A pesar de mi zambullida en la literatura dominicana de los diez últimos años, tengo que admitir que pocas novelas llegaron a sacudirme de una manera tan integral y profunda como una de las primeras obras dominicanas que leí y que junto con muchos escritores y críticos sigo considerando una novela cumbre. Me refiero a Sólo cenizas hallarás (bolero) de Pedro Vergés. Lo interesante es que las tendencias que acabo de pergeñar y muchas más pistas (a veces todavía poco transitadas) ya se hallan (a veces en germen) en esta obra. Pedro Vergés (1945) trata el desengaño, el vacío y la desorientación después del trujillato, indaga en la oposición campo-ciudad,incluye la diáspora en constante diálogo con lo dominicano, evoca a los subalternos mediante el tíguere, el teniente Sotero, y la empleada Lucila en su constante mimicry, integra el problema del patriarcado y exalta la fuerza de la mujer, hace uso de la ironía y del humor que hacen más llevaderas y nada dogmáticas ciertas ideas, comenta el desarraigo profundo, introduce el lenguaje dominicano y la cultura popular de una manera a veces muy sutil.
Rita de Maeseneer (2003)
Libro singular en la trayectoria del autor-deslumbra al lector más exigente por esa misteriosa conjunción de elementos que raras veces coinciden en una sola obra, y cuya esencia hace honor a aquellas definitorias palabras de Octavio Paz (1914-1998): << Poesía y amor son actos semejantes. La experiencia poética y la amorosa nos abren las puertas de un instante eléctrico. Allí el tiempo no es una sucesión: solo hay un siempre que es también un aquí y un ahora>>.
Solo la verdad es una obra que por su contenido histórico, proporcionará al lector la oporunidad de conocer todo lo acontecido en relación a las elecciones de la Organización de Estados Americanos de 1975, en que la República Dominicana pudo haber alcanzado una posición que por su relevancia continental le hubiera permitido un li-derazgo de importancia para su desarrollo y un mayor reconocimiento en el ámbito internacional. Lo que se revela en esta obra, es la respuesta a las tantas interrogantes que el pueblo dominicano y de los países de América Launa, se han hecho durante una década. El lenguaje sencillo, espontáneo y sincero de la misma, permitirá al lector adentrarse en ella sin el menor esfuerzo, hasta llegar a las interioridades que contiene.
Este libro es una propuesta para establecer la convivencia pacífica en nuestras comunidades, que consta de 14 pasos, 4 herramientas y seis soluciones que nos permitirán sembrar los cimientos para frenar, reducir y llevar a su mínima expresión la delincuencia.
Sora ingresa a la universidad con la aspiración de pasar inadvertida, pero este deseo se hace añicos cuando conoce al extrovertido Maximiliano, con quien desarrolla una amistad de ensueño. A ellos se les sumarán Ari y Milo para conformar una especie de equipo invencible. En sus últimas vacaciones, Sora descubre un último secreto de Maximiliano que la hará cambiar su perspectiva de vida y que pondrá a prueba todo lo que han construido. ¿Será la amistad suficiente para superar las adversidades que se erigirán ante ellos?
Sudor de rocío es una compilación de versos que navegan por las turbulentas aguas del amor y la vida.
Los poemas están agrupados en dos libros: Soneteando, compuesto totalmente por Sonetos, clásicos en su estructura; pero de frescas metáforas y Amores y Tormentas, donde se integran versos intimistas y reflexivos.
Ya sea mediante las clásicas rimas de Soneteando o a través del lirismo romántico de Amores y Tormentas, fluyen pensamientos, y pasiones que conminan a amar y soñar; pero sobre todo,a vivir.
Con música de oleaje, Carmen Imbert Brugal escribe su novela.
Entre ola y ola, el tiempo pasa, la vida va y viene y los personajes
nos descubren los detalles con que están construidas sus historias.
Reinos donde el amor, la muerte, el dolor o la ausencia no hacen
más que recordarnos la marina fragilidad de lo cotidiano, la básica
textura de los sueños.