Con resonantes logros en su haber, el exitoso cosechero se ufanaba de sus conocimientos en el Agro, y el dinero que había producido, con cultivos de ciclo corto, como tomates y ajíes. Según el, nadie se le acercaba, cuando de sapiencia en el área mencionada se trataba. Dado que sus conocimientos y experiencia, no los tenia ningún productor de la industria. Ni graduado, ni con conocimientos empíricos. Era infinitamente vano, aunque también muy agudo y trabajador. Pero si bien tenia estas dos ultimas virtudes, entre otras, parecía olvidar que era imperfecto como todo humano. Y como tal, proclive a equivocarse y a fallar.
Conocemos a un osito al que le da mucho miedo la oscuridad, una ardillita a la que le asustan los fantasmas y un ratoncillo que teme a las arañas... ¿A ti tambien te pasa? ¿Te dan miedo las tormentas, meter la cabeza en el agua o ir a ver al doctor? Tranquilo, en las páginas de este librito están las mejores ideas para olvidarse del miedo y... ¡Disfrutar de la vida!
Hay elefantitos que se sienten muy felices cuando están rodeados de amigos, gatitos que se ponen muy contentos cuando dan volteretas, cerditos que disfrutan muchísimo saltando en los charcos bajo la lluvia y ositos que sienten mucha alegría columpiándose. Y es que la felicidad puede estar en cualquier sitio... ¡También en las páginas de este librito!
Hay amores tan grandes como una familia entera de hipopótamos, los hay tan dulces como un besito de mamá elefanta o una caricia de papá koala; el amor se puede compartir, es calentito como un abrazo de los abuelos, alegre como la risa de los amigos y sabio, como la maestra de la escuela. Todo el amor del mundo cabe en tu pequeño corazón y en las páginas de este librito.
Tener la pretensión de ser astronauta, la ilusión de recorrer los siete mares o la fantasía de conocer a un dinosaurio suena irreal, pero es una manera de fomentar la imaginación de los niños y de desarrollar sus capacidades para establecer metas y propósitos por los que luchar en la vida. El mundo puede ser un lugar mágico en el que cumplir sueños tan bonitos como saltar en los charcos o tener miles de amigos, por tanto... ¡Que nada ni nadie impida a los niños soñar a lo grande!
En un mundo más conectado que nunca, el sentimiento de soledad es sin embargo cada vez más común. Muchos niños se sienten solos entre la multitud, se ven rechazados o excluidos por el grupo, quizá simplemente tienen miedo de quedarse solos cuando se van papá o mamá o no tienen amigos cerca. Con este librito pueden explorar ese sentimiento para educarse en un apego emocional seguro y llegar a la conclusión de que, en realidad... ¡No están solos!