Diciembre de 1941. Mientras los nazis siembran el caos en Europa y Estados Unidos intenta mantenerse al margen del conflicto, en Honolulú la apacible vida del inspector Joe McGrady, de la policía de Hawái, da un vuelco cuando le encargan esclarecer la muerte del joven Henry Kimmel Willard, sobrino del almirante de la marina estadounidense destinado en la zona, y de una chica japonesa, ambos asesinados con una crueldad inimaginable en la granja de un hacendado local.
La compleja investigación obliga a McGrady a recorrer el Pacífico, desde Hawái hasta Hong Kong y otros enclaves remotos de la región, mientras la flota japonesa avanza en secreto hacia Pearl Harbor, dispuesta a lanzar el primer golpe de la confrontación militar más cruenta de la historia. Sin embargo, ni siquiera la guerra podrá detener al solitario y sensible McGrady en su implacable búsqueda de una verdad devastadora.
Han pasado dieciséis años desde el epílogo de ¿Solo amigos? Los niños han crecido, Fran consiguió la niña que anhelaba y tal como se preveía los tres chicos Figueroa acaban enamorándose de la preciosa Marta.
Ésta, incapaz de decidirse por uno de ellos se marcha a Londres para aclarar sus sentimientos. A la vuelta no tiene dudas de que es Sergio quien para ella es más que un amigo.
Él es marino mercante y ella una abogada entregada a su profesión, la relación entre ellos está plagada de largas separaciones y breves periodos juntos con las complicaciones, inseguridades y celos que una relación de este tipo conlleva.
¿Será su amor lo suficientemente fuerte para sobrevivir?
Ya han pasado más de dos años desde que el comisario Georges Dupin fue «forzosamente trasladado» a lo que él considera el fin del mundo: Concarneau, en la costa bretona. Allí nunca pasa nada, aparte de los atascos en verano, cuando toda la región se convierte en el destino turístico por excelencia.
Pero una mañana de julio, al inicio de la temporada alta, recibe una llamada. En el idílico pueblo cercano de Pont-Aven se ha cometido un asesinato incomprensible. Pierre-Louis Pennec, el dueño del legendario hotel Central, en el que a finales del siglo XIX se alojaron Paul Gauguin y otros pintores famosos, ha sido brutalmente apuñalado. ¿Quién querría matar a un anciano de noventa y un años, una bellísima persona? ¿Y por qué?
Cuando poco después aparece un segundo cadáver en la costa, Dupin comprende que tiene entre manos un caso más complejo de lo esperado. Aunque la presión de los políticos locales aumenta, y los habitantes de Pont-Aven guardan un silencio obstinado, el comisario, a quien no siempre le resulta fácil morderse la lengua, se mantiene fiel a su peculiar estilo de investigación. Y es que la pregunta inesperada puede arrojar la pista que hasta entonces estaba eludiéndole, y sacar a la luz un secreto por el que valdría la pena matar.