de agosto en Noruega, un resplandor enciende el cielo de golpe: es una enorme estrella nueva que se eleva vertiginosa, sin que nadie pueda explicarla. Magnetizados, inquietos, la observan unos personajes en medio de sus propias encrucijadas. Está Arne, profesor de literatura, que trata de lidiar con las dificultades del matrimonio con su mujer Tove, que sufre trastorno bipolar. Y está también Kathrine, pastor de la Iglesia que se sorprende cuando, al volver de un seminario, decide pasar la noche en un hotel en lugar de en su propia casa.
Cuando Eufrasia Vela empieza a trabajar como cuidadora de ancianos, no sospecha que su oficio la llevará a una encrucijada existencial. La íntima relación que mantiene con doña Carmen, el doctor Harrison y Los Siete Magníficos —entrañables personajes que se apoderan de su pensamiento y su cariño— la obliga a replantearse su papel de madre y hermana, las vicisitudes de la longevidad, las formas de la compasión y el sorpresivo valor que los cuyes, esos conejillos de Indias tan peculiares, adquieren en su presupuesto moral. Acompañada de una banda sonora donde resuenan el huayno, el jazz, la balada y el pop, la historia de Cien cuyes rescata a la vez la impronta del cine como un contrapunto de la existencia de sus personajes y una fuente de revelaciones sobre el sentido de la vida y de la muerte cuando esta se aproxima.
«Cien cuyes es una novela tragicómica, situada en la Lima de hoy, que refleja uno de los grandes conflictos de nuestro tiempo: somos sociedades cada vez más longevas y cada vez más hostiles con la gente mayor. Paradoja que Gustavo Rodríguez aborda con destreza y humor. Un libro conmovedor cuyos protagonistas cuidan, son cuidados y defienden la dignidad hasta sus últimas consecuencias».