Un triple asesinato en un hotel elegante de París. Una caja fuerte desvalijada. Todas las sospechas recaen en Arsène Lupin, aunque se lo cree muerto por un disparo de Herlock Sholmès.
Al lado del cadáver del millonario Kesselbach aparece una tarjeta de visita de Arsène Lupin. Opuesto a las teorías del fiscal general y el ministro del interior, el jefe de policía Lenormand defiende la inocencia del ladrón en el caso y dirige las pesquisas hacia una banda misteriosa: el asesino del estilete y su cómplice, el mayor Parbury, alias Ribeira, alias el barón Attenheim.
Como cajas chinas, las dobles identidades se suceden, así como las pistas contradictorias y desconcertantes. Mientras persigue la verdad para salvarse de una acusación de triple asesinato, Lupin concibe un plan megalomaníaco que tiene como centro quién se hará con el dominio de Europa.
Pero detrás de la confusión hay un cerebro tan poderoso como el de Lupin. Desde las sombras, actúa su archienemigo invisible, el temible LM. Sus golpes son tan inesperados y sorpresivos que ni el mismo Lupin podrá preverlos.
La novela de culto de los hackers.
En 1942, Lawrence Pritchard Waterhouse, genio matemático estadounidense, colaboró con otros especialistas en descifrar los códigos secretos de las potencias del Eje. Sesenta años más tarde, su nieto Randy, un brillante criptohacker, proyecta crear un paraíso de datos y el mayor exponente de la libertad informática: La Cripta.
Si las matemáticas de los primeros criptoanalistas se vieron sometidos a las necesidades de la Segunda Guerra Mundial, la Cripta está condicionada por las leyes y normas de las altas finanzas internacionales y la infotecnología.
Esta obra, con su ironía y amenidad, es a la criptología y la narrativa ciberpunk lo que El señor de los Anillos es a la magia y a la fantasía. Criptonomicón es un ciberthriller y el nuevo libro de culto de los hackers.
En la Nochevieja de 1937, Katey Kontent, mecanógrafa en un bufete de abogados de Wall Street, y Eve Ross, su compañera de pensión, salen dispuestas a exprimir a fondo la libertad que promete Nueva York. Se dirigen a The Hotspot, un bar de tercera fila donde se toman el jazz lo bastante en serio como para que nadie moleste a dos chicas de buen ver, y donde la ginebra es suficientemente barata como para beber un dry martini cada hora. Cuando los tres dólares que llevaban se agotan, aparece en escena Theodore Tinker Gray, un joven cachorro de la aristocracia de Nueva Inglaterra, luciendo una sonrisa arrebatadora y un abrigo que Katey y Eve no podrían pagar con sus sueldos de un año. Juntos acabarán celebrando la llegada del año nuevo en Times Square, en una noche que marcará el principio de una amistad que transformará sus vidas. Este encuentro fortuito supondrá para Katey el acceso a círculos selectos de la sociedad neoyorquina, en los que, gracias a su agudeza, sus nervios de acero y su intelecto, logrará que se le abran muchas puertas. No obstante, inmersa en un universo resplandeciente, un mundo frívolo y disoluto habitado por personajes de dudosa procedencia, Katey tendrá que descubrir las reglas del juego para adaptarse a los desafíos de la gran ciudad.
Una novela elegante y delicada como un haiku, evocadora y sensorial como un largo viaje.
Por la autora de La elegancia del erizo.
Rosa viaja por primera vez a Japón para conocer el testamento de un padre al que nunca conoció. Solitaria y distante, con el paso de los años se ha cerrado a la vida. Día a día, guiada por el que fuera asistente de su padre, se adentra en la belleza de los jardines y templos de Kioto, y en esa búsqueda de su identidad conseguirá, al fin, reconciliarse con el pasado y abrirse de nuevo a la alegría del amor.
Una rosa sola es el inolvidable retrato de una mujer que oscila entre la oscuridad y la luz, entre el miedo y la valentía, y del viaje interior con el que reinventa su destino. Una travesía en la que se expone al dolor, a lo desconocido, al amor y a la metamorfosis hasta alcanzar la certeza de que es el acto de dar, y de darnos, lo que hace que nos sintamos más vivos.
La historia de Frida como nunca te la habían contado.
Una declaración de amor al arte, a la feminidad, a la libertad y al valor de luchar por ella.
México, 1925. El gran deseo de Frida es ser médico, pero un terrible accidente le impide vivir su sueño El azar la une a Diego, una de las grandes figuras en el mundo de la pintura. Frida y Diego se enamoran al instante y él la convence para que se convierta en artista.
Frida sigue sus propias ideas, intuiciones y sueños, y consigue triunfar con un estilo único, con una fuerza nunca vista. Pero el dolor del amor fallido es insoportable y ella, que superó las limitaciones de su propio cuerpo, se tambalea ante las infidelidades de Diego. Hasta que llega el día en el que tiene que tomar la decisión más importante de su vida. Y al hacerlo comienza a forjar su leyenda y a alzar la voz en nombre de las mujeres que permanecen a la sombra de cualquier varón.
Elena Poniatowska cuenta la intensa vida de Lupe Marín, musa legendaria y testigo excepcional del mundo artístico en el México del siglo xx.
Elena Poniatowska vuelve a convertir en novela una sólida investigación, un relato contado por sus actores a lo largo de décadas, junto a documentación fundamental para iluminar y reconstruir una existencia llena de pasión y de furia. Diva y musa por derecho propio, esposa legendaria, cocinera magnífica, madre tormentosa y viuda trágica, Lupe Marín (1895-1983) fue testigo excepcional y parte indispensable de algunas de las vidas extraordinarias que dieron forma al arte mexicano del siglo xx.
Casada con Diego Rivera y con el poeta y crítico Jorge Cuesta, el más distinguido de los escritores del grupo Contemporáneos, Lupe Marín vio refulgir su obra y la de otros creadores como Frida Kahlo, Rafael Coronel, Xavier Villaurrutia y Juan Soriano, además de ejercer una influencia poderosa sobre sus hijos y nietos, herederos de un legado tan brillante como imperioso. Un gran mural de una época en la que el mundo se reinventaba y México era uno de los territorios donde parecía que podía construirse la utopía o donde al menos podía obtenerse la inspiración para alcanzarla.