En su remota mansión de los Pirineos, los Watson se preparan para celebrar las fiestas navideñas como una familia cualquiera: reencuentros esperados, mucha comida y bebida y la firme promesa de no hablar de política. Pero los Watson no son una familia cualquiera, ya que entre sus miembros se encuentran los tres inspectores de policía más reconocidos del país: Richard Watson, patriarca y sabueso a la antigua usanza; Eugenio Watson, su hijo, obsesionado con el análisis exhaustivo y científico de la escena del crimen, y Florencia Watson, su peculiar y perspicaz nieta.
Cuando un grito corta el aire helado de la mañana de Navidad, la mansión de los Watson se convierte en la escena de un crimen. Miriam, la hermana mayor del clan, ha aparecido muerta en su cuarto, sobre un charco de sangre, pero sin herida alguna, y con marcas de haber sido estrangulada. Solo hay algo seguro: el culpable se encuentra dentro de la casa. Richard, Eugenio y Florencia -abuelo, hijo y nieta-, tendrán que poner a prueba sus diferentes métodos para resolver el caso antes de que el asesino ataque de nuevo.
Conoce el inicio de la explosiva historia de Ava y Jesse.
Primer libro de la exitosa trilogía Mi hombre de Jodi Ellen Malpas, la reina de la novela erótica.
Ava es una joven decoradora que conoce a su cliente Jesse Ward, un hombre muy atractivo, rico, que sabe lo que quiere y que es el reflejo del éxito. Ella intenta luchar contra la atracción que siente por él sin poder controlar el arrollador deseo que le hace sentir. Él sabe que la quiere a ella y hará todo lo que esté en su mano para conseguirla. Indomable, controlador, autoritario, implacable, dulce, provocador…
Es peligroso.
Es enigmático.
Es absolutamente adictivo.
Es mi hombre.
Ava y Jesse se conocieron en Seducción, el primer volumen de Mi hombre. Su aventura continúa...
Segundo libro de la exitosa trilogía Mi hombre de Jodi Ellen Malpas, la reina de la novela erótica.
Ava y Jesse se conocieron en Seducción, el primer volumen de Mi hombre. Su aventura continúa...
He visto cómo lo miran todas. Lo desean, harán lo que sea por conseguirlo. La respiración se me acelera y siento que no podré aguantar mucho más. Estoy perdiendo el control, y esto empieza a asustarme. Estoy histérica, avergonzada, muerta de celos. Y muy, muy excitada. Él es absolutamente adictivo, sí, y es mío.
Es mi hombre.