¿Puede todo un tiranosaurio ser vegetariano, bueno y sensible? ¡Que dirían en el Cretácico si se enterasen! Bueno, nadie es perfecto, pero a Rogelio le importan mucho las apariencias, así que lo disimula muy bien... ¡hasta que ocurre un imprevisto! Menos mal que siempre hay un grupito de insectos dispuestos a ayudar. Y, bueno, tampoco son perfectos, tan pequeños y ceceando... ¡hasta que dan con la solución!
¿Te gustan los cuentos? ¡Siempre pasan muchas cosas en ellos! ¿Pero qué ocurre en un cuento si no hay autor? Eso se preguntan estos cuatro personajes: el lobo, el conejo, la tortuga y el búho.
¡Arre, unicornio! es la historia de una hija que será madre y de un padre que será abuelo. Este cuento nos habla de cómo ciertos momentos se pueden convertir en nuestros tesoros más preciados.
Un relato muy adecuado para mostrar a los niños el problema de la demencia senil o del Alzheimer. es una bonita historia sobre los lazos entre abuelos y nietos y los recuerdos.
Tobías se considera un buen detective, por lo que toma notas de todo cuanto le explican sus entrevistados. Ser un niño no le impide hacer un trabajo serio sobre el pasado de su personaje: Elvira.
Un cuento sobre las discapacidades y las capacidades de los niños y niñas, que nos enseña que las apariencias engañan.
Ada es especial. Sus padres le han contado una y otra vez que es un hada a la que se le rompió un ala al nacer y que por eso le falta un brazo. De pequeña se lo creía y ahora que ya va a cumplir once años, aunque no lo cree, le parece tan bonito que deja que lo sigan contando y les hace preguntas para que inventen más detalles de su nacimiento. Pero este cumpleaños es especial. Lo va a celebrar en un campamento al que irá con el colegio y es posible que descubra toda la verdad sobre las hadas.