El gigante estornudó... ¡Y su casita saltó en mil pedazos! Una pequeña y obstinada araña se ofrece a ayudarle, pero el gigante la rechaza con desprecio y sale a buscar un nuevo hogar donde vivir. ¿Y qué hace la araña? No es de las que se dan por vencidas, tiene sus propias ideas para ayudar al gigante e incluso para conquistar su corazón…
¡Es hora de volver al cole y los líos están asegurados!
Leo y Lía regresan a clase ¡y lo hacen con muchas ganas! El monstruito Megabú, en cambio, no está tan contento. ¿Por qué será? ¿Porque ya se ha comido todos los bollitos de fresa? ¿Porque le han despertado de la siesta?
¡Pues no! Resulta que Megabú también quiere ir a clase. Así que, si no le dejan acompañarlos, irá él por su cuenta.
Pero ¿qué puede hacer un monstruo en el cole? Pues aprender mucho ¡y provocar algún que otro embrollo!
Un cuento de hadas nunca había sido tan sexy. ¡Déjate seducir por la saga del momento!
¡Quinta entrega de la serie "Una corte de rosas y espinas"! Ahora Nesta y Cassian son los protagonistas.
Desde que fue forzada a meterse en el Caldero y se convirtió en alta fae en contra de su voluntad, Nesta Archeron lucha por encontrar su propio lugar dentro del extraño y letal mundo en el que habita. A su temperamento irascible se suma la dificultad para superar los horrores de la guerra con Hybern y todo lo que perdió en ella.
Mientras que Cassian, miembro de la Corte Noche de Rhysand y Feyre, es designado para entrenar a la incontrolable Nesta y entre ellos se enciende el más ardiente de los fuegos, las traidoras reinas humanas forjan una nueva y peligrosa alianza que amenaza la frágil paz establecida entre los reinos. Y la clave para detenerlas podría depender de que Cassian y Nesta logren superar sus inquietantes pasados.
En un mundo arrasado por la guerra, Nesta y Cassian deberán enfrentarse tanto a sus monstruos interiores como a los que acechan en el exterior, y buscarán la aceptación –y la curación– en brazos del otro.
Isabel nos pidió ayuda... mientras ensayaba con sus mejores amigas para un concurso de danza, ellas empezaron a evitarla y la excluyeron de la competición. ¡Un caso perfecto para nosotras!
Una joven lectora muy exigente no aceptará clichés en esta historia. No hay princesas en peligro, dragones y brujas malvadas. Ni violencia ni alcohol: no son buenos para los pequeños lectores. Pero los cuentos clásicos y de hadas están llenos de clichés y detalles políticamente incorrectos... y si quieres eliminarlos, puedes obtener resultados bastante extraños. Una historia que lo da vuelta todo para dejarnos con una gran sonrisa en la boca.
La pequeña jirafa ha nacido sin manchas y le preocupa mucho que los otros animalitos se rían de ella en la escuela. Sin embargo, en su clase también hay una cebra sin rayas, una serpiente corta, un león sin melena, un búfalo muy bajito o una suricata miope, ¡y no pasa nada porque pueden jugar todos juntos!
La jirafita está triste, se siente diferente a los demás porque... ¡no tiene manchas! Claro que en su clase también hay una cebra sin reyas, un león sin melena y un hipopótamo que no sabe nadar y eso le va a ayudar a no preocuparse tanto.
¡Hola!
Me llamo Julia Mortimort.
Todas las familias son diferentes, pero mi familia es demasiado especial.
¡Son vampiros, zombis, niños lobo y fantasmas!
Hasta hace poco yo pensaba que era la única humana normal de la familia, pero hoy, en el cole, ha pasado algo que lo ha cambiado todo: he hecho volar una caca telepáticamente y la he estampado contra la cara de mi archienemiga.
Sí, tener poderes suena genial, pero hay un GRAN problema:
¡AHORA LAS BRUJAS ME BUSCAN PARA QUEDARSE CON MI MAGIA!
Los dueños de una conejita se ausentan por un día y la dejan en el balcón. Ella entra sigilosamente en la casa y… ¡Empieza la aventura! Se sienta a comer, ve una película de dibujos animados, se maquilla frente al espejo, se disfraza con un bonito traje,… hasta que se queda dormida. Por la mañana, regresa al balcón, ¡pero deja pistas de su travesura! Una historia moderna que evoca al famoso cuento clásico Ricitos de Oro. El artista coreano Ho Baek Lee tiene un estilo delicado, etéreo, despojado de artificios. Crea un personaje entrañable, tan tierno que dan ganas de sacarlo del libro y achucharlo. Los niños se divertirán mucho con este libro y se sentirán identificados con el personaje transgresor. Además, los que sufren al separarse de sus mascotas por un rato, temiendo que lo pasen mal, ya pueden imaginar que, a veces, los muy pillos, convierten la casa en un parque de atracciones.