Cinco años antes de morir, cuando la vejez le obligó a hacerse sedentario, Sir Richard Burton publicó en 1895 su traducción de una obra que le había apasionado desde niño, "Las mil noches y una noche". Le salieron diecisiete volúmenes fieles al original árabe, repletos de fuerza y erotismo que se negó a censurar. No resultó una tarea difícil para alguien que había recorrido medio mundo, descubierto el lago Tanganica, escrito un detallado tratado sobre pederastia y acumulado apuntes sobre el tamaño de los genitales masculinos de distintos pueblos. Jorge Luis Borges, a quien entusiasmaba la versión de Burton, escribió que "los árabes afirman que la empresa de leer este libro entero llevaría a la muerte". Para evitar ese riesgo, Diego Garrido ha seleccionado y traducido algunas de sus mejores páginas, que su hermano Arturo se ha encargado de ilustrar. Son relatos que rebosan crueldad y sensualidad con la inocencia de las formas inconclusas de un espejo.
H de H es una explosión de pensamiento, en palabras y dibujos, sobre la tragedia griega Hércules, escrita por Eurípides en el siglo v antes de Cristo. En el mito, Hércules es la personificación de la violencia masculina, un hombre que regresa al hogar después de años en la guerra y se encuentra incapaz de adaptarse de nuevo a la pacífica vida doméstica. En un rapto de locura, asesina a toda su familia y planea su suicidio. Sólo la intervención de un amigo le conduce a la conclusión de que, a pesar de todo, su vida tiene sentido, pues su existencia y su identidad no están irremediablemente impregnadas de los crímenes que ha cometido.
Las novelas 30 sunsets para enamorarte y 10.000 millas para encontrarte forman la Saga Bali, de Mercedes Ron, la autora del fenómeno romántico juvenil del momento. Ahora reunidas en este maravilloso estuche.
Los setenta y tres cuentos y quince fragmentos reunidos en este volumen constituyen la obra narrativa completa de Katharine Mansfield (1888-1923). Su talento para revelar las melancólicas corrientes que fluyen bajo los pequeños incidentes de la vida cotidiana, y su tratamiento desapegado y aun así preciso y minucioso, le han valido la consideración de maestra indiscutible del cuento moderno. Cuadros de familia, escenas matrimoniales, episodios de soledad en parajes idílicos o en abigarrados lugares de tránsito, en Nueva Zelanda o en Europa, anécdotas de la convivencia pasadas por el filtro cáustico de la «conciencia psicológica”, componen su mundo narrativo, donde los momentos críticos de una vida siempre corren el peligro de pasar desapercibidos entre las triviales distracciones e irritaciones del quehacer doméstico. En su momento comparada con Chéjov, a veces pesimista y atroz, con un humor irreverente, hay en sus cuentos, sin embargo, momentos de iluminación y reconocimiento que explican «esta manía de seguir viva» que tal vez le pesa más que la anima. Sus personajes son víctimas, como señala Ana María Moix en el prólogo de esta edición, de la «enfermedad incurable» de «ser sólo el sueño de lo que pudieron ser».
Aunque el nombre de Edith Wharton sea bien conocido para un lector atento –fue la primera mujer en ganar el premio Pulitzer, estuvo nominada al Nobel en varias ocasiones, firmó más de cuarenta libros de todos los géneros–, aún queda mucho por conocer de una de las escritoras más difíciles de encasillar de la historia de la literatura: sus cuentos son un brillante ejercicio de pasión, síntesis, armonía, encanto discreto y un agudísimo sentido del humor que no han llegado a ser todo lo reivindicados que deberían. Este primer volumen de sus Cuentos completos, que comprende los escritos entre 1891 y 1908, nos ofrece una nueva visión de la autora de La edad de la inocencia que sorprenderá a no pocos y hará disfrutar a muchos.
Prologado por la escritora Clara Obligado, la traducción de este volumen corre a cargo de un compenetrado equipo de traductores –Emma Cotro, Maite Fernández Estañán, Eva Gallud y Juan Carlos García– que no solo ha logrado traernos la voz de Wharton de la mejor manera posible, sino hacerlo en el momento y de la forma que se merece.
Pídeme lo que quieras
Tras la muerte de su padre, el empresario Eric Zimmerman viaja a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa de la que se encapricha. Judith acepta formar parte de sus juegos sexuales. Pero la relación se intensifica y Eric teme que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.
Pídeme lo que quieras, ahora y siempre
Después de provocar su despido, Judith decide alejarse de Eric. Para ello se refugia en casa de su padre. Él le sigue el rastro. Las fantasías sexuales están muy vivas, pero esta vez Judith impondrá sus condiciones. Todo vuelve a la normalidad, hasta que una llamada los envía a Múnich. Lejos de todo, y con la aparición del sobrino de Eric, tendrá que decidir si darle una nueva oportunidad.
Pídeme lo que quieras o déjame
Judith y Eric regresan de su viaje tras una boda de ensueño. Él es el hombre más feliz del mundo y no se imagina su vida sin ella; pero, los celos y el afán de protección de él los enfrentan. Judith está encantada con su Iceman particular, aunque se llene el cuello de ronchones. Disfruta de sus juegos sexuales, excepto cuando le susurra que uno de sus mayores deseos es tener un hijo.
Pídeme lo que quieras y yo te lo daré
Eric Zimmerman y Judith Flores siguen tan enamorados como el primer día. Juntos han formado una preciosa familia. Björn y Mel continúan con su historia de amor junto a la pinsesa Sami. Aunque Björn no consigue que Mel se case con él. Ambas parejas se quieren y se respetan, hasta que de repente personas y sorpresas del pasado irrumpen en sus vidas y lo ponen todo patas arriba.