After her role in taking down a well-placed mole inside the CIA, Agent Lyndsey Duncan arrives in London fully focused on her newest Russian asset, deadly war criminal Dmitri Tarasenko. That is until her MI6 counterpart, Davis Ranford, personally calls for her help.
Following a suspicious attack on Russian oligarch Mikhail Rotenberg's property in a tony part of London, Davis needs Lyndsey to cozy up to the billionaire's aristocratic British wife, Emily Rotenberg. Fortunately for Lyndsey, there's little to dissuade Emily from taking in a much-needed confidante. Even being one of the richest women in the world is no guarantee of happiness. But before Lyndsey can cover much ground with her newfound friend, the CIA unveils a perturbing connection between Mikhail and Russia's geoplitical past, one that could upend the world order and jeopardize Lyndsey's longtime allegiance to the Agency.
Red London is a sharp and nuanced race-against-the-clock story ripped from today's headlines, a testament to author Alma Katsu’s thirty-five-year career in national security. It’s a rare spy novel written by an insider that feels as prescient as it is page-turning and utterly unforgettable.
En una época en que la fotografía llegó para atajar el tiempo y los ríos de petróleo manaban como un milagro oscuro de la tierra, Alejandro Plata, un inspector de obras férreas, desaparece cerca del puerto del Cacique. Su hermano y su madre lo buscan en distintos tiempos. Su amante lo aguarda por años. Y, en el trasegar de la búsqueda y a la espera del reencuentro, desembarcan en Colombia el progreso y la explotación petrolera, que no solo violenta las aguas y las tierras, sino que suma desigualdad e indignación al caos social del país.
En esta extraordinaria novela polifónica, un viaje alucinante por los rincones de Colombia, Daniel Ferreira nos empuja a descifrar este lugar y su tragedia de hijos desaparecidos, y nos prueba que lo poderoso y permanente es la naturaleza, y lo fugaz y frágil es lo humano.
«Tengo que escribir sobre el placer que siento al escribir por encima de un dibujo. Esto es lo que hay que decir: entre los 7 y los 22 años pensé que iba a ser pintor. A los 22, murió el pintor que había en mí y empecé a escribir novelas. En 2008, entré en una tienda y salí con dos enormes bolsas llenas de lápices y pinceles; luego, entre el placer y el temor, empecé a dibujar en pequeños cuadernos. No, el pintor que había en mí no estaba muerto».
Desde hace quince años, Orhan Pamuk escribe y dibuja a diario en sus cuadernos. Anota sus pensamientos sobre la actualidad, dialoga con los personajes de sus novelas, confiesa sus miedos y preocupaciones, narra sus encuentros y viajes y reflexiona sobre el amor y la felicidad.
Por primera vez, el escritor que soñaba con ser pintor nos muestra una cuidada selección personal de sus dibujos, una bellísima aproximación a la íntima y prolífica lectura que hace Pamuk del mundo y de la vida a través de un conmovedor mosaico de paisajes y reflexiones. Recuerdos de montañas lejanas se convierte así en un verdadero espacio artístico alejado del diario o las memorias tradicionales, dando lugar a un libro singular e inimitable.