Ver como
Ordenar por
Mostrar por página
Imagen de DUNE (DUNE 1) (FG) (TD) (LI)
1,350 1,148

DUNE (DUNE 1) (FG) (TD) (LI)

Arrakis: un planeta desértico donde el agua es el bien más preciado y, donde llorar a los muertos es el símbolo de máxima prodigalidad. Paul Atreides: un adolescente marcado por un destino singular, dotado de extraños poderes y, abocado a convertirse en dictador, mesías y mártir. Los Harkonnen: personificación de las intrigas que rodean el Imperio Galáctico, buscan obtener el control sobre Arrakis para disponer de la melange, preciosa especia y uno de los bienes más codiciados del universo. Los Fremen: seres libres que han convertido el inhóspito paraje de Dune en su hogar, y que se sienten orgullosos de su pasado y temerosos de su futuro.
1,350 1,148
Imagen de DUNE. LA CASA CORRINO (PRE 3) (BOL)
750 638

DUNE. LA CASA CORRINO (PRE 3) (BOL)

Esta obra es la brillante conclusión a la trilogía iniciada con Dune, la Casa Atreides y seguida en Dune, la Casa Harkonnen, y un valioso complemento al emocionante universo del inmortal Dune de Frank Herbert.
750 638
Imagen de EFECTOS PERSONALES / DE ESO SE TRATA
1,850 1,573

EFECTOS PERSONALES / DE ESO SE TRATA

Un viaje dialogado con amenidad y agudeza, muestra de la extraordinaria virtud del autor para razonar, transmitir y contagiar sus pasiones. Juan Villoro es reconocido como uno de los grandes escritores latinoamericanos actuales. Periodista, novelista, cuentista, ensayista y cronista, reunió por primera vez sus ensayos literarios en Efectos personales (Premio Mazatlán 2001), al que siguió De eso se trata (2004), títulos que hoy reunimos en este volumen. Como también lo hiciera en la posterior La utilidad del deseo (2017), Villoro convierte aquí sus lecturas en relatos de la inteligencia. Ambas obras muestran a un narrador sumido en la aventura de leer; las anécdotas se suceden como en una novela y los comentarios surgen con el ingenio de una feliz tertulia. Por estas páginas transitan una excepcional galería de personajes: Goethe atrapado en la geometría del amor; Cervantes, fundador de la road novel; Rousseau, que une su destino a la arriesgada noción de autor; Lowry en el intoxicado paraíso de Cuernavaca. También encontramos un testimonio de afinidades electivas: una reconstrucción de la convulsa estancia de Burroughs en México; la indagación del exilio póstumo de Bernhard; el jardín ilustrado de Monterroso; la vertiente más heterodoxa de Fuentes; el viaje sin aduanas de Pitol; la inteligencia distraída de Rossi. Junto a estos –y otros– tributos y retratos, hay espacio para el Villoro cronista y para el que explora los ritos de pasaje de la traducción literaria y el diálogo entre las literaturas de América y Europa.
1,850 1,573
Imagen de EL ALEPH (BORGES) (BOL)
750 638

EL ALEPH (BORGES) (BOL)

La mayoría de los cuentos reunidos en este libro pertenecen al género fantástico. Algunos surgie­ron a partir de crónicas policiales, de pinturas o simplemente de la visión de algún conventillo; otro explora el efecto que la inmortalidad causaría en los hombres; hay una glosa al Martín Fierro, sueños sobre la identidad personal y fantasías del tiempo. El cuento «El Aleph», publicado por primera vez en 1945, aborda uno de los temas recurrentes en la li­teratura de Borges: el infinito. Porque en esa esfera resplandeciente confluyen de un modo asombroso todos los tiempos y todos los espacios.
750 638
Imagen de EL AMOR EN LOS TIEMPOS DEL COLERA (BOL)
850 723

EL AMOR EN LOS TIEMPOS DEL COLERA (BOL)

«La voz garciamarquiana alcanza aquí un nivel en el que resul­ta a la vez clásica y coloquial, opalescente y pura, capaz de alabar y maldecir, de reír y llorar, de fabular y cantar, de despegar y volar cuando es necesario.» Thomas Pynchcn, The New York Times La historia de amor entre Fermina Daza y Floren­tino Ariza, en el escenario de un pueblecito por­tuario del Caribe y a lo largo de más de sesenta años, podría parecer un melodrama de amantes contrariados que al final vencen por la gracia del tiempo y la fuerza de sus propios sentimientos, ya que García Márquez se complace en utilizar los más clásicos recursos de los folletines tradiciona­les. Pero este tiempo -por una vez sucesivo, y no circular-, este escenario y estos personajes son como una mezcla tropical de plantas y arcillas que la mano del maestro modela y fantasea a su placer, para al final ir a desembocar en los territorios del mito y la leyenda. Los zumos, olores y sabores del trópico alimentan una prosa alucinatoria que en esta ocasión llega al puerto oscilante del final feliz.
850 723